Alpha y Alpha [Todobaku]

Capítulo 14

Alfas.

La parte más alta en la jerarquía. Un ser absolutamente dominante. Un humano altamente capaz, con sentidos desarrollados y gran fuerza. Un alfa es...

Un depredador.

-Ven con todo bastardo mitad-mitad.

-Lo mismo digo Bakugō.

Ambos parados a los extremos del campo, se miraron fijamente. Quizás sus compañeros que estaban afuera observando la lucha no lo notaron. La sed de batalla en sus ojos.

¿Qué es el instinto de un alfa?

Sus respiraciones fueron ligeramente aceleradas, sus corazones bombeaban más rápido. Las emociones en sus pechos se agitaron.

Es la clara representación de la posesividad y competencia en su significado más puro.

Y cuando sonó la señal de inició, las pupilas del Todoroki se agrandaron y algo más dentro de él pareció despertarse. Fue como si levantara el velo de la jaula, revelando una bestia sedienta de sangre, con las fauces abiertas dispuesto a desmembrar al que se le cruzara. Pero la jaula era demasiado frágil para contenerlo y simplemente... Se rompió.

¿Qué pasa si los instintos de los alfas se desataran completamente?

Katsuki se movió rápidamente, liberando sus explosiones, luciendo perfectamente normal ante los ojos de los demás. Pero nadie sabía, que en estos momentos sus instintos no pudieron resistirse a la provocación del alfa contrario. Fue irresistible. Como consumir un dulce repleto de veneno. Sus ojos se pusieron rojos por la cantidad de fuerza de voluntad ejercida para controlarse, pero cada vez se hacía más imposible. Estaba cayendo.

Naturalmente, si eso sucediera... Se derramaría sangre.

Ambos chocaron, surgieron variadas explosiones fuertes que hicieron estallar el hielo en pedazos. Ambos alfas se alejaron, estando solo a unos metros, pero eso fue suficiente para observar los ojos del contrario. Y fue como si el tiempo se estuviera deteniendo, como si el resto dejara de existir. Es en ese momento que ambos pensaron...

"Lo quiero desgarrar"

Bakugō se adelantó y saltó con toda la intención de explotar esa cara perfecta de niño bonito, pero el bicolor no se quedó atrás. Con precisión evitó la explosión del rubio y rodó por el suelo, esquivando el ataque del alfa contrario.

¿Y que pasa si dos alfas se enfrentaran?

Las explosiones llovieron por todas partes, el hielo y las llamas se esparcieron por la mitad del campo. La temperatura subía y bajaba. El olor a sangre se sentía por todo el lugar. Los demás no pudieron evitar pensar "¿Es esto realmente una competencia?" Porque entre todos, solo pudieron ver la crueldad más intensa de dos alfas opuestos.

Si eso sucediera, serían como los animales luchando por la dominación. Y solo hay un resultado ante un enfrentamiento tan bestial.

La sumisión.

Y cuando la batalla se volvía más intensa, Aizawa pudo notar que parecían volverse muy violentos. Frunciendo el ceño, se acercó rápidamente para observar mejor. Pero el polvo se alzó, cubriendo su visión. Dudando en si intervenir, el polvo se disperso revelando la escena.

Todos se sumieron en silencio por lo increíble que era.

Bakugō fue sometido contra el suelo, mientras el Todoroki presionaba todo su cuerpo sobre el rubio. Esa fue la primera victoria de Shōto contra Katsuki. Pero eso no fue tan impactante para los que estaban lejos de la batalla. Midoriya quien era el más cercano a esos dos sintió miedo. Un miedo que nacía de su instinto, porque los ojos del Todoroki cuando miraba al rubio no eran en absoluto gentiles.

Parecía como una bestia hambrienta que obtenía a su presa.

Estaba a punto de devorarlo.

Aizawa reaccionó rápido y desactivó las habilidades de ambos, mientras separaba a los dos alfas lastimados. Izuku, con preocupación, se acercó a su amigo de la infancia, notando su cabeza agachada. Intentó ayudarlo a levantarse, pero este golpeó su mano lejos y se levantó solo, mostrando una mirada ilegible. Pero cuando su vista se desvío al tipo de dos cabellos que actuaba normal, no pudo contener un sentimiento oscuro, pero tan rápido como apareció, desapareció.

Sintiendo la sangre en su boca, reunió el líquido y lo escupió al suelo. Se limpió la sangre de su nariz y salió del campo sin mirar atrás. Solo que no sabía, que todas sus acciones cayeron ante la vista de un alfa bicolor, quien mostraba una calma aterradora.

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En la enfermería, ambos alfas estaban sentados en diferentes camillas, recibiendo el tratamiento de la anciana pequeña. No los besó, pero si trató sus heridas ya que no eran tan graves como para activar su quirk.

La mujer mayor los miró y sintió que había algo extraño entre ellos. Estaban demasiado callados.

Katsuki estando ya tratado, se levantó sin mirar al otro alfa y salió de la enfermería cerrando la puerta con un golpe fuerte. La anciana volvió la vista a la cabeza agachada del bicolor, encontrándose con una leve expresión de remordimiento en el rostro del joven. Sintiendo el ánimo delicado del alfa, terminó de tratarlo y le ofreció unas palabras de cuidado, luego de eso lo dejó ir.

Shōto, al salir de la enfermería, no esperaba que Bakugō lo estuviera esperando. Sintiéndose como un niño que hizo algo mal, agachó la cabeza, esperando la sentencia del contrario, pero para más sorpresa, no le dijo nada malo.

-Lo hiciste bien bastardo.

Fueron palabras secas y ásperas, parecían algo apuradas por lo reacio que estaba el alfa rubio, pero nada cambiaba su significado.

Él quería abrir la boca y refutarlo, realmente quería preguntarle si sabía lo que iba hacerle "¿No sabes lo que quería hacerte en ese momento?", pero se tragó sus preocupaciones y miró al alfa rubio, reprimiendo algo dentro de él.

-Fue una buena pelea Bakugō.

Sus labios solo pudieron decir eso, su expresión seguía siendo estoica, pero solo él sabía lo extraño que sentía. Él realmente estaba a punto de hacer algo realmente malo a Bakugō allá afuera. Pero no podía ignorar la satisfacción y el deseo insaciable que surgió al someter al rubio.

Su estómago rugió y su mente se desconecto de lo que estaba pensando.

-Tengo hambre.

-¿Y que carajos quieres que haga?

-Comida.

Contesto de forma rápida revelando sus pensamientos.

-¿Me crees tu maldita niñera o que mierda?

-No.

Negó con la cabeza, mientras daba un paso al frente, acercando sus rostros, soltando una voz neutral pero firme.

-Creo que eres una persona importante para mí.

Con el corazón en la garganta, alejó con una mano la cara del bicolor.

-¡No te acerques tanto a mi jodido bastardo!

Y con el ceño fruncido, se alejó, pensando en ir comprar algo para ese idiota. El bicolor lo siguió detrás. Pero el Todoroki no sabía que cuando el rubio se dio la vuelta, su expresión cambió.

Katsuki tenía una mirada seria, sus ojos ígneos mostraban una calma raramente vista, estaba reflexionando sobre lo que acaba de experimentar. Concluyendo una sola cosa de aquel combate.

"Fue peligroso"