Green Rabbit (vigilante quirkless)

11- Manipulación

POV Izuku

Ese hombre. Dijo algo sobre la Liga de Villanos. Sin embargo, no lo entendí del todo. Algo así como...

"La Liga... querer... venganza... vigilando..."

Reconstruí esto, formándolo en;

"La Liga de Villanos quiere venganza. Te están buscando".

¡Ahora tengo que huir de ellos y de los Héroes! Esto es tan molesto. Salté a otro aliado. Solo para ser recibido por Aizawa. Por qué. Sé que estoy lloriqueando, pero por qué, de todos los días que podrían haber venido por mí.

Pude sentir que la adrenalina de la pelea anterior se desvanecía. Examiné mi cuerpo. Acababa de darme cuenta de la forma en que estaba. El hombre debe haber recibido algunos golpes. Mis costillas se sentían rotas. Probablemente me torcí el pie. Me duelen los dedos por golpearlo. ¿De qué estaba hecho?

Sentí a alguien detrás de mí. Giré un poco la cabeza, sin dejar que Aizawa saliera de mi vista.

Shigaraki, Toga y Dabi....

"Green Rabbit, qué sorpresa. Veo que entendiste nuestro mensaje..." Shigaraki dijo felizmente. 

Miré detrás de mí hacia Aizawa. Supongo que hoy estamos del mismo lado. Aizawa asintió con la cabeza en comprensión.

Evalué la situación. Ya me golpearon. Sin embargo, obviamente no me esperaban. Esto inclinó el poder a nuestro favor. No tenía rehenes y nadie vivía en estas partes. Si golpeo primero, todos me golpearían como lobos. Tenían que venir a mí.

"¿Solo vas a pararte allí Shigaraki? ¿Demasiado asustado para atacar? ¿Enojado porque derroté a tu secuaz 'dominado'?"

Eso lo enojó.

Se abalanzó sobre mí, Dabi y Toga siguiéndome detrás de él.

Movimiento equivocado.

Los esquivé a todos. Aizawa había borrado la peculiaridad de Dabi. Está bien. Togas sería inútil aquí. Primero tendría que tratar con Dabi y Toga. Aizawa estaba luchando contra Toga. Estaba bien por su cuenta. Me centré en Dabi.

"¿El hijo de Endeavor?" 

No dijo nada.

"Si crees que puedes ocultar tu identidad, tu error. Tu peculiaridad es literalmente fuego. Es como las Llamas Azules de Endeavor. Hell Flame ¿verdad? Te escapaste por él, ¿verdad? Figura de papá abusivo. ¡Ni siquiera tengo un padre, pero bueno, no soy un villano!" 

Esquivo sus ataques. Ahora se está frustrando. Sé demasiado.

"¿Quieres saber qué le pasó a tu familia después de que te fuiste? ¡Tu hermano comenzó a entrenarse para reemplazarte! Lo he visto varias veces. ¿Lo viste entrar en la UA? Debes estar tan orgulloso. Tu mamá, Rei, ¿verdad? Ya, la enviaron a un hospital psiquiátrico..."

Solo le estaba diciendo lo que ya sabía, pero... Me sentí horrible.

No es de extrañar que se escapara. Su familia estaba tan desordenada.

Estaba hablando más suave ahora.

"Tu hermano fue literalmente torturado por tu padre. Tu mamá se volvió loca. Tus hermanos fueron ignorados. Y a lo largo de todo esto. Eras un villano. Y Endeavor obtuvo toda la popularidad".

Odiaba hablar así. Nunca me gustó la manipulación.

Ugh.

Vamos a terminar con él.

Salté alrededor de él, usando la misma técnica que había usado en el otro hombre, casi golpeando la parte posterior de su cuello, saltó justo a tiempo. Miré a mi alrededor. Aizawa estaba sangrando. Shigaraki había decidido unirse a la lucha. Estábamos perdiendo. La copia de seguridad no llegaría a tiempo.

En los segundos que estuve distraído, Dabi soltó una ráfaga de fuego. Apenas logré no hacerme la barbacoa. Mi brazo estaba quemado, la piel casi completamente quemada. Sentí lágrimas en los ojos. Mi cuerpo no podía aguantar más. Mis costillas estaban definitivamente rotas.

Tuve que salirme con la mía con Aizawa, de lo contrario ambos estábamos muertos.

Metí la mano en el bolsillo. Saqué un frasco pequeño. Dentro había un gas. Sonámbulo. Había recogido algo de eso una vez cuando Midnight me perseguía. Lo tiré al suelo. Todos abandonaron inmediatamente el área. Llevaba una máscara, así que no me afectó. 

La Liga logró escapar. No podrían vernos a través del gas. Corrí hacia Aizawa. El gas lo había dejado inconsciente. Lo recogí con cuidado. Salté en el aire, corriendo a través de la ciudad, hacia la estación de policía tan rápido como pude. No escuché a nadie detrás de mí. Bien.

Finalmente llegamos a la comisaría. Entré y lo entregué a la recepción. La señora parecía confundida, pero ya no era mi problema. Rápidamente desaparecí, dirigiéndome a casa. 

Salto de tiempo

Miré hacia abajo a mis heridas. No creo que pueda hacer patrullar en un tiempo.

Ojalá no me pierda nada importante. 

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¡Gracias por leer!