Amor por accidente

Capítulo 16

*Narra Kira*

Hoy nos vamos de casa de los padres de Rhys y sinceramente no quiero irme, me siento bien aquí, me siento querida y me siento parte de una familia.

Soy consciente de que tenemos que volver y terminar el curso y en parte tengo ganas de ver a Martha.

Ayer me envió un mensaje felicitándome junto con otros muchos que recibí de varias personas, en él texto me felicitaba y me decía que cuando volviese tendría que contarle todo con lujo de detalles.

Terminamos de recoger y de preparar la mochila, bajamos a despedirnos y antes de salir por la puerta intercambio teléfonos con cada miembro de la familia y me añaden al grupo de la casa para que sepa los planes y pueda avisar cuando volvamos.

Nos montamos en el coche y termino de despedirme sacudiendo la mano.

Hacemos el viaje sin nada especial a destacar y al llegar me deja en casa. Me acompaña a la puerta y hasta que no la cierro no vuelve al coche.

Es un poco deprimente después de un fin de semana tan especial y bonito tener que volver a clases pero aún así lo hago.

Cada mañana, cuando suena el despertador abro los ojos y me doy cuenta de lo afortunada que soy, puede que mi familia de sangre sea un poco mierda pero he encontrado una que de verdad me quiere y se preocupa por mi.

Todos los días de camino a la universidad me entra un mensaje de la familia de Rhys deseandome un gran día, unas veces son sus hermanas y otras su madre, incluso su padre de vez en cuando también me manda un mensaje con alguna foto de las niñas o algo que le ha recordado a mi.

A mitad de camino veo a mi lado el brillo naranja del coche, me giro con una sonrisa y la mirada provocativa que me da Rhys hace que me suba de inmediato.

Me hace tan feliz.

Llegamos a la universidad demasiado pronto y no hay nadie en el campus, todos los semáforos nos han tocado en verde y no hemos tardado apenas nada en llegar.

Charlamos tranquilamente en el coche y aprovecho para recostarme sobre su hombro mientras me cuenta la eterna llamada con sus padres al llegar a casa y lo bien que les he caído.

Me cuenta que sus hermanas están emocionadas y preguntan cada mañana cuando volvemos, su madre está fascinada y su padre se siente orgulloso de que su hijo haya encontrado a alguien tan bueno.

Cuando quedan un par de minutos para entrar salimos del coche de la mano, me acompaña hasta la puerta y me da un gran beso antes de entrar por el pasillo para dar su primera clase.

Encuentro a Raquel y a Chris y me sonríen alegres, siento que me muero de vergüenza y Raquel se acerca con toda la emoción del mundo.

-Hola guapa- saluda.

-Hola- respondo.

-Es que sois tan monos-

Agacho la cabeza y me muerdo el labio.

Debajo de que piedra me meto ahora.

-¿Me dejarás ser dama de honor en el boda y madrina de tus hijos?- pregunta emocionada.

Me río con ganas y cuando veo que Chris se acerca y la abraza, mi corazón se derrite de amor por ellos.

-Los monos sois vosotros- comento.

-No evadas mi pregunta. Sí o no-

-Ya veremos, es un probable si-

-¡¿Estás embarazada?!- chilla Chris.