CAPÍTULO QUINCECassandra escuchó como el corazón del lobo se aceleraba mostrando que estaba nervioso y, a decir verdad, ella también estaba nerviosa.
De hecho, estaba confundida acerca de lo que sentía.
Estaba enojada y dolida porque Seth la había llamado monstruo, confundida y curiosa porque no sabía cómo había descubierto que era un vampiro y al mismo tiempo preocupada de que se había quedado sin control a través del final del bosque, hace casi cinco minutos.
La híbrida quería golpearlo y gritar todas las maldiciones que conocía tratando de descontar la mezcla de emociones que estaba sintiendo, pero también quería abrazarlo y decirle que todo estaba bien y que ella estaba allí para que hablaran y comenzaran una relación adolescente cliché como las de las novelas románticas y series de televisión que tanto amaba.
Pero sobre todo, quería olvidar.
Quería olvidarse de la conversación incómoda que había tenido con él antes y empezar de nuevo como si se acabaran de conocer, pero sabía que su mente no sería capaz de olvidarlo pronto.
Y para eso quería una explicación, necesitaba una explicación.
—¿Seth?
—¿S-si?
—¿Puedes explicarme qué pasó esta mañana?
—P-por supuesto.
Seth estaba más nervioso de lo que ya estaba, ya que le iba a decir a la chica que la había visto alimentarse de dos humanos y se asustó.
—Bueno... Esta mañana después de las rondas, fui al pueblo. Algo me dijo que ibas a estar ahí, así que fui allí a buscarte.
—¿Fuiste a Forks solo para buscarme?
Seth bajó la cabeza sintiéndose como un idiota: —Sí.
Cassandra sonrió, él la había ido a buscar sin siquiera conocerla.
—Te busqué por todo el centro durante casi una hora, pero no pude encontrarte así que me detuve a descansar y hasta que vi a Edward estacionando su auto y tú saliste. —Seth sonrió al recordar como el viento sacudía el cabello de la híbrida. —Te seguí hasta la librería y te escuché... tú...
—Me viste beber la sangre de esos humanos.
—Sí.
Cassandra respiró hondo, esa no era la mejor manera de decirle a alguien que eras un vampiro, pero ahora él lo sabía y ella no tenía mucho que hacer, por supuesto que podía hipnotizarlo para que olvidara todo lo que había escuchado y dicho, pero eso no calmaría su mente, mucho menos lo haría olvidar lo que había dicho, así que solo lo animó a seguir hablando.
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𝑶𝑪𝑬𝑨𝑵'𝑺 𝑬𝒀𝑬𝑺, 𝚜𝚎𝚝𝚑 𝚌.
Fanfictionᴏᴇ| ❝In all my years of life I have never loved anyone as I love you❞ Edward Cullen se casa con Isabella Swan y llama a una vieja amiga para que sea su dama de honor. Cassandra Gold, una hereje de 445 años que ayudó a Edward en la década de 1920, te...