6 | "Cartas sobre la mesa"

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–Ayer– repetí– Erwin dijo que llegarías más tarde pero no fue así.

–Oh sí– sacudió su cabeza – Lo olvidé por completo.

Levi se abrochó el pantalón y salió de la habitación sin dirigirme la palabra.

¿Se arrepintió?

Arreglé mi uniforme y mi cabello para después abrir lentamente la puerta y salir vigilando que nadie estuviera cerca.

–Saori– me hablaron por detrás.

–¿Si?– me di media vuelta para ver a la persona que me buscaba, era Marco, el pasante universitario que buscaba completar sus horas de servicio atendiendo llamadas.

–Te estuvieron llamando al teléfono de la recepción – comentó.

–¿Sabes quién?

–No me quiso dar su nombre pero era un hombre, me dijo que después te buscaría.

"Porco" pensé.

–Gracias Marco– sonreí volteando para seguir mi camino.

–Una cosa más– me detuvo – quería pedirte ayuda... Escuché que eres buena para los chicos.

–Agh– rodeé mis ojos y avancé, ya sé a dónde quería llegar.

–¡No! – habló alto– No quería ofender o algo por el estilo, es que hay un chico que...

–Te gusta– terminé la oración por él.

–Ajam– desvió la mirada –Sé que no es lo mismo pero alguna cosa me servirá.

Miré mi reloj, aún quedaban 30 minutos para que mi descanso terminara.

–¿Tienes hambre? – pregunté amable y él asintió – Ven, vamos a comer y platicamos un poco– invité.

Erwin:

Seguí los pasos de mi padre convirtiéndome en profesor, a diferencia de él, yo escogí enseñar en una universidad

Estaba en mi hora libre, el momento indicado para mensajear con Saori.
Quería verla una vez más o ¿Era demasiado pronto?

"Levi es muy tímido conmigo en el trabajo, apenas y me habla"

–Ay Levi, parece que tú también mientes– murmuré al ver el mensaje que Saori mandó.

Apagué el teléfono para evitar reclamarle a mi pareja antes de tiempo.
Si ella trabaja con él seguramente ya le habrá preguntado sobre su ausencia en nuestro encuentro.

Nos esperaba una larga noche discutiendo pero nada que no pueda sobrellevar.

–Pff– suspiré recargandome de la silla con las manos entrelazadas sobre mi abdomen. Sonreí al imaginar el escenario que viviría más tarde. 

Al llegar a casa, Levi aún no se encontraba, si tenía el mismo horario que Saori no tardaría en llegar.

Me senté en el comedor a pensar, preparaba discurso tras discurso en mi mente, quería estar listo para cualquier situación, en el peor de los casos terminaríamos peleados por mucho tiempo.

Escuché la puerta abrirse, seguido de las fuertes pisadas que Levi daba cuando algo le molestaba.

–Aquí estás – comentó el pelinegro pasando de largo a la habitación –Voy a leer, no molestes.

–Aquí vamos– murmuré levantándome para seguirlo.

Entré a nuestro cuarto, él apenas estaba tomando un libro de historia entre sus manos.

Tentación compartida | Eruri x OCDonde viven las historias. Descúbrelo ahora