the special

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Un chico de veintiún años estaba en el aeropuerto con un cartel enorme con el nombre del chico al que esperaba. El aeropuerto estaba lleno de personas que esperaban a sus amigos y familiares o se iban de viaje, pero el pelinegro sólo estaba concentrado en encontrar a cierta persona de pecas en su rostro.

- Vamos Changbin, el vuelo aún no ha llegado. - Yeri, su hermana menor por un año sólo se burlaba de él.

- Cállate de una vez, sólo me pones más nervioso. -

Y es que Félix, novio al cuál no veía hace aproximadamente unos cuatro años llegaba ese día de su viaje a Australia y Changbin no podía contener su emoción.

Cuando después de una hora divisó una cabellera rubia y un poco larga se levantó junto a su hermana de donde estaba sentado y sostuvo con fuerza el cartel. La gente fue apartándose y así dejaron ver a Seo a su novio buscándolo con la mirada, el cuál sonrió emocionado al ver el cartel.

Félix corrió hasta él y lo abrazó fuertemente con lágrimas en los ojos, repartiendo besos por toda su cara.

- ¡Viniste a buscarme! Pero... me dijiste que no-. -

- Era para que todo fuera una sorpresa, amor. No nos hemos visto desde hace cuatro años, es genial poder abrazarte después de tanto tiempo. -

- Oye, no comáis delante de los pobres. - Habló Yeri. Félix sonrió al escuchar a su cuñada, a la cuál también le dio un fuerte abrazo.

...

Al salir del aeropuerto y subirse al coche de Changbin, Félix se encargó de poner música. Really Bad Bot del grupo femenino Red Velvet se oía en los altavoces y Yeri cantaba felizmente desde los asientos de atrás.

- Esta canción me recuerda a nosotros. - Dijo el australiano, haciendo fruncir el ceño al coreano.

- ¿Y eso? -

- Bueno, cuando éramos adolescentes eras como el chico más malo de la ciudad y yo era, probablemente, el chico más inocente del mundo. -

- Dios, no me recuerdes esa época. - Changbin hizo una mueca de asco. Su adolescencia le daba un poco de vergüenza ajena. - Era demasiado joven, no sabía lo que hacía. -

Félix rió y puso su mano sobre la de Changbin en la palanca de cambios.

- Bueno, ahora has madurado y has mejorado. No eres para nada el mismo de antes. -

- Eso es cierto. -

Cuando por fin llegaron a la casa donde vivía Changbin solo, Félix se sorprendió al ver a todos sus amigos allí saludándole emocionadamente. Todos estaban tan cambiados que era difícil reconocerlos y todo eso sólo estaba emocionando más al australiano, quién había empezado a llorar.

Al salir del coche los abrazó a todos y habló con cada uno. Todos estaban felices, con trabajo y con sus respectivas parejas.

Hyunjin y Jeongin vivían juntos, Hyunjin trabajaba en unas oficinas y Jeongin estudiaba en la universidad. Minho y Jisung vivían juntos, eran una pequeña familia gracias a tres gatos, Jisung trabajaba y Minho estaba buscando algo. Christopher y Woojin vivían separados, pero se veían cada vez que sus respectivos trabajos se los permitían. Mientras tanto, Seungmin trabajaba en un pequeño bar y había empezado a conocer a una chica que encajaba a la perfección con él.

Pasaron a la casa de su novio y mientras hablaban, comían y bebían, Félix miró de reojo a Changbin.

Sonrió al ver a aquel chico que había cambiado tanto por él. Su novio ahora era una persona distinta. Tenía sueños, menos preocupaciones y en el paso de esos cuatro años se había descubierto a sí mismo. Y a pesar de todos esos importantes procesos, nunca había dejado de amarlo. Félix estaba realmente agradecido por ello.

Al parecer, Changbin se había percatado de que lo miraba, porque ahora lo había mirado brevemente y le había dedicado una pequeña sonrisa, cosa que lo hizo sonreír a él también.

...

La noche había pasado y sus amigos finalmente se fueron a sus hogares. Félix observaba desde la entrada de la casa de su novio como sus amigos se marchaban y sonrió.

- Hey, Félix. - Volteó a ver a su pareja. - Ven un momento. -

El rubio cerró la puerta detrás de él y se dirigió hacia Changbin, quién sostuvo sus manos entre las suyas.

- Después de todos estos años he descubierto todo lo feliz que me hace estar a tu lado, lo sabes, ¿no? - El de pecas asintió. - Por eso quería pedirte estar más años juntos a tí. -

Cuando Changbin hincó la rodilla frente a él, Félix no pudo evitar que sus lágrimas bajaran por su rostro incontrolablemente.

- Por eso, Lee Félix, quiero agradecerte todo lo que has hecho por mí. Gracias por tu paciencia, por tu cariño y por estar ahí cuando más lo necesitaba. ¿Te casarías conmigo? -

- ¡Sí! -

El de pecas abrazó fuertemente a su (ahora) prometido, descargando todo el amor que había guardado durante tantos años allí.

Porque, ahora, su historia tan duradera tenía un bonito cierre, cosa que tranquilizaría el corazón de miles de personas que sabían sobre ellos.

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Sé que esto ha sido muy repentino, pero creo que es la mejor forma de agradeceros todo lo que, la mayoría de vosotros, habéis hecho por mí durante estos cuatro años.

Empecé en esta plataforma con tan sólo doce años, sin saber nada sobre la vida y he crecido junto a vosotros, regalándoos historias que podíais disfrutar en la tranquilidad de vuestro hogar.

En este pequeño especial, quiero que aparte de la historia, miréis a Changbin como yo, como Ying y a Félix como vosotros, todos mis lectores y seguidores. Habéis sido un gran apoyo para mí y todo esto me ha ayudado a crecer como persona, como escritor y a aprender a que, quizás, no soy tan malo en lo que hago.

Os diría miles de cosas más, pero no me salen las palabras. Estaré agradecido por siempre por todo lo que habéis hecho por mí.

Un abrazo, y nos leemos en otros lado <3

Y de nuevo, gracias.

Really Bad Boy²👑ChanglixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora