Amigos en secreto

21 2 0
                                    

Era una linda y tranquila mañana de sábado. Los tres amigos el día anterior y toda la noche se habían dedicado a arreglar su jardín y por fin habían terminado.
— Por fin, estuvimos toda la noche con esto. — Comenzó a hablar Edd con una felicidad casi dramática. — Chicos por fin termina...
— Aún falta algo — Matt interrumpió para después rápidamente colocar una coronita de flores en la fuente donde se encontraba una estatua de si mismo. —, Listo.
— ¿Enserio?
— Si — Respondió el pelirrojo como si hubiera cometido el acto más importante de su vida.
— Ya es bastante estúpido tener una fuente con la forma de Matt. — Se quejo Tom con algo de burla en sus palabras. Matt sólo se redujo a hacer una mueca de resignación.
— Chicos, creo que ahora deberíamos sentirnos orgullosos y admirar lo que hemos cosechando. — Dijo con orgullo al mismo tiempo que abrazaba a sus dos amigos.
El patio trasero realmente se veía más atractivo aunque fuera algo pequeño. Del lado izquierdo se encontraba aquella pequeña fuente cuadrada donde en medio estaba aquella estatua de Matt semidesnudo posando como si fuera algún tipo de deidad, también había Rosales adornando toda la orilla que era marcada por la cerca, cortaron el césped a una medida perfecta y como toque final colocaron de una esas mesas con sillitas perfectas para pasar un rato al aire libre.
Sin duda fue un buen resultado para su salida de su zona de confort.
— ¿Ahora podemos ir a dormir? — Pregunto Tom para luego dar un bostezó.
— Sip, los alcanzo después... quiero seguir admirando. — Dijo sin despegar su vista de su jardín.
Matt y Tom asintieron para luego ambos irse a sus respectivas habitaciones y dejar a un lado a Edd.
Edd merodeo un poco por su jardín para admirar un poco mas de cerca, hasta que su paz fue arruinada.
— Pero miren quien está aquí y no me dejó dormir.
— EDUARDO — Reacciono dramáticamente el de verde como normalmente lo hace cuando se trata de su rival.
— ¿Qué te pasa tío? ¿Por qué no dejaste dor...?— Decía hasta que se percató de la nueva apariencia del patio trasero de su rival y no pudo ocultar su sorpresa.
— Parece que te he dejado boquiabierto — Edd comenzó a alardear con aires de grandeza. —, este es mi nuevo jardín, yo y mis amigos lo estuvimos remodelando toda la noche y use rosales que son 0% tóxicos para gatos para que a mi bebé no le valla a pasar NADA. ¿No crees que somos geniales?
Eduardo se quedo sin palabras, aún boquiabierto admirando aquel hermoso jardín. Aunque el momento fue interrumpido.
— ¡TENGO OJERAS, OJERAS, ARRUINAN MI LINDO, PRECIOSO Y ESCULPIDO POR LOS DIOSES, ROSTRO! — Grito el pelirrojo desde su habitación.
— ¡CÁLLATE¡, ¡INTENTO DORMIR! — Respondió Tom también desde su habitación.
Edd y Eduardo se quedaron callados por un momento para después mirarse uno a otro confundidos.
— Jeje... Ignora eso, creo que me llaman. — Edd huyó avergonzado por ese momento un poco vergonzoso.

Eduardo no podía guardar la envidia que sentía por su vecino, también deseaba tener un jardín igual de hermoso que el de Edd. Tenía que ser mucho mejor.
Camino hacia el interior de su casa y allí llamo a sus compañeros.
— Chavales, es hora de la jardinería. — Anunció.
— ¿A qué te refieres? — Pregunto confuso Mark. Tanto Jon como Mark estaban igual de confundidos.
— Acaso no han visto el jardín de nuestros vecinos, tenemos que tener uno mucho mejor. — Hablo como si fuera el asunto más importante del mundo.
— Pero no tenemos ninguna experiencia en jardinería. — Dijo Jon con algo de inseguridad para después recibir un pequeño golpe en la cabeza de parte de Eduardo.
— Todos tenemos una primera vez, puede que tengamos suerte de principiantes. — Dijo con algo más de motivación.
Mark y Jon prefirieron no decir nada.

Montaje de Jardinería.
Comenzaron yendo a comprar los materiales que necesitaban. Después comenzaron a intentar plantar todo en el jardín, cavaron hoyos para después echarles mucha agua a las plantas. Al terminar se dieron cuenta que se veía horrible, todo el jardín lleno de agujeros y plantas mal puestas.
— ¿Y la suerte de principiantes? — Dijo con un tono burlesco Mark. Pero Eduardo le volvió a dar un golpe a Jon.
— ¡Podemos volver a intentar! — Grito molesto Eduardo.
— Olvídalo, esto es una completa perdida de tiempo. — Mark volvió a hablar con desmotivación para después volver al interior de la casa junto a Jon.
— No se vallan aún podemos...— Decia mientras al mismo tiempo intentaba hacerlos regresar sin ningún resultado.
En ese momento Eduardo escucho una voz familiar que provenía de la casa vecina y rápidamente volteo hacia atrás.
— Parece que intentaste copiar mi idea y no salió bien, se más original la próxima vez — Edd decía con tono burlón mientras que se recargaba en la cerca.
— ¡Cierra la boca!, no te copiaba yo sólo...— Se quedo pensativo tratando de buscar una buena excusa.
— No tienes que poner excusas, lo entiendo, cualquiera querría tener un gran y hermoso jardín. — Decía con un tono de motivación forzada. Bajando rápido a un tono serio. — Pero nosotros lo hicimos primero, así que si parece una vil copia.
— Bien, tú ganas, da igual ni salió bien. — Eduardo contesto con un notable enojo.
— Peeeero... puedo ayudarte. — Este comentario llamo la atención de Eduardo.
— No, no debo juntarme con la gentuza. — Exclamó con resignación.
— Estás desaprovechando una gran oportunidad. — Comento el de verde con un tono interesado.
— ¿Por qué me ayudarías en primer lugar?, de seguro estáis tramando algo — Contesto con una obvia desconfianza.
— No soy tan malo ¿sabes? — Respondió algo ofendido. —, estoy tratando de hacer que nos llevemos bien.
— Me da igual, NO es NO. — Fue su último comentario y después volvió a dentro de su casa.
Edd prefirió no insistir.

• Amigos en Secreto • EddsworldDonde viven las historias. Descúbrelo ahora