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Felix corrió por el pasillo de las habitaciones a primera hora de la mañana, el sol apenas comenzaba a alumbrar cuando Felix tocó la puerta de la habitación de Minho, lo que las cocineras dijeron no podía ser verdad, Minho no podía haber marcado a ese omega.  

El omega rubio estaba listo para golpear a Minho en la mejilla cuando la puerta se abrió, pero sus manos se congelaron al igual que la sangre en su cuerpo.

El omega Bang, ahora Lee, y consorte del heredero abrió la puerta, se veía agotado, soñoliento y bastante desenfocado, sus ojos se cerraban, su ropa estaba mal arreglada, la camisa entreabierta dejaba ver su hombro derecho.

—¿Sí? —dijo Jisung con interrogación, no había mirado quien llamó a la puerta, se recostó contra el marco y cerró los ojos.

—¿T-tú y Minho? —Felix susurró con miedo, —¡Minho! —gritó despertando a Jisung al instante.

Jisung saltó en su lugar y abrió los ojos de golpe, vio a Felix tratando de entrar a la habitación, pero lo detuvo antes de que pudiera hacerlo.

—¿Qué te pasa? ¿Cómo te atreves a faltarme el respeto así? —Jisung reprendió, —no te he permitido que entres a mi habitación.

—Es la habitación de Minho. —Felix replicó.

—A ti te falta sentido común o simplemente haces el tonto, desde ayer esta también es mi habitación, —Jisung informó, —escucha, sé que tú y Minho tienen sus asuntos, no me interesa en absoluto, pero consigue algo de control o te pondrás una soga en el cuello.

Felix lo miró retador. —¿Tú vas a matarme entonces?

—Ahh viejo Lobo, eres intratable, —Jisung rodó los ojos, y le cerró la puerta en la cara, Felix volvió a tocarla mientras Jisung caminaba a la cama.

Subió sobre la cama y después sobre Minho, el alfa aún dormía a pesar del ruido, Jisung llenó sus pulmones de aire y dejó ir su mano derecha contra la mejilla de Minho.

El alfa despertó al instante, trató de enfocarse y descubrir que pasaba, pero Jisung lo golpeo de nuevo, y lo siguió haciendo hasta que Minho le sujetó las manos.

—¿Qué te pasa? —Minho preguntó.

—Controla a ese estúpido omega o te voy a arrancar todas las pestañas, —Jisung amenazó.

Solo entonces Minho escuchó a Felix gritando y golpeando la puerta. Suspirando agotado, soltó a Jisung, el omega se alejó de él de inmediato, Minho se levantó de la cama y arreglándose un poco la ropa abrió la puerta, Felix iba a golpearlo con su puño, pero Minho atrapó su muñeca, lo giró con fuerza y lo empujó lejos de la habitación.

—Suéltame, traidor, ¡Infiel! —Felix ponía resistencia.

Pero para Minho era fácil arrastrarlo a la habitación vecina, lo empujó dentro y miró por el pasillo, afortunadamente parecía bastante temprano para que alguien estuviera en los pasillos, sintió alivió, entró a la habitación y cerró la puerta.

—¿Qué fue lo de hace un momento? —Minho preguntó.

Felix bufó indignado, —¿y te atreves a preguntarlo? Que descaro el tuyo. —Acuso mirando con resentimiento, —lo marcaste.

Minho cubrió sus ojos con su palma izquierda y masajeo su sien tratando de mantenerse firme, tenía que comenzar a hacer valer su palabra, ha prometido tantas cosas a Jisung y ha fallado terriblemente en todo siendo apenas los primeros días con él, el omega Bang le estaba dando soluciones mientras que él solo daba problemas. No podía estar más feliz y aliviado con su esposo, él era comprensivo, no le exigía nada aún cuando era la obligación de Minho.

Hiatus ❥ Inefable: Quédate Conmigo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora