Light & Dark

Capítulo III

— ¡Mikey!  —el ojinegro escucha el llamado de su amigo y levanta su vista—

— Kenchin ¿qué sucede?  

— Te noto muy pensativo ¿que tienes? —Draken mira fijamente al rubio—

Mikey esconde su rostro entre las sabanas de la cama clínica, Draken se preocupa al verlo de esa manera.

— No es tu culpa Mikey, estoy bien. 

— No es eso Kenshin, bueno se que eres muy fuerte, pero de igual forma me aterre, sentía que te perdía... Ademas, solo estoy un poco confundido y... —su voz se quiebra al decir lo ultimo—

— ¿Y?

— Enamorado. —la orejas de Mikey se tiñen de rojo y alza la cabeza con rapidez, casi se asusta la cara de su amigo lleno de horror— ¡Espera! ¡No es lo estas pensando! 

— Mikey casi me matas del susto.  —el levanta su mano y jala la mejilla de su amigo—

— ¡A-Ay! ¡eso duele Kenchin! —se separa de su amigo, se acaricia su mejilla lastimada, hace un puchero y una lagrimita sale de su ojo izquierdo.—

— Entonces, explícate Mikey. —el cruza sus brazos y enarca una ceja—

— Esta bien. —el ojinegro suspira, ve a su amigo fijamente— Kenchin cuando tu estabas en urgencias, logre ver algo que me dejo tan impactado, tal vez fue mi imaginación pero logre ver a una chica sonreírme.—

— ¿Una chica? ¿no se te acerco?  —el pregunta con interés—

— No, estaba muy lejos, pude notar que tenia una capa cubriendo todo su cuerpo, pero logre notar su sonrisa. —Mikey apoya su codo en la cama, recarga su mano en su mejilla derecha, mirando hacia la nada con un pequeño rubor en su mejilla— esa sonrisa... esa sonrisa me dejo tan. —escucha como su amigo ríe y el hace una gran puchero. 

— ¿Una chica con una capa?. —abre sus ojos como platos y el comienza a recordar la misteriosa chica que termino de sanarlo—  Mikey, creo que se a quien te refieres. Esa chica con la capa fue la que me logro sanar antes de llegar al hospital.

Mikey se levanta de golpe y se acerca mas a su amigo.

— ¡¿Que?! Kenchin ¿pudiste verla? dime como es ¿como es su voz?  —Draken estaba mas sorprendido por escuchar eso de Mikey, sonríe y palmea la camilla para que su amigo se siente a su lado.—

— En realidad no logre ver su rostro, pero si logre ver su tono de tez y su cabello, que por cierto su color de cabello no parecía tan común. —dice con la mirada hacia arriba y con el gesto pensativo.—

—  ¿Y como es su cabello? —Mikey pregunta con la mirada tan feliz y se pudo deslumbrar un pequeño brillo en sus ojos negros.—

 — Su color de cabello era rosado. —termina la oración con la mirada hacia el techo recordando el momento en que logro verlo—  ¿Mm, Mikey? ¿que tienes?  —logra ver a su amigo con la mirada perdida, pero se sorprende aun mas otro destello de luz en la mirada del ojinegro, sonríe al verlo de esa manera— Mikey.

— ¡Ah! lo siento Kenshin. —ríe de manera nerviosa pero con un matiz de alegría en su voz- termine de imaginarme a la chica misteriosa —el mira hacia la ventana, viendo con claridad el cielo tan despejado y resplandeciente por el sol—  Kenshin.

— ¿Mmm? —responde con su voz tranquilo—

— Tal vez suene ridículo lo que diré, pero... Si llego algún día a perder la cordura, esa chica me ayudara a calmarme. -el ojinegro entrecierra los ojos hasta cerrarlo por completo, en eso entra una suave brisa por la ventana, haciendo que la cortinas blancas hagan ondas por la suave brisa—