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POV madeleine:

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POV madeleine:

Estábamos sentados de forma cómoda en aquel sillón de la habitación, acariciaba mis cabellos levemente haciendo trenzas con sus manos suaves y delicadas que amaba que hicieran tacto con mi piel, no decía alguna palabra pero lo conocía bien y sabía que los dos estábamos cómodos así.

-¿Me darías un beso?-

Pregunté mientras levantaba mi cabeza que estaba apoyada en su regazo, nos miramos durante algunos minutos hasta que la duda fue cerrada con un beso suave en la comisura de mis labios, me acerque más mientras nos dábamos besos y caricias inocentes.

Dios los está viendo puercos.

Un chico de cabellera rubia y cabello largo besaba apasionadamente a aquel chico de tez oscura, jugaban y entrelazaban sus lenguas dejando sonar aquellos sonidos obsenos de aquellos labios, se separaron por falta de oxígeno, se miraban a los ojos mientras dejaban salir sus respiraciones entrecortadas, madeleine poso sus brazos alrededor del cuello del de cabellera oscura, por su lado el contrario posaba sus brazos alrededor de aquellas caderas. El mago empujó al de pálida piel dejándolo caer en aquel mueble sin previo aviso, un quejido se escuchó del paladin al sentir su espalda teniendo contacto con aquel frío sofá, las manos del amante del café recorrían la estructura del fornido paladin sobre aquellas prendas que empezaban a estobarles a ambos.

-Agh... Spresso- Dijo el paladin mientras que el de piel morena quitaba aquella camisa que empezaba a estorbar, acercaba sus frías manos a aquellos rosados pezones para empezar a apretarlos y jugar con estos pellizcando estos y dando pequeños jalones que podían volver loco al de ojos azulados, aquel paladin empezaba a cargar su vista de placer mientras pequeñas lágrimas de exitacion se formaban en sus ojos, el menor (en estatura) dejo de pellizcar el pezón apretando el pecho del mayor, empezó a tocarlos sin descaro mientras una sonrisa lasciva adornaba su rostro.

-Mgh... Spresso, por el divino solo sigue...- Hablo el chico de piel blanca y pálida sonando más necesitado de lo que quería sonar. El mago lo siguió observando con aquella sonrisa mientras un pequeño plan se hacía aparecer en su mente -¿Cómo se dice?- pregunto este mientras apretaba el pecho de nuevo con algo de fuerza dejando notar las marcas de sus dedos en la delicada piel del divino -Spresso tócame porfavor...- hablo mientras agarraba la mano del moreno -Es señor para ti- Río en bajo mientras con su otra mano acariciaba la mejilla del pálido -Señor... Toqueme porfavor...- Hablo casi que desesperado mientras sus ojos empezaban a cristalizarse por la exitacion que sentía en aquel instante.

En ese instante no les importaba si los sonidos de sus gemidos, jadeos y gritos obscenos eran escuchados, ellos querían gritar su amor a todo pulmón, querían besarse mientras todos estaban presentes, abrazar con fuerza al contrario, decirle cosas lindas en público y que nadie los juzgará, ellos querían estar juntos, querían ser la luna y el sol, tal vez estando separados durante un tiempo pero que cuando el eclipse llegaba no había naturaleza tan hermosa como aquella que se podía transmitir de aquella union. Spresso acercó su caliente lengua a el otro pezón estirando, mordiendo y chupando este de forma gentil, el de cabellos blondos gemía, jadeaba y soltaba algunas frases apenas audibles para el odio, estaban metidos en su mundo, tal vez lo sucedido en la fiesta había sido algo humillante pero ahora mismo solo se concentraban en darse el mayor placer posible.

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⏰ Última actualización: May 23 ⏰

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