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 Entre los arboles de primavera dentro de una casa de dos patas un pequeño gato rojizo se defendía de un par de gatos musculosos que arañaban su pelo y jalaban de su cola, como un rallo de luz un gato negro se abalanzo sobre el primero el cual era un macho atigrado oscuro con una oreja rota, el pequeño color negro con su pata blanca araño el pelo de aquel salvaje con sus garras desenvainadas dejando variadas heridas sobre su pelo, chillo de dolor cuando el acompañante del atigrado lo agarro del pescuezo y lo arrojo a la valla—¡Dejen en paz a mi hermano!— bufo el pequeño rojizo— Mira Garra de Tigre, ¡el pequeño minino casero se cree todo un guerreros!— río el gato plateado— Enséñale una lección para que no vuelva a pasar de su estúpido territorio de minino casero — El atigrado empezó a acorralar al pequeño contra la cerca, sin miedo con su pelaje erizado araño la nariz del atigrado desorientándolo por algunos segundos suficientes para pasar entre sus patas y escapar — ¡Corre Rusty!... yo me encargare de estos zopencos...— gruño mientras erizaba su pelaje— Ya era de noche y  el Pequeño Rusty aun buscaba un lugar donde refugiarse, parecía que estaba por llover y las nubes se estaban oscureciendo desde lo alto, el pequeño miro hacia arriba con curiosidad mientras miraba las copas de los arboles que estaban muy lejos de sus zarpas, estaba asustado pero muy por dentro estaba emocionado de lo que le esperaba en el bosque el cual siempre quiso visitar algún día, movió sus pequeñas zarpas sobre la tierra y con torpeza se dirigió debajo de un árbol al empezar a sentir las primeras gotas de lluvia, ya agazapado debajo del árbol  decidió que tendría que dormir, ya era de noche y ya no tenia a su hermano Tiny para que le ayudara a vivir en el bosque, ese pensamiento pareció darle un frío golpe pues se dio cuenta que lo había abandonado en la pelea, tal vez ahora el este muerto o muy herido por su culpa, aunque ya era demasiado tarde,  solo le quedaba esperar a que el sol volviera a despertarlo. El viento agitaba el pelaje de la pequeña bolita rojiza que se había quedado por debajo de un árbol, ese día no había necesitado ser despertado por la luz del sol, se había quedado toda la noche escuchando las gotas de agua mientras recordaba con nostalgia cuando jugaba con Tiny en los charcos de agua, su estomago sonaba pero estaba demasiado desanimado como para tan solo tratar de cazar algo por su cuenta, entonces a lo lejos pudo oír pequeños pasos, pensando que era algún roedor se levanto torpemente y se abalanzo hacia el sonido para luego encontrarse con una gata blanca la cual como un relámpago lo inmovilizo en el suelo— Que te pasa minino casero, ¿te crees muy salvaje eh?.. —gruño molesta—el pequeño minino le tambalearon los bigotes pero con la fuerza que conservaba empujo a la gata— Eres fuerte, ¿andas practicando ? así no creo que te vaya bien, si yo no fuera solamente una Solitaria un guerrero como Estrella de Cardo te hubiera arrancado la cola— dijo con un tono un tanto curioso— ¿ E-estrella de Cardo?... que tipo de nombre es ese? — pregunto sin bajar la guardia—Miren quien lo dice, tu especie suele tener nombres mucho más extraños... que tipo de nombre es Centeno o.. Tiger? no encuentro sentido a tales nombres tan absurdos...—maulló mientras se acomodaba sobre las hojas—En fin.. ¿Cuál es tu nombre?—pregunto con algo de intriga—.....Rusty....— maulló en voz baja— ..Interesante... — recalco la gata blanca—Sígueme... — le ordeno— Te mostrare un lugar donde podrás vivir— ¡¿Enserio?!—maulló con emoción— No hagas ruido o podrías atraer a una Patrulla del Clan del Trueno— le regaño con algo de impaciencia. Luego de algunas horas de caminar por el bosque encontraron una cueva de Tejón abandonada, el olor era de hace ya unas lunas y decidió que ese seria el nuevo hogar de Rusty— Es aquí.. — afirmo dándole paso a la cueva con la cola— Woa es... realmente genial pero... ¿ya te iras?...


»🦋⁞𝐖𝐀𝐑𝐑𝐈𝐎𝐑 𝐂𝐀𝐓𝐒-| 𝗔𝗨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora