Capítulo 32 - ...eso es lo que pasa.

26.5K 1.4K 175
                                    

CAPITULO 32

Sus palabras me dejan realmente asombrada. No puedo creer que haya dicho eso. Quiero decir ahora, tan pronto. No me esperaba para nada que tuviera esos sentimientos tan profundos hacia mí, mucho menos siendo un hombre.

Ahora sí que se ha vuelto una escena vergonzosa. Yo aquí completamente desnuda, mientras él está esperando algún movimiento por mi parte. Está claro que ha movido ficha, ¡y tanto!

Entonces ahora me toca a mí.

-Ryan... - no me salen las palabras, no sé cómo explicarle mis sentimientos, cómo decirle todo lo que siento por él sin parecer una cursi redomada.

-Mierda. - niega con la cabeza y da un paso hacia atrás pasando su mirada por cualquier lado de la habitación.

-Ey. - me acerco a él y le acarro del cuello para que me mire. Me parece a mí que no lo ha entendido todavía.

-¿Qué?

-Te quiero. - y con esas dos palabras, siento como un enorme tonel se soltara de mi pecho y me sintiera mucho más ligera. Y creo que él tiene esa misma sensación pues su cara vuelve a coger color y sus ojos brillan con la misma intensidad que lo hacían antes.

-Joder nena, me habías asustado. - vuelve a acercarse y me abraza a la vez que me besa. No es un beso largo, pero sé lo que quiere transmitirme con él.

-¿Podemos volver al tema en cuestión? -pregunto con la cabeza agachada pero mirándole a los ojos a través de mis largas pestañas. Es una mirada que nunca falla con él, como bien dijo Donny, no puede negarme nada cuando le miro así y ahora mismo esto es algo que no puedo permitir que me niegue, que nos niegue.

-¡Vaya! Me parece a mí que te estás volviendo una pervertida. Solo quieres corromperme y yo soy una persona muy pura Mia, no juegues conmigo a estas cosas porque... -no le dejo terminar y comienzo a quitarle la camiseta por la cabeza. Veo que capta la indirecta y se calla al momento ayudándome.

Una vez la camiseta está fuera, vuelve a cogerme en brazos y yo enrollo mis piernas en su cintura, esta vez no me sujeta como antes, pero no descarto esa caricia para después. Me tumba en la cama con él encima y junta sus labios con los míos. No puedo evitar bajar la mano por su pecho, igual que él no puede evitar subir la mano desde mi rodilla hasta el lugar que yo quería.

Corto el beso para seguir por su cuello y noto que él se deja hacer mientras poco a poco pierde el control aferrándose más fuerte a mi cuerpo. Mi mano tímida baja hasta la cinturilla de su pantalón y tras unos segundos jugueteando con el botón y la cremallera, lo bajo y mi mano sigue su camino dentro, curiosa por lo que se puede encontrar.

-Mia... - oigo quejarse a Ryan, pero no le escucho. Sigo mi tortura con los labios en su cuello y mi mano adentrándose en la tierra prometida.

Por más segura que parezca, no tengo la menor idea de lo que estoy haciendo. Simplemente me dejo llevar y hago lo que quiero hacer. Y ahora mismo quiero tocarle, por todas partes si es posible y como parece que mando yo en estos momentos, no creo que dure mucho pues Ryan parece estar a punto de perder la compostura otra vez, voy a hacer lo que me plazca.

Lo que siento en mi mano es sin duda alguna mucho más grande de lo que esperaba. Y no solo grande en el sentido de largo, sino grande en el sentido de GRANDE por completo.

Saco la mano rápidamente y me quedo helada.

Oh no, eso no ayuda.

Ryan lo nota y se aparta un poco de mí impulsándose con los brazos. Su respiración es profunda y veo una levísima capa de sudor en su frente. Dios cómo me pone verle así, pero ahora mismo estoy algo cortada y muy nerviosa.

BOXEA COMO PUEDAS (Completa)Where stories live. Discover now