one shots ~selección española femenina y tu~

Rivales ~Ona Batlle~ 2

Ahora mismo me encontraba riendo sin parar con Mapi, estábamos en el campo sentadas y la verdad es que con esta mujer nunca se puede estar seria.

Mapi: Nadie sabía eso antes pero después de la entrevista lo sabe un montón de gente—

—O sea que tu al entrar al campo te pones a hablar y a saludar al césped? De verdad?—dije riendo—

Mapi: Te lo juro, le digo "Hola, que tal?" Y eso, no es broma—

—Cualquiera que te vea pensará que eres esquizofrenica—

Alexia: Quien es esquizofrénica?—

—Que yo sepa nadie—

Alexia: Entonces de que estás hablando?—

—De que cualquiera que vea a Mapi hablar con él césped pensará que es esquizofrénica—

Alexia: Es verdad, Mapi habla con el césped—ríe mirando a Mapi—

—Ingrid sabe eso?—

Mapi: Que va, mejor que no lo sepa—

Mientras estábamos hablando sentí a alguien sentarse detrás de mí rodeando mi cintura con sus piernas y sus brazos rodeando mi cuello mientras que Laia y Leila se sentaban a mi lado.

Laia: Estáis nerviosas por el partido contra Finlandia?

—No, nada nerviosa, está claro que ellas son buenas pero nosotras también, incluso me atrevo a decir que somos mejores—

Mapi: A no ser que nos roben y acaben ganando ellas—

—En ese caso denuncio a la árbitra—

No sabía aún quien estaba abrazándome hasta que escuché su voz.

Ona: Que vas a denunciar tu? No eres capaz ni de matar a una mosca—

—Eso que lo dices tú gordita—

Ona: Te conozco demasiado bien y se que no serías capaz de denunciar a nadie—

—Bien, no seré capaz de denunciar a nadie, pero sabes de lo que soy capaz?—

Ona: De que?—

—De subirme a un coche en el que este conduciendo Athenea—

Athenea: Que has dicho de mi?

—Que eres muy guapa—

Athenea: Tu también—dijo con una sonrisa sarcástica ya que era obvio que me había escuchado—

Ona: Que tontas sois las dos—

—No eres la más indicada para hablar—

Ona: Callate mejor—

—A tus órdenes Batlle—

Mapi: Que sumisa—

—Y qué tal tu y Ingrid?—

Mapi: Idiota—dijo riendo por mí comentario—

Jorge: Chicas, venga, preparaos que tenéis entreno en 20 minutos—

Alexia: Ahora vamos, no te preocupes—

Nada más irse Jorge cada una se fue a su habitación a prepararse, iba camino al campo tranquilamente entrando con la derecha siempre hasta que alguien se echó a mi espalda.

—Algun día de estos voy a dejar que os caigáis, me estáis destrozando la espalda—

Leila: Que quejica y solo tienes 21 años, no quiero ni imaginarme como serás cuando tengas mi edad—