Seamos un secreto (Rubius)| Adaptada | Completa

Capitulo 8

De nuevo desperté llorando y bajé a tomar algo, cuando miré a mi alrededor note que Ruben estaba en la cocina sentado en la mesa...
-¿Pesadilla? -Me preguntó.
-Si. -Ambos teníamos los ojos llorosos.
-Me viene atormentado todas las noches, una niña... no recuerdo bien quien era.
-Yo veo a un niño, despidiéndose... -Ruben me miro sorprendido.
-Esa niña luego se iba en un avión, yo lloraba desconsolado. -Esta vez fui yo la quien se sorprendió.
-Luego yo lloraba golpeando la ventanilla de un avión y gritaba a mi madre cuando me alejo de él...
-Nunca más la volví a ver... -Dijo él acercándose a mí, en ese momento todas esas imágenes y recuerdos se me vinieron a la mente, todos juntos mientras lágrimas caían por mi mejilla.

Al reaccionar vi a Ruben que me miraba fijamente, pero antes de que pudiera hablar salió corriendo a su habitación, yo solo me quedé parada mirando al suelo.

**
Al fin reaccioné y fui corriendo hacia la habitación, cuando abrí la puerta vi a Ruben en la cama llorando boca abajo, abrazado a una almohada. No salían palabras de mi boca...

-Doblas... -Dije llorando.
-Sal de acá, no quiero verte, ¡quiero que te vayas! -Dijo mirándome con sus ojos rojos.
-Por favor...
-No puedes ser tú... ¡Tú no puedes ser ella! -Dijo de nuevo abrazando la almohada.
-¡¿Y tú crees que estoy feliz?! MEJOR PIENSA ANTES DE HABLAR. -Dije roja y gritando.
-¡VETE AL DIABLO! ¿TIENES UNA IDEA DE CÓMO ME SENTÍ CUANDO ME DEJASTE, CUANDO TE FUISTE Y ME DEJASTE ABANDONADO? -Dijo levantándose y dirigiéndose a mí.
-¿CREES QUE YO QUISE? ¡¡DOBLAS, ERA MUY PEQUEÑA, NI SIQUIERA LE PODIA DECIR A MI MADRE, SI TUVIERA LA EDAD DE AHORA ME HUBIERA QUEDADO PERO NO PUDE HACER NADA!! ¿No viste como lloraba en la ventanilla? -Dije con la mirada triste y con las lágrimas que recorrían mis mejillas.
-¡NO TIENES UNA IDEA DE CÓMO SUFRÍ, NO LO SABES! ¡TE ODIO _____, TE ODIO!
-¡YO TAMBIEN TE ODIO! DESDE QUE ERES FAMOSO SOLO ERES UN CHICO AGRANDADO Y SOBERBIO ¿QUÉ PASO CON ESE NIÑO DULCE, QUE ME DABA ESOS TIERNOS ABRAZOS? -Dije muerta de dolor, no quería recordar el pasado.
-Éramos niños... -Dijo bajando la mirada.
-¿Y esa promesa? -Pregunté.
-Gracias a ti se fue al diablo, ya está rota... -dijo acostándose de nuevo
-Te odio con toda mi alma Doblas... Te odio.
-Ya somos dos... -En ese momento incómodo entró mi mamá y Tania a la habitación, se dieron cuenta de lo que pasaba pero ninguna dijo nada.

A la hora de desayunar estábamos él y yo, cada uno en una punta de la mesa, no se habló de nada, nuestras madres se mostraban muy tristes, pero tampoco dijeron nada. Pasaron las horas y comimos. Igual que en el desayuno cada uno se sentó en una punta de la mesa.
A la tarde decidí salir a dar una vuelta, no aguantaba tener que estar todo el día en esa casa metida. Al salir, choqué con una chica que iba con otras dos.

-Perdón, no miraba por donde iba...
-¡No pasa nada! -Contestó una chica con el pelo ondulado. -Me llamo Kate y ellas son Lana y Cata. -Dijo mientras señalaba a las chicas que le acompañaban.
-Yo me llamo ____.
-¡¿Chicas llegamos tarde al cine, vamos?! -Dijo Lana.
-Si vamos.... -contestó Cata mirándome.- Sé que no nos conocemos pero... ¿Quieres venir con nosotras? -no dudé ni un segundo en contestar.
-Si no os importa...
-Obvio que no -Dijo Kate. -¡Vamos!

Pasé una tarde divertida, a pesar de mis recuerdos que no dejaban de torturarme. Cuando acabó la pelicula llame a mi mamá para a ver si podía cenar fuera con ellas, ella no se negó. Kate, Cata, Lana y yo nos pasamos los teléfonos y quedamos en salir otro día, pero esta vez con Lily, morían por conocerla.
Cuando llegue a casa, subí a nuestro cuarto. Ruben no estaba así que entré al baño. Me duché y me puse mi pijama, apagué la luz del baño y salí. Ruben ya estaba acostado, todavía con los ojos rojos e hinchados. Apagué la luz de la mesita de entre medio de mi cama y la de Ruben. Y dormí sin pesadillas.
A la mañana siguiente, me desperté y miré a Louis, él también me miró pero no cruzamos palabras. Cuando salió me vestí, bajé abajo y vi a Martin tratando de subir las escaleras solito, lo tomé en brazos.

-Martin, ¿Dónde vas tu solito?
-¿Mamá? -Dijo mirando para todos lados.
-Mamá debe estar con Tania... ¡¡MAMÁ!! -Grité, justo pasó Ruben.
-No grites, hay vidrios y con tu voz nos quedaremos sin ellos. -Dijo dirigiéndose a la cocina.
-Cállate Doblas, no tienes por qué decirme lo que piensas, guárdate tus comentarios en el medio de...
-¡Shh! Hay niños ____ -Dejé a Martin y entré a la cocina a prepararle el desayuno. Ruben estaba preparándose un sándwich.
-Idiota, ¿viste a nuestras madres?, claro, que no creo que las hayas visto... debes estar muy ocupado mirándote al espejo ¿verdad?
-Claro que se donde están, solo que de tan apuesto que soy...
-Veo porque no tienes novia... -Dije mientras le preparaba a Martin un vaso de leche.
-Si, tuve una y no funcionó... de hecho tengo más de millones de chicas atrás mio y creo que tú eres una.
-Lo era... -Dije bajando la mirada
- ¡Ajá! Lo sabia, así que eras mi criaturita...
-Te equivocas, yo te amaba cuando tenías 6 años, luego de dos años de sufrimiento por perderte, me olvidé completamente de ti.
-Cállate, no quiero escuchar nada con respecto a eso -Dijo él.
-¡ACEPTA QUE ESA NIÑA SOY YO!
-¡YA LO SE, YO TE AMÉ, TE AMÉ CON LOCURA, TAN SOLO SIENDO UN NIÑO PERO TU ME DEJASTE Y POR ESO TE ODIO CON TODA MI ALMA!
-¡PERO YO TE ODIO MÁS PORQUE NO QUIERES ACEPTAR QUE NO FUE MI CULPA!
-¡YA BASTA! -Dijo tapando sus oídos
-Niños... -Escuchamos la voz de mi madre.

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Si quereis saber cuando voy a subir capitulo de esta novela o la otra que tengo, podeis ir a mi muro, ay estaran los dias.
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