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VERDADES OCULTAS

CAPÍTULO 20

VERDADES OCULTAS

ESTE CAPÍTULO SERA MUY EXTENSO, YA QUE LEEREMOS LA HISTORIA DE HELEN Y ZACH DESDE LA PERSPECTIVA DE NEREA, TAMBIÉN REVELARÁ DATOS QUE NOS HARÁN COMPRENDER MUCHAS COSAS.

NEREA MARS.

A mis 12 años pude ver como mi hermana mayor Helen Smith, cometía el peor error de su vida.
Había dejado todo un mundo con su familia, para ir a uno peligroso.
Su peor error era el, ese hombre alto, muy bien vestido y con cabello rubio. De nombre Zach Evans.

Lo conoció en una noche de invierno, ella estaba de viaje en una ciudad al norte de California, EEUU.

Constantemente asistía a fiestas durante su estancia en California, y en una de sus tantas asistencias al lugar conocio a un hombre que la enamoro de inmediato.
Helen era muy inteligente, pero su atracción por el tipo era demasiada.

En esa noche de invierno, cuando la nieve comenzaba a llegar, fue cuando conocío a su perdición, quien iba acompañado de su hermano menor William Evans.

Ambos chicos lucían impecables, y por su puesto, estaban en busca de diversión, o al menos es lo que buscaba William, Zach era más serio, sin embargo la belleza de mi hermana Helen lo flecho.

Y ¡a quien no!.

Era la chica más hermosa del pueblo. Muchos chicos esperaban impacientes por tener una oportunidad con ella.

Pero Helen estaba destinada para Zach.

Esa noche fría, como sus almas.

Los hizo comprender que estaban destinados para el otro.

Helen pasó cerca de 4 meses en California, durante ese tiempo mamá se encargo de llevarme al psiquiatra, pues desde muy pequeña fui víctima de abusos y me cerré totalmente a la sociedad.

Pasó navidad fuera de casa, año nuevo y con ello las siguientes fechas importantes del año.

Una mañana, el sol comenzó a salir y dar sus primeros toques cálidos. Esa fue la señal de que mi hermana estaba de regreso en casa, solo que esta vez vendría acompañada por Zach.

El reloj comenzó a vibrar, la noche anterior mamá había recibido una llamada de Helen, se mantuvo muy seria hasta que llegó papá.

Papá era un hombre de negocios, casi nunca estaba en casa, excepto en las noches que venía a la cena con nosotros, sin embargo casi nunca podíamos mantener temas de conversación con el.

Y sobre todo yo.

Papá me veía como alguien que había manchado la reputación de la familia.

Apenas llegó papá, mamá lo saludo como de costumbre, sin embargo, lo llevó a su habitación y pidió llevar la cena hay.

Mantuvieron una conversación por cerca de 2 horas, eran casi las 11.30pm, salí de mi habitación y desde un lugar oscuro de la sala pude observar como mamá tomaba el teléfono y marcaba un número.