Our Secret || chuuves

08

Poco a poco el tiempo pasaba cada vez más rápido, El hora matrimonio de las jóvenes volvió a ser una gran noticia, pero esta vez no solo España sabía de el, si no en todo Europa.

Varías personas de clase alta querían visitar a Jiwoo y Sooyoung y conocerlas en persona, como si se tratase de una atracción.

Habían pasado ya casi tres meses desde que ambas jóvenes se encontraban detenidas en Portugal y el jóven matrimonio se había hecho algo cercano al acalde.

-Yo ya no puedo retenerlas más, Sooyoung -dijo el hombre mientras soltaba el humo del cigarro -Pero si las dejo ir, las van a deportar.

-Lo sé... -Respondió para luego suspirar.

Ambos se quedaron en un pequeño silencio en el cual la música en aquella vieja radio se apoderó.

-Quizá si yo las dejara ir, esto es solo un ejemplo -La pelinegra observó al acalde con ilusión al escuchae aquéllas primeras palabras -El día antes de la salida del barco y pusiera en los formularios una fecha, digamos... dos días después...

.

.

Ambas jóvenes se encontraban guardando sus ropas y pertenencias en una vieja valija marrón de cuero.

Sooyoung observaba atentamente a Jiwoo, notandola algo triste y enojada.

-Jiwoo, ¿estás bien? ¿pasa algo? -Preguntó mientras dejaba una sábana al costado.

Jiwoo no dijo ni una sola palabra y solo nego con su cabeza.

-Pensé que estarías contenta con que nos fuéramos...

-Y lo estoy... -Respondió -Créeme.

La pelinegra observó a la castaña con confusión, pero continuó doblando las sábanas.

-No lo pareces... Ya nos vamos a ir de aquí, de esta cárcel -dijo Sooyoung con una sonrisa en su rostro.

Jiwoo observó a los lados.

-La cárcel esta bien... Lo que no esta bien es ahí afuera, donde somos un fenómeno de feria. Donde la gente nos mira, donde nos burlan y donde no hay escapatoria... Ni nunca la habrá.

La pelinegra solto las sábanas y la observó con los ojos llorosos.

-Por eso nos casamos, por eso ideanmos lo de Adrián...

La castaña la interrumpió antes de que pudiera seguir hablando.

-Pensamos que así nos creerían, pero no fue así...

Sooyoung se acercó lentamente a Jiwoo y se arrodillo frente a ella tomandola de las manos.

-Mi amor...

-Sooyoung -Jiwoo le aparto las manos rápidamente.

La pelinegra sollozo sobre las rodillas de la castaña, haciendo que esta la vea con desaprobación.

Sooyoung se para y limpió un poco sus lágrimas y tomo con sus manos cuidadosamente el rostro de Jiwoo.

-Escúchame -dijo mientras la observaba fijamente -A pesar de que te amo más que a mi vida... Si no quieres que nos marchemos todavía de aquí por miedo de que nos vean como un fenómeno, lo entenderé.

La castaña se quejo y suspiro apartando bruscamente las manos de pelinegra de ella.

-Te esperaré siempre, Jiwoo. Siempre.

Jiwoo tiro bruscamente su ropa contra el piso para luego pararse de la cama he irse hacía la otra punta de la celda. La castaña giro a observar a la pelinegra que aún se encontraba ahí parada.

-¿Es que aún no lo entiendes?

Ambas se quedaron en un pequeño silencio.

Jiwoo se acercó a Sooyoung y tomo fuertemente sus manos.

-Yo si me quiero ir ya de aquí, pero simplemente tengo miedo de que nos detengan y deporten -La castaña recogió aquella prenda que había tirada y la guardo en la valija.

.

.

Ambas jóvenes se encontraban despidiéndose del acalde y su mujer, los cuáles se habían encariñado un poco con ellas.

-Muchísimas gracias a ambos -dijo Jiwoo mientras subía al pequeño carruaje.

El alcalde tomó las manos de Sooyoung y la observó con los ojos llorosos.

-Ciuda de ella y cuida de ti...

Sooyoung asintió con la cabeza y apretó fuertemente la mano del alcalde.

Ambas jóvenes se despedían sacando sus cabezas y manos por las pequeñas ventanas de aquel carruajes.

.

.

Ambas habían logrado subir aquel gran barco, burlando a las autoridades de Portugal.

-Lo logramos...

-Si -respondió la pelinegra -Pero todavía no hemos llegado a Buenos Aires, asi que no lo logramos del todo.

La castaña dejo escapar una pequeña risa antes las palabras de la pelinegra

-Pero aún así ya podremos estar juntas sin mentiras y...

Las palabras de Jiwoo fueron interrumpidas al sentir los labios de Sooyoung que de una manera suave y tímida tocaron los suyos.

-Te amo...

Fin.