Everybody has a price

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El ambiente en la casa de Naruto unos días después no era tan alegre como solía ser cuando venía Shayera. Normalmente, los dos pasarían el rato como antes, pero hoy ella no estaba de buen humor. Durante la última media hora, Shayera había estado tratando de decirle los posibles resultados, las repercusiones y lo que debería y no debería publicar en las redes sociales, ya que se había convertido en un tema candente casi de la noche a la mañana.

La mayoría de las personas que se pusieron del lado de él y creyeron que él simplemente la mató fueron aquellos que habían sido afectados en la vida por los muchos villanos del mundo. Aquellos en el otro lado del espectro eran aquellos que creían que nadie debería ser asesinado y que todos deberían ser puestos frente a un juez y un jurado.

Una idea tonta si le preguntas, pero oye, ¿qué puedes hacer? Cuando alguien ha tomado una decisión, no está tratando de escuchar nada más.

Sus ojos siguieron la forma de Shayera desde su lugar en el sofá mientras ella paseaba de un lado a otro murmurando para sí misma. Debió sentir su mirada cuando se detuvo a mitad de camino y se volvió para mirarlo con el ceño fruncido en su hermoso rostro.

Naruto no estaba seguro de si lo hizo consciente o inconscientemente, pero cuando se volvió hacia él, sus alas se extendieron ligeramente, lo que hizo que se preguntara si las movía tan fácilmente como lo hacía con otras partes de su cuerpo.

"¿Cómo puedes sentarte ahí y comer papas fritas en un momento como este?" Ella preguntó y con enojo le robó la bolsa de la mano. "¿Cómo no te molesta esto? El mundo piensa que mataste a Overgirl. Incluso si fuera una villana, sigue siendo ilegal". Ella añadió.

Devolviendo las fichas a su mano, se recostó en el sofá y apoyó los pies en la pequeña mesa frente a él. "No estoy preocupado porque no hay un caso real". Dijo mientras miraba dentro de la bolsa para ver qué chip comería a continuación.

Shayera se cruzó de brazos y se paró frente a él, dándole una mirada que gritaba 'explicar'.

"Desde que se creó la Liga de la Justicia, o desde que aparecieron los humanos con superpoderes, han hecho el trabajo de la policía en todo el país". Empezó entre bocado y bocado. "El gobierno ahora necesita parecer que está haciendo algo, así que esto es lo que está pasando. Es una farsa en realidad".

"¿Oh? ¿Cómo te imaginas eso? Difícilmente llamaría a un juicio por asesinato llevado a cabo por la corte suprema un asunto ligero". ella replicó.

"Eso es otra cosa". dijo Naruto. "¿Crees que la corte suprema se molestaría con un caso de 'asesinato'? No. Son solo ellos porque es un miembro de la liga en juicio. Pero de todos modos...", continuó. "¿Querías saber cómo fue una farsa? No hay grabación del evento, por lo que no hay pruebas reales de que haya sido un asesinato en primer grado". Dijo, levantando un dedo en el aire.

“No podría ser un asesinato en segundo grado porque, de nuevo, sin video no hay pruebas y no se hizo con la intención de causar daño o lesiones”. Otro dedo se levantó.

"Esto no es Florida, Pensilvania ni Minnesota, por lo que no hay asesinato en tercer grado". El tercer dedo subió. "Además, fuiste testigo de todo el asunto, así que sabes que nunca la ataqué. Por cierto, espero que hayas disfrutado el espectáculo, pervertido". Bromeó con una sonrisa al final.

La sonrisa de Naruto se amplió cuando vio que el rostro de la mujer se calentaba de vergüenza.

"Manhunter se fue y uno de nosotros tuvo que quedarse allí para asegurarse de que no intentara nada. Por lo que sabíamos, ella podría haber sabido que las cámaras tendrían que apagarse si comenzaba a desvestirse". Dijo la mujer alada, tratando de justificar sus acciones. Apartó la mirada porque sabía que su defensa era débil y no tenía ganas de ver la mirada engreída del hombre.