El cuerpo de Gustabo se encontraba sudado mientras que gemia a causa de los besos en el cuello que le proporcionaba el mismísimo Jack Conway... Tenía los ojos cerrados mientras que esperaba a ser follado de una vez por todas...
-Dímelo... ¿Crees que no lo sé?- El rubio abrió los ojos sin entender a que iba esa pregunta pero antes de mediar palabra, el pelinegro tomó su cuerpo y bruscamente le dio vuelta quedando boca abajo- ¿Crees que no sé que quieres que te folle? Dímelo
El alma le volvió al cuerpo, por unos segundos se sintió expuesto, sintió que aquel sujeto sabía sus oscuros secretos
-Follame... te lo ruego- Gimoteo al sentir como su cabeza era empujada contra la almohada
Con una mano Conway agarró su miembro y lo paseo por el exterior del culo de Gustabo, le encantaba torturarle... Apreció cómo su rubio favorito alzaba todo su trasero dándole una buena vista al mayor
Sin esperar más, puesto que se moría de ganas de meterlo, lo hizo... Entró de una al cuerpo sumiso que tenía en frente
Un gemido alto se escapó de los labios del menor, las estocadas eran profundas y de un tempo medio, el lascivo sonido de sus cuerpos chocando se mezclaba tan bien Con los gruñidos y jadeos que ambos soltaban
Conway se tiró más adelante sobre el cuerpo de Gustabo mientras que con su única mano libre, ya que con la otra agarraba fuertemente la cintura del rubio, le tomaba la mandíbula e introducía dos dedos en la boca tan erótica del bartender.
-¿Te gusta así? Te encanta, ¿verdad?- el pelinegro sacó los dedos húmedos por la saliva del menor y tomó de su cabello tirando hacia atrás
-Me encanta- confesó el rubio mientras apretaba fuertemente las sábanas luchando por el placer- se siente jodidamente bien
Así siguieron por un largo rato donde Gustabo no tuvo ni un segundo para respirar... Terminaron recostados mientras el sudor los bañaba, ambos tomaban aire mientras intentaban recuperar el aliento.
-¿Estás bien?- preguntó Conway mientras le miraba de reojo, el rubio sonrió sin mirarle
-Perfectamente aunque me haz jodido bien duro- ambos largaron un par de carcajadas
-Cosas que pasan- Jack se levantó desnudo de la cama ante la atenta mirada de aquellos ojos azules- ¿quieres... Quedarte a dormir? Es tarde.
- No creo poder salir de esta cama en una sola pieza - contestó el rubio sonriéndole al mayor
-Vale, tienes un buen punto, iré a prepararnos café, puedes darte una ducha si quieres, tienes mi ropa en ese ropero de allí- le señaló el sitio mientras desaparecía por la puerta
Gus aceptó la propuesta mientras se levantaba e iba al baño, se miró al espejo evaluando su cuerpo... Tenía miles de marcas rojas por el cuello y bajando, joder, le habían dado muy duro
Abrió la regadera esperando el agua caliente que le recibió gustosa y le ayudó a calmar sus músculos
Por mientras, Jack Conway se encontraba al teléfono con alguien, parecía ocupado mirando la puerta cerrada del baño, como esperando a que el inquilino en su interior tardase en salir
- Sí, lo corroboré- habló en un tono serio- De todas formas esperaré...
-¿Estás seguro de esperar?- la voz desconocida sonaba por el auricular
-Yo me haré cargo de esto, no te involucres ni tú, ni nadie- prendió un cigarro- este asunto es mío
Los ojos oscuros de Conway brillaron con alguna mezcla de malicia y excitación por lo que se venía a futuro...
-Quiero jugar al gato y al ratón- tomó una seca y expulsó el aire- será divertido.
La llamada se cortó, el pelinegro preparó las dos tazas de café y esperó un par de minutos a que Gustabo saliese del baño, recién duchacho y con una toalla blanca en la cintura
El menor agradeció la taza y le dedicó una sonrisa al mayor quién se le acercó para robarle un beso rápido antes de desaparecer él por el baño.
Un sentimiento extraño se apoderó del cuerpo del rubio, se preguntó qué sería... Por casualidad, ¿le estaba tomando cariño al viejo? Imposible dejó la taza casi vacía en la mesa de la cocina y caminó hasta la habitación
-Éste sería el momento perfecto para revisarlo todo- pensó pero rápidamente quito esa idea de su cabeza... Podrían haber micrófonos o alguna cámara
No le jodia ser grabado teniendo sexo, pero otra cosa sería ser grabado con la cara destapada cometiendo un delito en la casa de un superintendente.
Se tumbó en la cama esperando a que Conway saliese del baño, el sueño lo golpeó como si fuese una camioneta 4x4
Tras unos minutos se quedó dormido, Jack le observó al salir de la ducha mientras se secaba el cabello mojado... Se le acercó un poco, Gustabo se veía jodidamente bien. Tenía las pestañas largas, el pelo rubio desparramado por la almohada y parte de su rostro, los labios entreabiertos.
- Se ve como un jodido santo... Y pensar que me rogaba por ser follado- pensó mientras sonreía de lado- Gustabo García...
_____________
*c va y desaparece por otro año*
Na mentira
ESTÁS LEYENDO
Sweet Lies - Internabo
FanfictionJack Conway, el despiadado Superintendente de Los Santos, el alto cargo más temido por los traficantes y mafias pero, para Gustabo, el mandatario no era más que el fruto de su excitación por saber hasta dónde podría llegar.
