💡Tema de la Semana: Avanzando con Paciencia

3 1 2
                                    


Reina-Valera 1960
Mateo 6:34
Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.

Uno de los temas que mantienen a la humanidad en continua ansiedad es el misterio del mañana. ¿Qué pasará mañana? ¿Llegaré con vida? ¿Contraeré alguna enfermedad terminal? ¿Tendré salud, comida y dinero? ¿Volveré a ver a las personas que quiero, o tendré tiempo de pedir perdón a quienes hice daño? Preguntas como éstas en ocasiones nos roban el sueño, y más en éste último tiempo donde se ha acelerado todo, incluyendo la muerte, las crisis y el hambre.
Ciertamente la humanidad transita por esta vida tal como dijo el profeta Daniel: Corriendo de aquí para allá. ¿Y por qué corren? Porque han perdido la Paz. Sin embargo Dios nos exhorta a ser pacientes. La paciencia es la ciencia de tener Paz. Es la capacidad de esperar que las promesas de Dios se cumplan en su tiempo, sin necesidad de forzar las cosas. Si Dios lo dijo, Dios lo hará. Cuando comprendes que la voluntad de Dios es siempre buena, agradable y perfecta, y que para los que le aman todas las cosas obran para bien, dejarás de afanarte por aquellas cosas que están solamente en las manos y control de Dios. Nuestro Señor es un Padre de familia, y no escatima nada para sus hijos. Él sabe todas las cosas de las cuales tenemos necesidad. Por tanto, solamente confía en Él, y Él hará.
Dios no razona como nosotros. Perdemos mucho tiempo definiendo la vida según lo que vemos. Si me fue bien hoy en el trabajo mi vida es buena; si estoy pasando un momento de dificultad entonces sientes que todo está mal y que Dios se alejó de ti. Pero para Dios no hay días buenos ni malos, para Él solamente hay planes y propósitos que van más allá de lo que podemos ver. Nosotros miramos desde abajo, Dios mira desde arriba. Nosotros miramos los obstáculos, Dios mira la meta.

Por tanto, no estés afanado ni turbado. Sé paciente. Lo que estás viviendo hoy no es para siempre. Todo pasa, y sobre todo, Dios tiene el control. Si habías estado afanado y ansioso, cierra tus ojos y descansa. Dios no se ha olvidado de ti.

¡DIOS TE BENDIGA!

Versículos Bíblicos vol.2Where stories live. Discover now