Capitulo Único

283 15 4
                                    

La primera vez que ví a Ermac fue en mí primer día de clases, fuí trasladado de otra escuela debido al trabajo de mis padres. Recuerdo claramente que llegué durante la segunda hora y que no ubicaba bien mi salón, pasaba por el estacionamiento para dirigirme a rectoría para pedir indicaciones y entonces ví a un grupo de renegados saltándose las clases entre ellos estaba Ermac, un chico de piel morena, ojos verdes, cabello castaño obscuro, de apariencia arrogante algo salvaje y que por alguna razón llamo mi absoluta atención pues resaltaba del resto de los chicos, estaba a lado del que me enteraría más tarde era un matón llamado Shao Kahn; Ermac se consideraba entre los estudiantes uno de sus mas fuertes seguidores de aquel a quien llamaban Kahn aunque para mí todos ellos, tanto el líder como sus esbirros no eran más que un montón de busca pleitos. Pésima primera impresión tuve de Ermac y les ignore porque no quería problemas con un cualquiera que tenía ya la vida arruinada, a mí parecer Khan junto a sus chicos iban a terminar trabajando para un horrendo criminal o él mismo seria el líder criminal y llevarían juntos o separados una vida donde mas temprano que tarde tendrían un final trágico.

Sin embargo tarde me di cuenta que Ermac, Shao Khan y yo prácticabamos artes marciales como clase extracurricular, al principio no les tome gran importancia y como me lo imaginé Shao Khan trataba a todos como basura se creía superior a todos aunque pronto conmigo se topo con pared fue derrotado sintiéndose humillado juro vengarse de mí lo que me pareció patético y desvergonzado sin embargo Ermac fue diferente, quizás afuera junto a Shao Khan era un matón cualquiera, pero debo decir sin miedo que cuando lo enfrente era de los más fuertes peleadores de todos a tal grado que incluso lo considere mi rival.

Pronto me di cuenta por muy tonto que les pueda sonar qué el sujeto tenía un buen juicio y un amable corazón pero solo para con los animales ¿Por qué digo esto? Bien, un día cuando ya todos se habían ido yo me había quedado en la biblioteca para estudiar pues los exámenes estaban cerca y yo quería aprobarlos a cómo diera lugar sí conseguía calificaciones perfectas mis padres prometieron inscribirme a clases privadas de artes marciales, entusiasmado estudiaba hasta ya entrada la noche, cuando me retiraba esperando que el último tren no me hubiera abandonado le vi, era Ermac alimentando a unos gatos abandonados y cuidandolos, me sorprendió bastante ese hallazgo y seguí pasando por dónde mismo todos los días sin hacer ruido para notar que él se queda a ahí con ellos. Era un matón tonto y loco, pero me convencí que pese a que Ermac en verdad fuera un raro antisocial amante del peligro y que parecía siempre estar hablando solo como si se viera rodeado de amigos imaginarios o fantasmas (lo que le conllevaba a ganarse el odio de varios aunque eso sí, nunca fue un marginado más que eso era a quien todos le tenían miedo y respeto, incluyendome) no era tan mal chico, solo se había juntado con las personas equivocadas, esperaba que algún día Ermac notará que no necesitaba la aprobación de Khan y pudiera ser libre.

Cuando acabé la secundaria me fui en busca de ser el mas fuerte, quería demostrarlo ante el mundo entero así que estuve en varios campeonatos nacionales e internaciones sin saber nada mas de Ermac, de vez en cuando pensaba en él, me hubiera gustado retarle ahora que me creía el más fuerte sin embargo entraba en razón ¿Por qué querer ver a una persona del pasado? Era ridículo. Durante esos días de entrenamientos, competencias y premios me sentí muy feliz, no me quejaba pues encontraba a peleadores sumamente poderosos... Pero, no todo es tan fácil ¿Cierto? Ya fuese por mi codicia o mi mala suerte el cielo me mando un castigo; me hice amigo de Shang Tsung durante una importante competencia, él era uno de los profesores de artes marciales más importantes que conocía, se acercó a mí como un amigo sin embargo no era más que un monstruo despiadado, queriendo que yo perdiera para que su estudiante obtuviera la victoria me cegó temporalmente y golpeo de tal manera que estuve medio año en un hospital de una provincia, pese a que no podía hablar durante ese tiempo posteado en cama mi mente estaba activa y el odio que le sentía a ese maldito de Shang Tsung fue creciendo, pues no solo había provocado que yo perdiera la pelea y las clasificaciones internacionales sino la oportunidad de volver a participar en cualquier combate... El maldito me había fracturado varios huesos que, según los médicos me imposibilitaban volver a pelear pese a su sanación, así fue como mí destino quedo sellado y mi sueño frustrado.

Mortal Kombat (KenshixErmac)حيث تعيش القصص. اكتشف الآن