NIGHTMARES

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— ¡Has hecho tanto maldito daño a todo lo que estuvimos construyendo!

La escena era demasiado intensa, una gran pelea para semejante pasillo, tan pequeño que solo cabían dos o tres personas, pero a la vez largo, extenso. El eco de la voz de aquellas personas peleando junto al choque del mineral de las armaduras contra las armas utilizadas resonaban por todo el lugar poniendo la situación bajo mucha tensión. Un paso en falso y uno de los dos terminaría con su vida.

De un momento a otro el hacha fue arrebatada de las manos de aquel portador de delantal blanco ahora manchado por crimenes cometidos o eso se podía suponer, pues no todo lo que cuentan en verdad. El pelinegro había quedado desarmado e inmune a la situación, solo quedaba pelear con las manos pero aún así no sería suficiente y el lo sabía, simplemente no quería huir como un cobarde sin haber hecho nada. Si moria, moriría con honor.

¡¡TENGO UN PICO Y LO PONDRÉ ENTRE TUS DIENTES!!

{• • •}

El grito del moreno se escuchó por toda la casa. Sapnap y Karl se despertaron exaltados. Saltaron de la cama y corrieron en dirección a la habitación en la que el moreno se había estado quedando. Abrieron la puerta de golpe encontrándose con una triste escena. El moreno se encontraba es un estado de completo pánico, se tomaba la cabeza con fuerza intentando esconderse dentro sus piernas. De su ojo -no vendado- salían lágrimas por montones, no se alcanzaba a apreciar de todo pues su cabello cubría gran parte del rostro por mantener la cabeza hacia abajo. Los sollozos del menor en estatura se escuchaban por la habitación, parecía no poder parar.

Sapnap se acercó de manera rápida sin esperar nada intentando sacarlo del trance en el que se encontraba, logrando así calmarlo un poco. En cuanto el menor volvió en sí, se aferró de manera intensa al pijama de aquel que lo abrazaba, comenzó a llorar con más intensidad, se sentía aterrado, desesperado por alguien que lo ayudara. ¿Que había sido eso? Nada más que una simple pesadilla ¿Verdad?. Se había visto y sentido tan real para el joven herido que no podía controlar su miedo. Sapnap sonaba la espalda de su contrario en un intento por tranquilizarlo y femontrarle que estába ahí para el. . . Que estaba a salvo junto a el. . .

[. . .]

— Vuelve a dormir ¿Si?

El pelinegro negó, se encontraba entre las piernas del mayor sentado de lado recostando su cabeza en el pecho de Sapnap. Aún seguía gimoteando un poco, el mayor sabía que Quackity estaba cansado, pero este último se negaba a dormir, ya le habían preguntado que es lo que había pasado, el dijo que no recordaba pero que no quería dormir. . . Tenía miedo. Sapnap comenzó a repartir cariños por el cabello del menor en estatura repartiendo besos de vez en cuando en los mismos para relajarlo y darle seguridad.

Karl por su parte llegó con una taza de leche caliente para el chico. Quackity se sentó de mejor manera retirándose del pecho del otro pelinegro, tomó con ambas manos la taza que Karl le había ofrecido, espiro el aroma de la leche caliente y la bebió con cuidado de no quemarse. Cuando terminó le devolvió la taza a el castaño -que seguido se levantó para dejar la taza en la cocina- y se recostó nuevamente en Sapnap abrazando el brazo del mencionado. La taza de leche le había relajado, sus párpados pesaban, sus ojos se cerraban. El cansancio de haber llorado tanto comenzaba a rendir cuentas pero no podía, tenía miedo a dormir y que la misma escena que ahora ya no recordaba volviera a el. ¿Qué debía hacer?

Sapnap retiro al de cabellera alborotada y se paró, tomando de la mano a Quackity y guiándolos a otro de los cuartos. En esa habitación había una cama más grande, Sapnap se acercó y dejó que Quackity se acostara en medio, al lado se acostó él abrazándolo por en frente. "Hay que dormir ¿Ok? No me iré de aquí" dijo Sapnap en manera de susurro, el moreno no dijo nada seguido correspondió el abrazo escondiendo su rostro en el pecho del azabache mayor. El herido suspiro de manera agotada y entrecortada para luego cerrar los ojos, le ardían de tanto llorar.

No paso mucho para que Karl volviera nuevamente de la cocina entrando en la habitación y recostandose junto a los dos que ya estaban medio dormidos. El castaño abrazo al moreno por detrás cerrando los ojos para por fin dormir al lado de los dos chicos a los que más quería.

Los tres chicos cayeron rendidos ante el cansancio. Se dejaron consumir por el calor de los otros a los que se aferraban. Quackity aún seguía pegando saltitos a ratos pero ya no era tan preocupante, ahora se sentía a salvo en los brazos de los otros dos chicos. . .

Ahora sí, a descansar.  .  .


Genteee

los capítulos no están revisados, me disculpo por eso, no he tenido tiempo 😔 cuando esté de vacaciones los reviso.

Lo más probable es que esté actualizando está historia en específico una vez a la semana (sin correcciones por el momento) por qué si no, nunca la voy a actualizar Q-Q se que no estoy obligada, pero me siento mal dejando las historias así como así.

Sería todo, una disculpa nuevamente y espero están disfrutando de la historia

Byes

.*- Missed Memories -*. [Karlnapity]Where stories live. Discover now