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Capitulo corto.

Tn permaneció sentada en las sillas fuera de las habitaciones y se quedó en silencio sintiéndose mal.

No es que se sintiera mal porque le doliera el estómago, la cabeza o algo más, ella sentía que tal vez fue muy molesta y que además había preguntado algo que no debía.

Además de que ni siquiera preguntó si podía decir tal pregunta.

Aveces las personas son sensibles, contándome.

Permaneció al menos dos horas con mucha paciencia esperando que la madre se retirara de la habitación y una vez que lo hizo, no dudo en entrar a los segundos.

Sunoo estaba acostado en la cama, su bata tenía pequeñas manchas de sangre de hacer horas y su nariz se veía con un leve color rojizo a causa de la cantidad de sangre que expulsó de esa zona.

— ¿Puedo? — preguntó Tn asomando su cabeza y luego su cuerpo con timidez.

— Ya entraste. — respondió sin mucha importancia mientras miraba la televisión.

— hace unas horas, en aquel momento... Entré a tu habitación porque quise darte esto, como un regalo. — contestó mostrando el tomo del anime que leía.

— ¿Tomo 3? — preguntó alzando sus cejas.

— No sabía que número comprar...

Sunoo giró su rostro hacia uno de los muebles dónde claramente se podía ver miles de aquellos libros y entre esos, el manga que tn había comprado como regalo.

— oh... Ya tienes el 3... — Susurró Tn apenada.

— Si, al menos que no veas. — contestó.

Tn tomó el libro y caminó queriendo irse de la habitación pero en cambio, cerró la puerta y se giró señalando a Sunoo.

— Intento esforzarme en ayudar a cualquier paciente del hospital y tú eres uno de ellos, tuve la linda acción de ayudarte cuando te encontrabas mal y sigues tratándome mal. — contestó Tn con un leve hilo en la voz.

Tn siempre fue caracterizada de niña por no mantener una discusión, de alguna manera siempre terminaba llorando y la culpa la tenían sus padres.

Cuando un hijo no puede seguir una discusión en la que tiene toda la razón pero en dónde los padres no le permiten aquella opinión, es porque claramente le prohíben la libertad de expresión.

Es algo muy común que se ve en la actualidad.

— Pe-

— No me importa que digas, estudie todos estos años para aprender cosas nuevas y no que alguien como tú me venga a humillar de esas maneras tan raras que un chico de tu edad tiene. — contestó llorando.

— ¿Aún soy nueva pero podrías tener una pizca de amabilidad cuando te diriges hacia mi ? — preguntó pasando su mano por sus mejillas húmedas.

Tn logró intercambiar miradas con Sunoo y ahí es donde se dió cuenta que pasó un límite, además, el rostro sorprendido de Sunoo lo decía todo.

El no se esperaba eso.

— wow. — contestó Sunoo — que directa.

Tn negó con la cabeza avergonzada y comenzó a pasar sus manos ahora por sus ojos, así corriendo de forma inconsciente en ocasiones su leve maquillaje.

— Lo lamento.

— Está bien, tu ganas, empezaré otra vez. — respondió Sunoo.

Tn lamió sus labios apenada por la situación sin dejar de prestar atención a cada palabra que decía Sunoo.

— Soy Sunoo. — contestó extendiendo su mano.

— Tn...

— No me gusta socializar en los hospitales pero veo que contigo tendré que hacer una excepción. — respondió Sunoo dando una leve sonrisa.

— ¿Como amigos? — preguntó Tn dando un leve apretón a Sunoo.

— Cómo un tomodachi.

𝐓𝐨𝐦𝐨𝐝𝐚𝐜𝐡𝐢 - 𝐊𝐢𝐦 𝐒𝐮𝐧𝐨𝐨 & 𝐓𝐧Where stories live. Discover now