No toques mi libreta

944 67 45
                                    

Hace mucho tiempo en el año 1836, nació el hijo de el conde Ainswoth y la duquesa Sinclair, en el día 22 de noviembre, el cual fue llamado Lysandro.

Lysandro era un joven muy educado y caballeroso o al menos eso parecía, él era albino y tenía el cabello blanco, también tenía heterocromia, eso significaba que tenía los ojos de distinto color, uno era verde claro y el otro ambarino. El tenía un problema, el cual era que siempre olvidaba donde dejaba sus cosas, en particular su libreta, la cual no dejaba a nadie leerla...

Al cumplir los 17 años en 1853, el conde y la duquesa organizaron una fiesta para celebrar sus 17 años. A Lysandro no le gusto la idea, a él nunca le gusto que hubiera gente en su mansión.

Cuando la fiesta comenzó, lo felicitaba toda la gente que había ido. A lo lejos logró visualizar a Debrah, su prometida.

Ella lo odiaba y hacia lo posible para que lo pasara mal, él también la odiaba.

Cuando la gente empezó a bailar recordó algo, recordó que había dejado su libreta sobre su cama y cualquiera podría sacarla, no vio a Debrah por ningún lugar, y pensó que ella podría leer su libreta.

Así que corrió a su habitación para asegurarse que nadie haya visto su libreta.

Al llegar vio a sus padres y a Debrah leyendo con terror su libreta. Ellos al verlo parado ahí, se asustaron más de lo que estaban y su padre dijo:

-Ly-Ly-Lysandro! No es lo que piensas no-no-nosotros no quisimos leer tu libreta solo...

Pero Lysandro lo interrumpió diciendo:

-No podían leerla... ¿porque lo hicieron?... sabían que no dejaba a nadie leerla...-dijo Lysandro cerrando la puerta con seguro y tomando una navaja que siempre traía con él

-Lo sentimos mucho Lysandro- dijo Debrah a punto del llanto

-Me aseguraré de que nadie lo sepa...-susurro Lysandro un poco alto para que ellos lo oyeran

-¡Fueron ellos! -dijo Debrah apuntando a los padres de Lysandro- ellos tienen la culpa ellos me obligaron a leerla- dijo Debrah muy asustada y llorando

-Lysandro tu sabes que nosotros nunca... -dijo su padre muy nervioso -hariamos eso ella te está mintien...-su padre no alcanzo a terminar la frase al sentir una punzada en su estómago- do... -dijo antes de caer

Su madre corrió muy alarmada a ver a su esposo tirado en el suelo, pero al arrodillarse a verlo, Lysandro hiso un profundo corte en su cuello.

Al ver a Debrah forzando la cerradura y gritando por ayuda se dirigió hacia ella, le cubrió la boca y la apuñaló en su estomago, la apuñalada no fué tan profunda para que no muriera al instante y sufriera por todo lo que le hizo a él. Recordó cuando ella mató a su mejor y único amigo Castiel y le mando fotos de su cadáver y sólo lo hizo por diversión.

La apuñaló unas 20 veces hasta que dejó de moverse y sus ojos se pusieron blancos. Al verla en ese estado, no pudo evitar soltar una carcajada.

Se sentía tan bien hacer eso...

No toques mi libretaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora