El brillo de tu pecho

¿Nos conocimos antes?

Todoroki había regresado de su misión hace apenas dos horas, su vuelo había sido muy tranquilo y se había dormido durante todo el trayecto, así que cuando llegó a las 12 de la tarde estaba listo para entrar en la UA y hacer su trabajo, llegó a tiempo para la clase de Aizawa y le estaba ayudando a uno de los chicos a entrenar, algo normal que siempre hacía y que sus amigos también estaban haciendo.

Solo que parecía haber un problema, alguien lo estaba mirando y lo hacía sin descaro y con mucha intensidad.

Inasa en ese momento estaba "entrenando" estaba haciendo flotar con su quirk dos pesas rusas de 100kg cada una y manteniéndolas en equilibrio, una de las debilidades de su quirk, como todos los de quirks kineticos, es que estos se basaban en la estabilidad mental que tuvieran y extrañamente hoy estaba en calma.

Una calma que no había tenido en cuatro días y que de repente llegaba como si nada, no se había dado cuenta que durante todo el tiempo que llevaba haciendo el ejercicio, se había dedicado única y exclusivamente a observar a Shoto.

Ni siquiera se dio cuenta cuando la clase terminó, casi le deja caer una pesa a Yue, el chico con el que Shoto había estado practicando toda la clase.

Se disculpó muchas veces, asegurándose de que el chico estuviera bien y observó como Shoto se aguantaba una risa, eso lo hizo sonrojar.

Hoy era el primer día después de su misión que él e Inasa volvían a entrenar juntos y la clase estaba llendo algo extraña, si bien Inasa le ponía atención, de vez en cuando se perdía.

- Así? - había repetido el movimiento que Shoto le acababa de enseñar.

- Si, pero la última parte no es correcta – estaban uno frente a el otro, en esta ocasión estaban practicando pelea cuerpo a cuerpo, ya que como sus poderes eran de largo alcance, era esencial que no dependieran de ello por completo.

Le hizo repetir otra vez el movimiento y esta vez lo realizó bien - Si, eso te salió perfecto – y le sonrió.

Shoto no sonreía mucho, el gesto que tenía siempre era uno muy serio, pero esa sonrisa era muy bonita, era una sonrisa sin dientes y no muy amplia, una sonrisa de felicidad satisfecha, orgullosa y era solo para él.

La alarma sonó, pero como eran los últimos esta vez no tenían prisa, así que Shoto se sentó en el tatami y se recargó en la pared.

Inasa estaba cansado de tratar de entender lo que estaba pasando con Shoto, así que simplemente hizo lo que su mente le pedía.

- ¿Puedo preguntarte algo? - el chico se sentó frente a él, mirándolo directamente a sus ojos.

- Claro – se sentó recto y lo miró expectante.

- Recuerdas en tu primer año, en el festival escolar, ¿Qué me acerqué a ti? - la sorpresa en los ojos de Shoto le dijo que no.

- ¿Nos conocimos antes? - eso confirmaba su suposición y lo hizo sentir triste.

El bicolor miró la tristeza en los ojos ajenos y se sintió mal – Lo lamento, no recuerdo muy bien mi primer festival - eso lo intrigó.

- ¿A qué te refieres? - Shoto se sintió avergonzado, pero mirando la seriedad en los ojos de Inasa sentía que no podía ocultarle nada.

Suspiró con fuerza – Hmm, lo que pasa es que Bakugo me golpeó tan fuerte la cabeza que no recuerdo bien todo lo que pasó - era al primero que le decía - Recuerdo haber peleado contra algunos de mis compañeros, pero lo que pasó antes y lo que pasó después de la pelea contra Bakugo es borroso - había tenido que ver la retransmisión de todo el festival para poder llenar los espacios en blanco.