𝑫𝒐𝒏

3.2K 405 6
                                    

Bella pov.

Observé como Alexandra tenía la vista fija en aquel reloj, como si estuviera perdida en sus recuerdos.

-Cuando me transforme no lo vi como una maldición o algo así solo lo único malo es tener sed por la sangre, ser un vampiro tienes todo él día para hacer cosas aunque en ocasiones era aburrido.-Ella rió entre dientes.-sin embargo un día estaba demasiada aburrida deseaba que él tiempo pasara rápido. Por un instante me puse a cazar y sin darme cuenta Carlisle me estaba buscando.

-¿Por Qué Carlisle te estaba buscando?.-pregunte al ver que por un momento ella se quedó callada.

-Lo mismo me pregunte sin embargo él me había dicho que había pasado un día desde que me había ido y yo estaba impresionada porque solo llevaba como dos horas cazando, no entendía nada...-hizo una pausa y suspiró.-Carlisle dijo que teníamos que visitar a unos amigos, en ese tiempo ya estaban con nosotros Esme, Edward, Rosalie y Emmett. Buscamos a los Denali específicamente a Eleazar él dijo que mi don era sin duda muy poderoso y que nunca antes había visto algo igual.-me miró.-Yo tengo él don de controlar él tiempo.

Estaba asombrada, ahora tenía sentido lo que había pasado o algo menos lo que Alexandra había cambiando.

-Eso debe ser fantástico.-Murmuré a lo que ella negó con la cabeza.

-En ocasiones lo es sin embargo un don como el mio requiere responsabilidad. Al principio lo vi fantástico ¿Sabes? Incluso pensé en cambiar varios errores que había cometido.-Su rostro se puso serio.-un día tomé la peor decisión pensando que podía solucionar él problema de mis hermanos.

Su risa irónica me hizo dar un respingo, meneó su cabellera rubia y sonrió dolorosamente, puse mi mano en su hombro tratando de darle algún tipo de consuelo.

-Estoy segura que sea lo que sea que hayas hecho lo querías hacer con la mejor intención.-dije viendo como Alexandra parecía indecisa si decirme o no.

-A veces deseo no haberlo hecho.-confesó sin mirarme.-mi relación con mis hermanos no era tan mala como lo es ahora, ellos no lo recuerdan pero Carlisle si. Con su ayuda practique mi don hasta saber controlarlo por lo que aquel día recuerda lo que hice. Sin embargo mis hermanos me tomaron como egoísta por no querer volver a cambiar sus pasados. Desde ese día me aleje de ellos.

Mi boca se vio repentinamente seca, sin palabras coherentes que decir, por lo que ella prosiguió, como si llevará guardándose mucho tiempo todo.

-Mis hermanos se lamentaban por la vida que llevábamos, sobre todo Rosalie y Edward tanto que pidieron que yo modificara su pasado, Carlisle no estaba seguro pero incluso aunque Esme no lo dijera en voz alta ella quería aun tener a su bebé. Por lo que accedí a hacerlo. Primero hice que Carlisle nunca hubiera convertido a Edward por lo que en 1918 murió, Rosalie no se casó con Royce sin embargo ella se quedo sola y amargada...

Sus palabras salieron llenos de culpa con los hombros hundidos y sus ojos sin ese brillo.

-Emmett murió porqué Rosalie nunca fue convertida, y Esme tuvo a su bebé, le dio una oportunidad a Carlisle. Claro que lo hizo pero hay algunas cosas que están destinadas a suceder, recuerdo perfectamente como era aquel niño que aquí nunca existió. Él enfermo a sus cuatro años, Carlisle no podía curarlo, el niño moriría no sabes la tristeza que teníamos al saber que moriría nos habíamos encariñado tanto... Esme pidió a Carlisle convertirlo.-Alexandra cerró los ojos por un instante.-Sin embargo el no lo hizo, lo demás fue un caos por lo que tuve que volver a la linea de tiempo tal y como debía ser. Carlisle me pidió de nuevo intentarlo pero me rehúse no quería volver a poner a nadie en riesgo sobre todo no quería que todos termináramos mal.

Podía ver él dolor en sus ojos y entendí él porqué su familia no era unida a ella, tal vez los demás no lo recordaran pero ellos egoístamente querían que Alexandra utilizara su don para cambiar su pasado.

-¿Alice y Jasper?.-pregunte con duda.

-A ellos no les cambie nada, solo que no dejo a Alice escoger mi ropa y su hermano favorito es Edward.-respondió Alexandra riendo entre dientes.

Ambas nos quedamos en silencio, hasta que después decidí cambiar de tema, casi toda la tarde nos la pasamos hablando de otras cosas que no fueran relacionados a aquel tema.

-¿Se puede?.-preguntó una voz que parecía proceder del vestíbulo. Entonces vi en el vestíbulo a Alice y a Jasper detrás de ella. Me puse colorada al notar que yo estaba cómodamente sentada en el regazo de Alexandra.

-Adelante.-contestó Alexandra.

Alice no pareció hallar nada inusual en nuestro abrazo. Caminó, casi bailó, tal era la gracia de sus movimientos, hacia el centro del cuarto y se dobló de forma sinuosa para sentarse sobre el suelo. Jasper, sin embargo, se detuvo en el umbral un poco sorprendido.

-De hecho.-dijo Jasper, sonriendo a su pesar cuando entró en la habitación.- Alice anuncia una gran tormenta para esta noche y Emmett quiere jugar a la pelota. ¿Te apuntas?.-inquirió mientras Alexandra parecía pensarlo.

Las palabras eran bastante comunes, pero me desconcertaba el contexto; aunque Alice era más fiable que el hombre del tiempo. Los ojos de Alexandra se iluminaron, pero aun así vaciló.

-Traerías a Bella, por supuesto.-añadió Alice jovialmente. Había creído atisbar la rápida mirada que Jasper le lanzaba.

-¿Quieres ir?.-me preguntó Alexandra  manteniendo su expresión seria.

En parte sabia él porqué ella dejo de ser cercana a su familia, tal vez porque solo la veían como una solución a sus problemas. Por un instante dudé pero no creo que seria tan malo ir.

-Claro. Eh, ¿adonde vamos?.-pregunte. Alexandra me sonrió y beso mi frente.

-Hemos de esperar a que truene para jugar, ya verás la razón.-me prometió.

-¿Necesitaré un paraguas?
Las tres rompieron a reír estrepitosamente.

-¿Lo va a necesitar?.-preguntó Jasper a Alice.

-No.-estaba segura.-La tormenta va a descargar sobre el pueblo. El claro del bosque debería de estar bastante seco.

-En ese caso, perfecto.-El entusiasmo de la voz de Jasper fue contagioso, por descontado. Yo misma me descubrí más curiosa que aterrada.

-Vamos a ver si Carlisle quiere venir.
Alice se levantó y cruzó la puerta de un modo que hubiera roto de envidia el corazón de una bailarina.

-Como sino lo supieras.-murmuró Alexandra aun abrazándome.

-murmuró Alexandra aun abrazándome

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝑻𝒐𝒙𝒊𝒄 𝑳𝒐𝒗𝒆 | 𝑩𝒆𝒍𝒍𝒂 𝑺𝒘𝒂𝒏Donde viven las historias. Descúbrelo ahora