Él: Mi Único Secreto

10. El último año de primaria

Así pasaron los días en el colegio. Hablaba más seguido con él, también empezamos a chatear. Me contaba lo que avanzaba de las tareas, como le iba y lo que hacía en las tardes.

Esos días pasaron tan rápido, que llegó la fiesta de promoción. Fue divertido, hicimos nuestro baile. Además, yo era la encargada de dar las palabras en nombre de la promoción y fue un momento inolvidable.

Aunque siendo sincera, extrañé su presencia ese día.

*

Ya quedaba poco para que acabarán las clases y con esto cerrar una etapa escolar de la primaria.

Esos días, la pasé con mis amigos y amigas, disfruté los poco días que nos quedaban, los iba a extrañar.

A veces era molestosa y les hacía bromas, solo porque les tenía confianza. Él no fue mucho en los últimos días, tampoco le pregunté cuando volvió.

Teníamos los exámenes finales y ahí íbamos en dos turnos. No coincidimos en la asignación de turnos, así que ya no lo veía, solo cuando me cruzaba con él por la ventana.

Yo ya había ingresado a un nuevo colegio para empezar la secundaria, era un colegio de monjas. Este estaba más lejos, así que tenía que ir en movilidad. Sería un nuevo comienzo, nuevas amistades, profesores. Tenía que volver a adaptarme. Ya acababa una etapa, la primaria, que me trajo muchas enseñanzas.

Aprendí a ser más fuerte, porque de alguna manera sufrí de bullying por unas compañeras e incluso de la misma directora. Quizás, eso era algo con lo que lidiaba por dentro y se sentía como un temor al saber que tendría que empezar de nuevo.

Todos íbamos a tomar caminos diferentes, cada quien se iba a nuevos colegios y en mi caso, no iba a volver a verlos.