𝙊𝙭𝙮𝙜𝙚𝙣 | Max Verstappen |

Cruel | Max Verstappen.|

La constante pregunta del porqué Max despreciaba a la comunidad LGBT lograba que más de uno quisieramos saber el verdadero porqué, sin embargo, no siempre fue así. 

A Max le gustaba ver a escondidas a aquél hombre que se abría paso entre las personas para llegar hasta donde él, le agradaba sentir su tacto aún si aquellos trajes los separaban.

Porque Max adora a Sergio. 

Y no malinterpreten, sí el Holandés ama a su chica y de eso no cabe duda alguna, pero de cierta forma que aquel hombre de piel canela lo haya sostenido entre sus brazos cuando ella se marchó no fue más que un suspiro entre tantas lágrimas ahogadas debido al abandono. 

─Me hubiese gustado haber llegado a P2, siquiera para compartir contigo una victoria digna.─ Confesó Sergio cerca de mi oído mientras seguía abrazando mi cuerpo

─Lo hiciste bien, es por ti el porque estoy liderando.─ Sonreí separando mi rostro de su cuello mirándole unos minutos a aquellos ojos marrones 

─¡Max, Max, aquí!─ Las diferentes voces me hicieron salir de aquélla burbuja, los flashes lograban cegar un poco mi mirada, aún estaba rodeado de una gran cantidad de personas celebrando mi triunfo. 

Solo quiero celebrarlo con él. 

Con unas palmadas soltó mi cuerpo y se abrió paso entre la gente dejándome ahí con la mirada perdida por dónde el se marcho, quise sostenerle más fuerte pero sabía que sería raro. 

Y ahí iba, de forma lenta y relajada, Sergio Pérez o como muchos le conocen "Checo", quisiera poder decir todo mi sentir por aquél hombre, pero por ahora solo puedo admitir que acelera mi corazón y calienta mi cuerpo. 

Mayo.

La carrera en Mónaco cada vez se acercaba y con ello el estrés entre corredores, la rivalidad y los deseos de ser los primeros, y entre todo eso no faltaba el placer de llegar semanas antes para poder tomar un buen descanso, se había convertido en algún tipo de ritual entre nosotros.

Con la mirada puesta en las relajadas olas del mar, solté un suave suspiro recargando mi mentón entre mis brazos los cuales estaban cómodos en el barandal de aquél yate, los demás reían cómodamente, y aún si quise que el aburrimiento terminara de consumirme no fue posible, Sergio posaba divertidamente en aquella moto acuática siendo perseguido por Carlos y Lando quienes le seguían el juego, me perdí en su piel mojada, en cómo sus perlas blancas se revelaban en una sonrisa y por si fuese poco adoraba como los lentes se ajustaban a su rostro. 

Logro sacarme una sonrisa, y por mi mente solo paso una cosa, felicidad. 

─Max, ven y bebe con nosotros.─ Charles toco mi hombro haciéndome girar y mirarlo, asentí un poco aturdido y tome la cerveza.  ─¿Qué pasa hombre? No has dicho nada en casi todo lo que va el día.─ 

Con un poco de vergüenza y tratando de ocultar un sonrojo prominente bebí de la cerveza. ─Es sobre la carrera, nada interesante, lo sabes.─ 

─Que quieras obtener de nuevo el título como Campeón del mundo sí es interesante.─ Agregó tomando asiento a mi lado mostrando su sonrisa y con ella aquellos hoyuelos de los cuales muchas y muchos suspiraban. Charles es guapo y él lo sabe. 

Nuestras cervezas chocaron en un suave brindis. ─Bueno, si es ese el caso, no me negaré a tener ese título de nuevo.─ 

─¿Y Checo? ¿El no piensa pelear el título? Quiero decir todos lo estamos haciendo pero es tu teammate.─

─No he escuchado nada acerca de ello, así que no se que contestarte.─ 

Asintió soltando una risilla ─Sí, claro.─  Murmuró para beber su cerveza dejándome con la duda