EL HAREM DEL SEHZADE MEHMET

Un Dia Normal

*Dos años después*

*Narra Hasret*

Mehmet caminaba de una punta de sus aposentos al otro, la verdad había logrado mareame a tal punto que me acosté en la cama, estaba llenos de nervios pues según sus cálculos su primer sobrino de parte de Mihrimah tendría que haber nacido ya.

-Tendrimos que ir! -dice serio-

-Amor mío hace dos días volvimos de la vista a Mustafa para conocer a la hermosa de Meltem-

-Ya lo sé pero aún no me preocupa, por eso pediré que preparen todo para ir al palacio-

-Corazon mio, sabes que te apoyo en todo pero viajar con Ahmed y Ece estando embrazada no es muy cómodo, los dos son muy activos -lo miro-

-Podemos mandar a los niños entre carruaje e irías solo con mí princesita-

-MEHMET! TIENE SOLO CUATRO AÑOS -digo molesta-

-Perdon mí esposa bella -se acerca a mí- me tiene nervioso esto de no tener noticias -acaricia mí mejilla-

-Pues descarga eso con otra -digo seria-

-rie- si descargo con Ece voy a terminar con una gran mordida-

-Esa niña es ferroz a pesar de sus dos añitos y lo poco que habla-

-tiene otras maneras de hacerse entender-

-La adoro, es un gran compañera-

Volví a mis aposentos para poder ver a mis hermosos bebés porque si podían tener 40 años, para mí serían siempre los pequeños que tuve en mis brazos además quería hablar con Mina pues con esto de los embarazos bastante seguidos, sabía que en cualquier momento iban a intentar llegar a los aposentos de mí marido, especialmente con las chicas que mando Sha, sabía que no podría evitarlo para siempre pero mientras me estaba encargado de que las muchachas que hicieran alguna insinuaciones de querer pasar por mí Sehzade quedarán infértiles gracias a un pequeño te, todo esto lo hablé con Nurbanu y la sultana Hurrem, todo estaría bien si nadie se enteraba por suerte esto sería fácil pues por ahora Mehmet me ha sido totalmente fiel a su palabra.

-Como están mis amores? -digo al entrar en mis aposentos-

-Mami mami -grito Cem-

-Mi niño bonito -me agachó y beso todo su rostro-

-Mami no sabes lo que hizo Ahmed- susurro- estábamos por ir con Mina al jardín cuando se soltó y corrió al Harem-

-¿Y que más? -digo tratando de no reír-

-Grito que todas ellas eran sus novias-

-¿En serio?- lo miro subiendo una ceja-

-Sipi mami, el es un traidor- se cruza de brazos- pero no te preocupes porque yo solo te quiero a vos -besa mí mejilla-

-No digas esa palabra Cem -digo sería- Solo estaba jugando hablaré con el, ahora ve con Airia-

-Chau mami -corre-

-Ahmed -digo sería mientras me acerco a dónde jugaba con Hakan-

-¿Si ma? -dice haciendo puchero-

-Me contó un pajarito que tenés novia -lo miro-

-Cem eres un traidor -grita mientras se dispone a correr-

-Lo agarro con cuidado del brazo- Ahmed no digas esa palabra!-

-Perdon ma pero no tenía que contarte-