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SEBASTIAN STAN

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Cuando _________ se enteró que estaba embarazada, tenía ocho semanas, y se puso inmensamente feliz, Sebastian lloró de felicidad, sus padres estaban emocionados. Aquí su suegra era la que más ansiaba que llegara el día que naciera para poder tenerla en sus brazos, para ella sería su primer nieto o nieta, siendo Sebastian su único hijo

-Mamá, no llores...

-¿Cómo no quieres que llore? Por fin tendré un nieto, o una nieta ─Quería parar, en serio, pero es que simplemente no podía con la emotiva noticia.

-Te entiendo, pero si sigues llorando, yo también lloraré.

_________ en esos momentos estaba filmando una película, así que un mes después de que terminaran las grabaciones, decidió retirarse un tiempo de la actuación, para pasar el resto de su embarazo sin ningún tipo de presiones. Para su buena suerte, fue un poco tranquilo, las nauseas y los vómitos pararon después de un mes, y no le dieron contracciones tan fuertes. Lo único que sí tenía demasiado, eran los antojos

-Tienes que estar bromeando, _________...─Dijo un Sebastian adormilado, quejándose porque su esposa le había pedido fresas con crema para comer, en plena madrugada─ Son las cuatro de la mañanaaa ─Apenas si pudo ver la hora en el reloj de la mesa de noche.

-Pero queremos comer eso ─Respondió inocente, acariciando su barriga.

El hombre se acercó a ella, estando un poco más despierto

-¿En serio vas a hacer que papá salga de su cómoda cama a las cuatro de la mañana? ─Le habló, y en forma de respuesta, el o la bebé dio una patadita.

-Toma eso como un sí ─Le sonrió, y a él no le quedaba de otra que ir por lo que pedían.

Cuando se enteraron en el baby shower que sería una niña, eso los puso más entusiasmados. Ahora que sabían su sexo, podrían empezar a comprar cosas para empezar a armar su cuarto. Los padres y amigos de ambos compraban literalmente todo lo que les parecía lindo que fuera para una niña. Aunque sin olvidar que, Anthony perdió una apuesta con Sebastian, el moreno estaba muy seguro de que iba a ser niño, y a su mejor amigo nadie le quitaba de la cabeza que sería una niña

-¿En serio apostaron por el sexo de mi bebé? ─Los miró a ambos molesta, con sus brazos cruzados.

-¿Qué? Yo quería un niño ─Anthony se encogió en hombros, mientras que Stan le decía que se callara para no hacerla molestar.

Sebastian estaba pensando en retirarse también, no para siempre, pero es que debido a su trabajo se perdió parte del embarazo, y eso no solo ponía triste a _________. Se podría decir que Geogerta y Anthony pasaron más tiempo con ella que su propio esposo, y no es que le molestase o algo, amaba a su suegra y a Mackie, pero no era igual

-Por el amor a Dios, Anthony, yo puedo hacerlo ─Rodó sus ojos por tercera vez, el moreno no la dejaba ni levantar una cucharilla.

-Querida, mientras tu divino esposo no esté acá, yo me encargaré de hacer su trabajo.

-Te quiero, en serio, pero no quieres discutir con una mujer embarazada, Anthony Mackie ─Lo señaló con su dedo indice, dándole una mirada para nada amigable.

Poco después estaría llamando a Sebastian para decirle "Sebas, tu mujer casi me lanza un sartén, mejor le dejo esto a tu mamá". Él solo se reiría porque le había advertido muchas veces que no la hiciera enojar, y luego sería él el que se enojase porque por una molestia de tal nivel podría perder a la bebé. Pero gracias a Dios nada de eso pasó

-¿Cómo le pondremos? ─Ya era el último mes, y todavía no tenían un nombre.

-¿Y si buscamos en internet? ─Seb recibió un pequeño golpe por eso.

Sin dudas, una de las cosas más difíciles fue elegir el nombre. No sabían si debían ponerle un solo nombre, uno común o uno más complejo, o dos, o si dejarla con el apellido de su padre, que también era el de la mamá, o ponerle también su apellido de no casada. Sus padres, y sus amigos le dieron muchas, pero muchas recomendaciones. Tenían varias personas importantes para ambos, que querían colocarle un nombre parecido al de uno de ellos en su honor

Una tarde de un martes, nació una bebé sana, de piel blanca, cabellos castaños y ojos azules, que llegó a pesar tres kilogramos, a la cual le pusieron Antonella Stan. Así de simple, en honor a Anthony, la razón por la que los dos se conocieron. Que por cierto, el nombrado soltó muchas lágrimas por eso

Nada pudo salir mejor. _________ tuvo un parto normal y sin problemas, lloró, y no solo por el dolor, sino porque después de tantos meses, por fin la tenía en sus brazos. Sebastian se le unió, llorando igual o incluso más que su esposa

En el momento en la que la tuvo en sus brazos, tenía miedo de lastimarla por lo pequeña que era, tenía sus mismos rasgos físicos, su princesa era hermosa. Pensó en tantas cosas en tan poco tiempo. Por ejemplo, en cómo sería su forma de ser, si sería igual a la de él o igual a la de _________, o tendría su propia personalidad. Si lo amaría como él esperaba...Eso era una de las cosas que más le preocupaba, que no lo amara como él la estaba amando en ese preciso momento

Otra era, en cuando ella llegase a la adolescencia, ay no, su peor pesadilla hasta ahora. Quizás tendrían discusiones por como se vestiría. Faldas y vestidos cortos, que no les iba a permitir usar probablemente hasta que cumpliera la mayoría de edad. O por los amigos y novios que tendría. ¿Y si la hacían llorar? No, se tomaría muy en serio su papel como El Soldado Del Invierno si llegara a derramar una sola lágrima por un idiota

Pensaba en eso y en muchas cosas más. Pero apenas era su primer día en el mundo, aún faltaban muchos años para que eso llegara, que esperaba que el tiempo pasara lo suficientemente lento para que no fuera tan pronto. Por ahora, disfrutaría verla dormir en sus brazos, oír su respiración, ver como su pequeño pecho subía y bajaba con calma. Sin dudas daría lo mejor de su parte para ser el mejor padre que pueda ser

-Solo espero que no llegue a odiarme...

-¿Odiarte? Por Dios, Sebby, no digas eso, ¿Porqué te odiaría? ─Sus palabras la alarmaron, no tenía porque pensar en eso.

-No lo sé, temo que no será como espero.

-No será fácil, yo también tengo miedo ─Tomó su mano libre, para darle confianza y mejores pensamientos─ Pero por ahora, ella lo que necesita es atención, amor y cariño, y eso no le va a faltar.

-Tienes razón.

Tenían miedo, sí, claro que sí, no tenían ni idea de como cuidar a un bebé. _________ tenía dos sobrinos, a los cuales bañó, cambió de pañal y de ropa, les dio de comer, con los que jugó en muchas ocasiones, pero ésto sería un reto diferente, era su hija, suya, no de su hermano. Sebastian no tenía ni hermanos ni sobrinos, pero igual se esforzarían al cien por ciento

Ambos darán lo mejor de sí mismos para que esa bebé sea feliz

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Nuestro viejo sabroso ya es un cuaretooon 🥰

Sé que el cumple de Seb fue hace como tres semanas pero ajá, ahora es que vengo actualizando 😂

Voten y comenten 💗

One Shots | Sebastian Stan | Bucky BarnesWo Geschichten leben. Entdecke jetzt