Prólogo

78 19 2
                                    

—¡¿Se puede saber que te ocurre?! —exclamo cuando Adam cierra fuertemente la puerta de su casa en mi cara.

—Nada que te interese, Olivia.

—Claro que me interesa, Adam, eres mi novio. —le digo deteniéndome frente a el para que haga lo mismo.

—Eso no hace que tengas que saber todo lo que me pasa.

—No todo, pero quiero ayudarte, no me dejas entrar, siempre te cierras.

—¿Cómo quieres que me abra con alguien como... tú?

Si sus palabras eran con la intención de herirme, lo logró.

Pero demostrarlo jamás será una opción.

—¿Con alguien como yo? Por qué mejor no hablamos de las personas como tú, con aires de grandeza y superioridad, pasando por encima de las personas que se preocupan por ti sin remordimiento. —cruzo mis brazos alzando mi rostro para mirarlo a los ojos.

—Mejor hablemos después, Olivia.

—No, estoy cansada de que siempre tener que esperar a que tu quieras hablar y me ignores. Me duele que seas así.

—Live, perdón. —intenta tomar mi mano y la aparto, puedo notar el arrepentimiento en su mirada.

—Me rindo. —evado su mirada, no quiero que me vea llorar.

—¿Cómo que te rindes? — alzó sus cejas cayendo en cuenta de la situación.

—Me cansé.

—¡Olivia! —escucho que me llama, pero no pienso voltear.

—No me busques, Hamilton. —le digo entrando a mi auto.

Lo enciendo y puedo sentir una presión en mi pecho.

No más Adam Hamilton.


Detrás Del Reflector Where stories live. Discover now