¡𝙴𝚡𝚙𝚕𝚘𝚜𝚒𝚘́𝚗 𝙳𝚎 𝙰𝚖𝚘𝚛! [𝙱𝚎𝚘𝚖𝙷𝚢𝚞𝚗]

Despedida.

El día tan menos esperado para BeomGyu había llegado.

El día de hoy, TaeHyun, el chico del cual se había encariñado estos últimos meses se iba a estudiar por un año completo a Harvard.

Estaba feliz, feliz porque TaeHyun tendría una nueva oportunidad de experimentar algo nuevo en otro lugar, feliz porque TaeHyun estaba feliz.

BeomGyu había pasado toda la noche despierto, viendo al techo, sintiendo como su corazón le dolía al recordar que TaeHyun se iba y no podían tener algo a la distancia para evitar malos entendidos por parte de los dos.

Tal vez sí BeomGyu fuera menos inseguro podrían intentarlo, pero tanto él mismo como TaeHyun no querían hacerlo, tampoco querían complicar las cosas.

TaeHyun y BeomGyu habían entrado al aeropuerto juntos, junto con SungHoon que venía con HueningKai y otra compañera más. Ellos tres eran los elegidos para ir a Harvard por un año. Mientras que otros de Harvard viajaban a Corea.

BeomGyu iba de la mano con TaeHyun. Al llegar a donde tendrían que pasar, se miraron.

—Supongo que es un hasta pronto. —Dijo TaeHyun con una sonrisa leve—. ¿Estarás bien?

—Sí prometes hablarme cuando estés desocupado, estaré bien. —Sonrió—. Cuídate mucho, por favor, dicen que en Harvard hace mucho frío.

—¿Por eso el apuro de comprarme todos los chalecos de la tienda? —Preguntó con una risa—.

—Bueno, tampoco quiero que te enfermes... El cambio de clima te puede afectar porque no estás acostumbrado, por favor, cuídate. —Dijo con un puchero—. Lo digo en serio, TaeHyun.

—Ya sé. Pero te ves tierno cuando te preocupas por mí... —Dijo, dandole un beso en la mejilla—. Lo prometo.

BeomGyu sonrió.

—Promete que cuidaras bien de señor azúcar. —Dijo SungHoon—.

—Lo prometo. Ahora prométeme tú a mí cuidar de Tobin. —Dijo HueningKai—.

—Lo prometo, lo tendré conmigo. —Respondió SungHoon con una sonrisa—. Te voy a extrañar.

—Y yo a ti, pies de pingüino. —Le dijo HueningKai—.

—Tú eres el pingüino aquí, Kai... —Dijo, mirando el puchero en los labios de HueningKai—. Oye, no hagas esos pucheros, haces que no quiera irme.

—Tienes que ir, es una oportunidad grande para ti y TaeHyun. —Dijo HueningKai—. Te deseo mucha suerte, por favor, no me dejes abandonado.

SungHoon sonrió:—Lo prometo. No te dejare abandonado. —Lo miró—.

—TaeHyun, te encargo a SungHoon, ya sabes que es como un bebé. —Le dijo HueningKai a TaeHyun al momento de estar frente a frente—.

—Lo prometo, de todas formas, estaremos juntos toda nuestra estancia en Harvard. —Dijo TaeHyun, a lo que SungHoon asintió—. Así que no tienes porque preocuparte.

Después de despedirse, TaeHyun y SungHoon se prepararon para subir al avión.

TaeHyun le dió un beso antes de partir a BeomGyu, un beso que transmitía lo mucho que lo iba a extrañar y lo mucho que lo amaba.

SungHoon y TaeHyun caminaron hasta la entrada, pero SungHoon saltó y gritó:—¡HueningKai!

Kai se sorprendió por ello, pero lo estuvo más cuando SungHoon quedó cerca de él.

—¿Qué?

—Te quiero... —Y dejó un beso en la mejilla de HueningKai antes de irse corriendo de nuevo, dejando a un HueningKai perplejo de sí mismo, sin tener la oportunidad de decirle que también lo quería—.

—¿Qué fue eso con HueningKai? —Preguntó TaeHyun, golpeando el hombro de SungHoon—.

—No lo sé... Sólo pensé que debía hacerlo... —Dijo algo nervioso—. Vamos, tenemos que abordar.

Y HueningKai y BeomGyu miraron el avión irse.

Maratón para la final.
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