Te conocí

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Era algo muy ilegal, demasiado, Vegetta tiene reglas muy estrictas sobre eso, algunos hacen oídos sordos pero se llevan su castigo de los dioses y el gran enojo de triple siete... Aunque, no es tu culpa si no sabes que es ilegal, verdad? De alguna forma eso te salva el pellejo.

Quackity estaba picando para poder conseguir materiales y así hacer diversos artículos que necesitaba para el hogar que construye, pensaba ir con Luzu pero al ver que se había desconectado, mejor dicho, está durmiendo, decidió dejarlo descansar lo merecido, de cualquier forma otro de sus objetivos era ir a buscar diamantes para unas cuantas minas, por lo que no le dijo ni una palabra a los otros para pedir compañía, ya tenía unas cuantas hechas, unas combinadas con la dulce tierra, listas para ser puestas y que exploten en la cara de alguien despistado, entonces, llegó a un lugar extraño... Era una sala con distintos portales, cada uno con su propia descripción, leyó uno que decía "Dream-Smp" y bajo del nombre estaba una simple carita feliz, si bien sus recuerdos eran vagos cuando llegó a Karmaland, aquello le iluminó un tanto sus memorias perdidas, por lo que no dudo en entrar.

:]

Casi llora de la emoción, todo había cambiado, parece que en ese mundo las cosas se dejaron atrás y los muertos regresaron y los crímenes pasaron, había un especie de tratado de paz, un nuevo mundo pacifico y olvidado de crímenes, con todos supuestamente reformados, aunque con ello las construcciones también se fueron, ahora que todo esta relativamente normal podría regresar otra vez, volver para hacer las paces con todos y estar con sus amigos... Pero, seguirá viviendo en Karmaland, hay un destino que debe cumplir ahí todavía... Aunque no sin antes entrar a los otros portales claro esta, tiene curiosidad de ver otros mundos, igual el rayo de los dioses no lo alcanza allí, está vez lo hará a escondidas porque luego lo vetan si lo descubren y le llegan a avisar a su mundo o sucede algo catastrófico por pasar donde no pertenece, aunque... Dioses, conoció a alguien por accidente al tropezar, descubrió que no se aplicaban las mismas leyes, ni las mismas creaciones, incluso la muerte, el pobre no sabía que era una mina inofensiva, era de su misma nacionalidad también, por lo que se entendieron bastante rápido con ese ámbito, y en mente tenían las misma locuras que llegan al segundo, por más ilegal que fuera, el joven lo trajo al mundo de Karmaland para enseñarle sus maravillas, picaron y picaron, por lo que hubo más minas por montón, con eso ambos salieron de la cueva.

-¡¡Esta es la venganza del Skelman!!- exclamó Missa con una mina en mano saliendo de la tierra- aunque no tenga en si una justificación...-

-¡¡A conquistar territorio Español!!- gritó Quackity corriendo detrás del chico de cabellos semi largos.

:]

-Me cago en- dijo Vegetta salió de su hogar después de que dos chico explotarán su entrada, era común por lo que eso lo enojaba aún más al ser siempre el blanco- ¡¡¡vengan acá!!!-

-¡Córrele wey!- al momento de saltar Missa activó el inventario y en segundos sacó un bote de agua, haciendo que ninguno reciba daño de caída, en la persecución lanzaron minas casi por doquier, teniendo a medio mundo contra suya, menos Luzu por pedido de Quackity, según el seguía durmiendo.

-¡¡Mexicanos al grito de guerra!!- ambos alzaron sus voces para cantar el himno nacional- el acero aprestad y el bridón... ¡¡y retiemble en sus centros la tierra!!- el mayor encendió el TNT perdido en la casa del chico morado y lo lanzó a un lado, explotando al momento- ¡al sonoro rugir del cañón, tun tun tun!- chocaron puños antes de meterse al hueco donde se encontraban los portales.

-¡Kaboom!- antes de que entrarán los otros, el chico de carita sonriente tapó la entrada con otra explosión.

-Guerra, guerra, sin tregua al que intenté~ de la patria marchar los blasones...- continuaron cantando mientras bajaban hasta la cueva- ¡guerra, guerra, los patrios pendones!- en un momento se acercaron a un portal al escuchar los gritos de Samuel, uno muy enfadado- de las olas de sangre empapad- al caer de espaldas al portal fueron recibido por una máscara blanca con una sonrisa simple, con lo poco que se veía de su boca se notaba como estaba torcida de una manera no feliz.

Miss DreamWhere stories live. Discover now