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Ya era de tarde y en la casa se encontraba una pareja de madre he hijo mirando divertidos una película de los ochenta en la sala, tapados con mantas en el sillón y con un tazón de cancha y gaseosa, se encontraban disfrutando de la caricatura, el ambiente era ameno, la calidez brotaba por todas partes y las risas se escuchaban por toda la sala.

--Sabes, aquel gato me recuerda tanto a Coco, ese gato nunca paraba de jugar-- recordó Wendy la primera y única mascota de su hijo, un pequeño gato plomo que bautizaron como Coco, aquel minino lo acompañaba en las tardes cuando Wendy trabajaba y Seungmin se quedaba solo en casa. Aquel animalito acompañó a Seungmin todo lo que pudo, lamentablemente no le alcanzó la vida para seguirle el paso a sus tutores y que desde el cielo sigue jugando con las nubes, de eso estaban seguros.

Seungmin le dio la razón de aquel parecido con el gato animado que ahora perseguía a un ratón mientras cosas le caían encima, así pasaron la tarde madre he hijo, luego de haber terminado, conversaron de todo, su mamá contándole problemas de personas que ni el conocía pero de todas formas escuchaba, hasta que le dijo algo que le llamo la atención.

--Seungmin, cariño, ¿de verdad estás bien?, Te veo un poco cansado, ¿no prefieres ir a descansar en tu habitación?, Y hueles un poco raro de seguro es por los aromas que se juntaron en el bus-- Wendy le ofreció pero el se negó.

--No mamá, estoy bien, solo es el viaje nada más, debe ser eso, me siento perfectamente y no logro oler nada, debe ser por eso-- que olor, él no podía sentir nada, seguro debía ser por estar muy expuesto al ambiente, debe ser por eso, ya que una mamá Omega se sentó a su lado todo el viaje y aquella mujer desprendía una aroma un tanto suave, pero su mamá aún lo miraba con sospecha.

--Bueno si eso dices..., Y cuentame mi vida, ¿ya conociste a alguien que te interese?-- esa pregunta lo hizo atragantarse con el agua que estaba bebiendo.

--N-No mamá, yo no tengo ningun saliente, solo me enfoco en mi trabajo (solo en mi trabajo) ¿Por qué la pregunta?-- quiso disimular un poco, Wendy sonrió de forma traviesa mientras le palmeaba el hombro.

--Sabes que puedes decirme y contarme todo con confianza Seungmin, ya eres una persona adulta y responsable, es obvio que tu corazón va pedir cariño de vez en cuando y si no lo hace tu corazón lo va hacer tu cuerpo-- le guiño un ojo y a Seungmin se le subieron los colores.

--¡Mamá!, Qué dices, estoy bien sin nadie a mi alrededor-- dijo mientras se acomodaba la garganta-- aparte, mirame, no soy lo que las personas buscan o ven atractivo en alguien, quien podría gustar de mi de forma romántica si incluso soy Beta.

Entre las cosas que Wendy más odiaba era lavar la loza pero aparte de eso, era la falta de aprecio que el mundo le llevo a tenerse su hijo, lo odiaba mucho más.

--Mi amor, sabes que eso no es así, tú eres completamente hermoso Minnie, hasta las modelos si te vieran estarían celosas de tu gran belleza, y no importa si eres Beta, Omega o Alfa, quien de verdad te ame poco le va a interesar lo que los demás puedan decir de ustedes dos, por ahí dicen, que para que otros te amén tú tienes que empezar a amarte, bebé. Y quien te ame lo hará con los ojos del corazón y no de superficialiadad.

Seungmin se sentía apunto de llorar, el creció escuchando esas palabras de motivación de su madre pero ahora sabía que tenía mucha razón, pero no era fácil, nunca es fácil. Wendy le abrió los brazos y se acurrucó en el pecho de su madre, recordando como hacia lo mismo desde que empezó a ir al colegio, donde su calvario empezó.

Después de que pasaran unas horas y Seungmin viera como poco a poco el sol iba cayendo por el cielo y había un hermoso atardecer, ya le faltaba poco para que tenga que emprender camino hacia su casa de nuevo, no quería pero era su responsabilidad. Se iba acostar en las piernas de su mamá un rato hasta que se acordó del objetivo principal por el cual él estaba aquí. Miró a Wendy pero ella estaba muy tranquila atenta al dibujo en blanco y negro.

BE MINE Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora