𝙎𝙃𝙄𝙉𝙀 «𝓐𝓵𝓮𝔁 𝓦𝓸𝓸𝓭𝓼»

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EY, guapa. Quería ver cómo estabas... -empezó Daniel cuando llegamos a la casa de Hayley. Se calló al ver a Leo- parece que estás genial
Daniel... -le llamó Hayley para luego ir tras él-
Yo iba a ver si aquí estaba Alex... -dije a lo que Leo negó-
Pero ven, Hayley querrá que nos ayudes -dijo Leo dejándome pasar junto con Daniel y Hayley-
¿Qué es este lugar? -preguntó Daniel-
Parece una conexión con la cueva -le dijo Leo- y mira eso
¿Es la puerta de la cueva? -preguntó Hayley-
Debe serlo. Piénselo -le dijo él- así es como Jason podía controlar tanto mientras aún trabajaba aquí
Sí mi padre viera esto, se moriría -dijo Brooke-
Se lo deberíamos decir a Ryan -le dije a Hayley-
No, está abrumada -me dijo ella- lo haremos con el tiempo, pero primero averigüemos que es esto antes de preocupar a todo el mundo
Probablemente no se nada -añadió Leo- quizás hay un cortocircuito en la cueva y es lo que causa el pitido. Podríamos ir a apagarlo
¿Qué? ¿En serio? -negó Daniel- la última vez que bajé a esa cueva, había una bomba a punto de explotar
Vale. Pero la policía peinó la cueva. No debería de haber nada peligroso -dijo Hayley-
Algunos se quedan aquí y otros vamos -dijo Leo-
Está muy oscuro ahora. Mis padres se van mañana por la mañana -dijo Hayley- podríamos ir entonces
Vale. Tras el desayuno, nos reuniremos de nuevo -dijo Brooke para luego irnos no sin tener un encuentro raro con Sophie, Parker, Max y Emma-

LOS chicos estaban de camino a la cueva hasta que, sin decirlo literalmente, supimos que Daniel se había ido al entrenamiento tras la amenaza del entrenador
Iré yo -afirmó Hayley-
Yo iré contigo. Tu hermano me mataría si te pasase algo. Yo misma lo haría -le advertí saliendo de allí junto a ella-

ENTRÉ a la cueva dejando a los dos atrás mientras cotorreaban y sonreían y yo hacía como que no les estaba escuchando. Entrecerré los ojos por el humo que empezaba a ver y tiré del brazo de los dos para empezar a correr mientras tosiamos esperando a que Brooke abriese
Vamos -dijo Leo cuando la puerta se abrió. Hayley paró haciendo que yo también- ¿Qué? ¿Qué pasa?
Creo que he pisado un detonador... -habló Hayley-
De explosivos -completé-
Sí muevo el pie... -habló ella-
Este lugar volará por los aires -completó esta vez Leo-
¿Qué? -preguntó Hayley tras toser-
Brooke cree que ya salimos -le respondí cuando la puerta se cerró-
Aguanta, ¿vale? Te sacaremos de aquí -le dijo Leo-
Lo siento mucho -dijo Hayley- por meteros en esto, por traeros aquí
Es lo que me encanta de ti, Woods. Haces la vida interesante -le dijo Leo a lo que miré hacia un lado con algo de incomodidad-

IDOS -nos dijo Hayley cuando la puerta se volvió a abrir-
No pienso irme sin ti -negué con la cabeza-
Idos. Correré detrás de ustedes -repitió ella-
¿Y la bomba? -preguntó Leo-
Es rápida. Las Águilas lo somos -sonreí-
Idos. La puerta se cerrará pronto y apenas puedo respirar -dijo Hayley-
¡Vamos, chicas! -gritó Leo desde fuera-
Juntas somos más fuertes -le dije a Hayley entrelazando nuestras manos. Ella me miró a lo que yo asentí y empezamos a correr pero las rocas y columnas cayeron encima de nosotras y lo vi todo negro-

ABRÍ los ojos para luego quejarme con dolor al ver una roca aplastando una de mis costillas y una pierna. Giré mi cabeza lentamente y vi a Hayley a mi lado
Hayley, despierta, Hayley, vamos -le llamé estirando con mucha dificultad mi brazo para moverla. Segundos después ella se fue despertando-
¿Maggie? -murmuró-
Sí -asentí para luego tratar de quitar la piedra que estaba encima mío- me duele
Y a mi. Pero tenemos que salir de aquí -dijo ella empezando a arrastrarse- vamos, aquí hay agua
No puedo moverme -le dije apretando mis labios con ansiedad-
Vamos, Maggie. Tranquila -me dijo volviéndose a arrastrar frente a mí y abriendo sus manos encima de mi boca haciendo que el agua caiga en esta-
Gracias -le dije-
Te quedaste... -susurró volviéndose a acostar en el suelo-
Un Águila nunca deja a uno de los suyos -le respondí para luego, con toda la fuerza que pude, quitar la piedra de mi abdomen y respirar con dificultad. Noté mis ojos más pesados y dormí-

HAYLEY, por ahí -señalé un hueco mientras algunas piedras caían encima de nosotros ya que estarían perforando las rocas-
Vamos -asintió Hayley después de que un ratón entrará seguida de nosotras. Menos mal que no tenía claustrofobia-

SE que nos vemos mal -murmuré con cansancio cuando nos arrastramos hacia donde estaban ellos y se nos quedaron mirando- pero podíais disimularlo mejor
¡Maggie! -dijo Alex para luego ir hacia mí. Prácticamente me dejé caer en sus brazos mientras él se acercaba a abrazar a su hermana junto a Daniel y sus padres-
Eres muy cómodo -sonreí con algo de dolor al separarnos- creo que voy a descansar un poco
Maggie, no te duermas, ¿sí? -me pidió colocándome mejor entre sus brazos a lo que yo solté un quejido de dolor- iremos al hospital y te pondrás mejor
Mirad primero que Hayley esté bien -le susurré. Minutos más tarde, me colocaron en una camilla pero sujeté su brazo- no me dejes sola
Estaré allí -asintió Alex para luego besar mi frente. Dejé que me pusieran lo que hiciera falta para que el dolor fuese menor-

¿ALEX? -sonreí mínimamente tras abrir los ojos y verlo sentado en el sillón al lado de mi camilla leyendo un libro-
Estoy aquí, Maggs -me respondió acercándose más a mi para luego besarme de una forma...¿agradecida?- me has asustado...cuando supe que Hayley y tú estabais allí...
No quería que lo hiciera sola. No podía dejarla allí -le dije-
Me lo ha contado -asintió- pero, si vas a hacer algo peligroso, cuéntamelo. No quiero que te vayas...
Lo siento -murmuré-
No pidas disculpas -negó para luego entrelazar nuestras manos- me alegro de que sigas conmigo. ¿Qué tal te sientes?
Como la mismísima mierda -le dije provocando que ambos riamos- ¿Te han dicho lo que me ha pasado?
Una costilla rota -me respondió- quitando todos los moratones y heridas que tienes
Bueno, eso explica porque estoy hecha puré -le dije con diversión- seguro que me tengo que ver como un zombie
Estás preciosa -sonrió Alex a lo que yo reí-
Eres un buen mentiroso -le dije haciendo que sonría- ¿podrías decirle a Sophie y Parker que estoy bien? Son capaces de todo por saberlo
Antes de venir aquí he hablado con ellos. Estaban muy preocupados -me respondió a lo que yo asentí para luego quedarnos en silencio-
¿Qué me ocultas, Lex? Yo también tengo tu super don -le dije cerrando los ojos por un momento para luego verle-
Hayley y tú tenéis la cura de el virus que tiene Leo. Le van a hacer una extracción a Hayley para salvarle -explicó Alex-
Entonces ahora...somos la cura -afirmé tras unos segundos a lo que él asintió- ¿No puedo tener un curso normal como todo los adolescentes?
Nosotros no somos como los demás adolescentes -negó Alex para luego levantarse- voy a la máquina expendedora. Ahora vuelvo
Tráeme todo lo que lleve chocolate -le pedí escuchando su risa mientras se iba. Ahora somos la cura...-