𝟏 | 𝐏𝐄𝐑𝐅𝐄𝐂𝐓 [ 𝒍𝒊𝒂𝒎 𝒅𝒖𝒏𝒃𝒂𝒓 ] ✔

[13] ✰ creatures of the night

CAPÍTULO TRECE┆CRIATURAS DE LA NOCHE

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—Muy bien, aquí vamos —decía el padre adoptivo de Malia, acompañado de un grupo de personas alrededor del árbol caído, que obstruía el camino —. Todos, sujétense bien. Y levanten con las piernas. Ahí tienen su fuerza. ¡Uno, dos, tres!

Todos hicieron el máximo esfuerzo que pudieron, pero como si de magia se tratase, el árbol empezó a elevarse hasta separarse de sus manos. El hombre suspiró y miró a las dos hermanas que estaban a su lado.

—Piernas fuertes —dijo Malka ante las miradas confusas. Sky sonrió.

Luego, los tres fueron hacia su auto.

—Papá, ¿tu teléfono funciona? —preguntó Malia hacia su padre adoptivo. El hombre sacó el suyo.

—No, creo que la tormenta afectó las torres —respondió su padre, y las miró a ambas. Se notaban nerviosas—. Todo va a estar bien. Lo sabrán cuando haga falta.

Malia y Sky habían esperado ansiosas lo que restaba de las vacaciones que algún mensaje o correo les llegara sobre si habían pasado de curso. La mayor al último y la menor al penúltimo.

—¿Quieres que te lleve a la escuela? —preguntó el hombre hacia su hija, que le había dicho que tenía que ir con los chicos a la escuela en unas horas, sin dar más detalles.

Sky no sabía qué harían, sólo sabía eso. Pero Malia le había comentado que ella lo sabría cuando estuviera en su último año junto a Liam y Mason.

Entonces, el tan preciado Jeep color azul se hizo presente.

—Ya tengo quien lo haga —respondió Malia, y las dos hermanas se acercaron al vehículo.

—Perdón por llegar tarde —se disculpó Stiles, asomando la cabeza por la ventana.

Liam claramente no perdió el tiempo al ver a su novia y le dio unos golpecitos a Scott para que le diera espacio para salir, y al bajar del Jeep, fue corriendo alegre hacia su novia. Como un perro viendo a su dueña.

Sky aguantó la risa en el momento en que su novio se acercó a ella con una sonrisa, como si le hubieran dado un dulce, y agarró su rostro entre sus manos para poder besarla.

La coyote llevó sus manos a su cabello para jugar un poco con este, y el beta llevó las suyas hasta su cintura.

Malia también se había acercado a Stiles para besarse.

Scott solo quedó perdido en su mundo.

—Ustedes recuerdan que tengo un arma, ¿cierto? —les dijo el Sr. Tate, cuando ambas parejas se separaron.