CAOS

18: ISLA

JEN

Estamos en la isla, Mathew compró una isla, en el primer año de novios, pero nunca hemos venido, hasta el momento de hoy, Mathew no me da tregua, llevamos tres dias encerrados en la habitación, me ha dado en tan posiciones que mi cuerpo duele, pero al mismo tiempo pide placer.

Se corre dentro de mi y agradezco haberme puesto la inyección de cada tres meses, mi cuerpo al igual que el suyo está pegajoso, pero eso no parece importarle ya que me trepa encima mío, y mete de nuevo su miembro en mi, no se mueve y yo tampoco, solo nos miramos. Aún pasando los años, sigue intimidándome.

- ¿qué piensas?

- En lo Tonta que fui -susurro- Armé todo este teatro, te aleje de ellos.

- No te recrimino -dice y me hace agachar acostándome encima de él y dentro de él.

- Tu familia es una mierda, Jen -dice y asiento- Necesito matar a tu padre.

Lo abrazo con fuerzas y me besa, me lleva cargada a la bañera, pone esencias y me trepa encima mío, lo miro y sonrío, me doy la vuelta acostándome encima de él, mi cabeza la coloco aún lado de su pecho.

- Has llamado a Matt -digo- ¿Abby?

- Matt está bien, tiene a cinco guardaespaldas, Abby tiene tres niñeras a su servicio, aparte de las de Matt, y dos guardaespaldas, ambos están en casa de mis padres.

- esto quiere decir que Max aumentó la seguridad por sus nietos, ¿verdad? -digo riendo

- Solo falta que le saquen sangre para entrar a la casa-dice

- Extraño a mis hijos, mis bebés -digo cerrando mis ojos

- Matt, será peor que yo, será una versión mala, ayer me llamaron para informarme que despidió a su niñera, por no dejarlo jugar con Abby -dice y abro los ojos

- ¿porque? -digo

- Matt debe entrenar defensa, Jen, y la niñera le dijo que debí ir a entrenar, su chofer lo estaba esperando, pero él no quería ir, quería quedarse con Abby y la despidió -dice tranquilo jugando con la espuma.

- No debes ser así, Matt tiene una responsabilidad, no puede despedir a las personas, así por así, no tiene el derecho.

Se ríe y me aprieta el culo, jadeo y se lo que tiene en mente.

- mi tercer hijo, puede estar aquí -dice y sobando mi barriga.

- Tengo la inyección -digo

- Mi apellido es Capponi-dice y niego riendo- ¿puedo?

- Puedes -digo dándole acceso a mi culo

- Eres una delicia -dice metiendo su dedo en ambos lados.

Mathew me penetra por el culo y me agarró de sus caderas, duele, pero al mismo tiempo es excitante. Se que no ha entrado por completo, pero su punta duele, tan gruesa y larga, poco a poco va entrando.

- Entra ya! -digo lujuriosa

- De que sales embarazada sales -dice riendo

- Ya quisieras, Abby y Matt, están bien -digo

- eso mismo dijo mi mamá, y mira a Mailen, siendo querida y amada -dice

- ¿si podemos tener más? -pregunto gimiendo

- Si...

Me gira sin salirme de el, doy saltos hasta llegar al orgasmo, se corre dentro mío y lo abrazo cansada.

Vota el agua de la tina y pone para ya enjuagarnos, me quedo hay quieta sin salirme de él, aunque parece que tampoco le molesta a él,

- Nuestras vidas son un caos -digo

- Un caos lindo de vivir -dice

Poco a poco mis ojos se van cerrando y lo ultimo que veo es a Mathew tocándome una teta, típico de él.

***

Aquí estuvo Ale