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-Vale, pero no me soltaras ¿verdad?.

Esa era la Alice asustada, pues le dije que yo le enseñaría lo que se siente volar.


Como estábamos solos en su casa, nadie sospecharía así que la invite a volar, pued nos debíamos algo entre ambos.

-bueno, ahora te abrazare por atrás.-dije para luego pasar mis brazos.

-uh huh...¡ pero no me sueltes !...

Ni la deje terminar cuando estábamos en el aire, estábamos volando por arriba de las nubes blancas, a Alice casi le da un infarto.

Se preguntaran como puede volar, en pocas veces los ángeles nos presentamos físicamente a nuestros humanos y, a decir verdad, estos enloquecen pero Alice no se sintió asi.

-ahora... te soltare en las nubes.- al decir eso se escapo una risa de mi boca.

- ¿¡ ESTÁ LOCO ?!.- volteo a verme con una cara de horror extremo...

- así es pequeña...preparate para caer...ja ja ja.- dije sin aguantar la carcajada.

-no te atrevas a hacerlo, Silver.... No ¡ME SUELTES!.- dijo gritando mientras caía sobre las nubes, al momento de caer en ellas su reacción cambio de asustada... a tranquila.

Pero me moví rápido para volver a atrapar a la chica en mis brazos, al principio cerro los ojos, pero luego bajo lentamente su mano para rozar las nubes.

-esto...¿las nubes acaso son de algodón?, por que son bastante suaves.

-así es pequeña, pueda que parezca que las nubes sean y se sientan como el algodón.

La chica desperto de lo que parece el mejor sueño de su vida, tan solo basto su mirada para que ella describiera el lugar, bueno muchos se imaginan que solo hay nubes ,pues no es así, este lugar tiene grandes montañas con verdes praderas y largos, largos pastos...junto a un gran y hermoso rio... este era el paraíso, o como los ángeles lo llamamos  "el Cielo".

- Silver.. ¿esto es el cielo?.-dijo sentándose en su cama.

-de los ángeles, el cielo de los ángeles pequeña, si observaste bien, habían otros ángeles por ahí volando.

-entonces... ¿para que me llevaste a ese lugar?.

-pues para enseñarte otro lado de la vida, no me gusta verte así deprimida, verte llorar todos los días...

Para ser un hermoso sueño, se miraba bastante real, en realidad ella estaba dormida, si la llevo al lugar de los ángeles me castigarían y es obvio que ella enloquecería y terminaría en un manicomio y no queremos eso.

-eh gracias Silver...-dijo mirando la cajita que tenía en una mesita de noche.

-de nada... Oye, nos debíamos un favor, em..¿ya puedo abrir la cajita que me diste?.

- bueno, puedes abrirla, es para ti.

Al momento de abrir la cajita me quede atónito a su regalo, una linda cadena con una linda llave colgando, ya saben como esas llaves antiguas clásicas en fin, puedo decir que era mi primer regalo, y el mejor de todos, pues era de mi humana, pero, ¿como decirle mi amor por ella?, créanme, sufro muchísimo al no poder decirle lo que siento, pues como decía antes esta prohibido enamorarse de un humano.

Humanos, ¿que se siente amar a alguien y no poder decirle?, al parecer tengo un sentimiento humano, que es parecido a vivir, puedo decir que es más bien un amor prohibido, pero, ¿por que a mi?. 

Ángeles Guardianes© [RE EDITANDO]Where stories live. Discover now