Época de cambios [Dream SMP]

15 -Fanfarronería

Ella era increíble.

Aunque había llegado hace poco al Smp la chica había logrado adaptarse sorpresivamente rápido al lugar. Sus facciones le recordaban a alguien pero no estaba muy seguro de a quien, quizás a Alyssa, más que nada por ese cubrebocas que usaba.

Drista y Tommy conectaron inmediatamente, tal vez debido a sus personalidades caóticas y destructivas. Nadie estaba a salvo de ese par.

Technoblade pasó un mes con el cabello celeste eléctrico tras cambiar su tinte, agregaron tinta de glow squid a las cremas faciales de Wilbur así que ahora su cara brilla en la oscuridad, y Philza tiene el constante temor de chocarse con paneles de vidrio colocados aleatoriamente por su casa.

No había nada mejor que disfrutar de unos helados mientras observaban a su más reciente víctima. Ataron las herramientas de Foolish a pequeños endermites por lo que cada que trataba de agarrarlas estas se teletransportaban lejos de él, haciendole descender lentamente a la locura.

Drista rió al oírlo gritar de frustración, era tan divertida, inteligente, fuerte e ingeniosa. Se le revolvió el estómago al pensar en ello ¿Por qué estaba nervioso? ¿Era su risa contagiosa? ¿Lo agradable de su compañía? inquieto pasó una mano por su cabello revelando aquel mechón blanco que ocultaba.

—Wow... —Drista dejó de reír y le observó asombrada—. Eso se te ve super cool.

Cuando Tommy se dio cuenta que le hablaba a él comenzó a reír avergonzado ¿De verdad una chica había dicho que se veía bien?

—¿E-Eso crees? Digo, obvio que es genial, todo de mí es genial, soy genial —Su sonrisa se fue apagando poco a poco hasta volverse una mueca—. Pero... su historia no es tan genial.

—Pues ahora tendrás que contármela, ni creas que me dejarás con la duda—. Dijo apoyándose contra su hombro.

Tommy tragó saliva y tras respirar profundo comenzó a darle un pequeño resumen de lo ocurrido, de Dream, de su muerte y sobre todo... del limbo. Drista lo escuchó de manera respetuosa, no se río, no le interrumpió y no hizo chistes al repecto.

Al terminar la muchacha sobó su espalda al notar que temblaba y le brindó una reconfortante sonrisa de apoyo, fue un momento bastante íntimo entre ambos. Si hubiese dejado la conversación hasta allí hubiese sido perfecto pero Tommy no quería quedar como alguien debil frente a la chica, debía demostrarle que no se dejaba pisotear por nadie.

—Si bueno, la cosa es que ¡Casi logro asesinar al maldito en prisión! ¡De no ser por Sam habría acabado con él!

La chica se puso tensa y sus ojos se abrieron como platos, genial, eso captó su atención.

—-Entré con pociones de invisibilidad y un hacha ¡Dios era un plan increíble!—. Tommy seguía pavoneándose, Drista solo le veía con horror.

—¡¿Por qué intentaste matarlo?! ¡Él ya está pagando por sus crímenes!

—Pero saldrá libre eventualmente ¡Un lunático como él es un peligro! Su muerte es lo mejor para todos.

—¡Tú no pudes decidir eso!

—Oh Dris ¡Si lo conocieras mejor estarías de acuerdo conmigo! Dream. No. Tiene. Arreglo. El único lugar al que pertenece es a una tumba.

Todo ocurrió muy rápido, Drista lo tumbó al suelo con un potente puñetazo en el rostro. En shock se llevó una mano a la mejilla la cual ya había comenzando a enrojecerse por el golpe.

—¿¡POR QUÉ MIE-...!?—. Tommy se quedó callado al una afilada espada amenazar su cuello.

—Escuchame bien, como vuelvas a intentar hacerle algo a mi hermano te arrancaré las tripas y te las pondré como collar hawaiano ¿Entendiste?

Tommy asintió lentamente y ella enterró su espada a escasos centímetros de su cabeza para luego alejarse, se detuvo a los pocos metros y le miró por el rabillo del ojo.

—Imbecil.

Enronces Drista se fue dejando a Tommy tirado y adolorido tratando de adivinar que había hecho mal esta vez.

—¿...Hermano?

Fue solo entonces que se dio cuenta de a quien se parecía, se cubrió el rostro al pensar en su estupidez. Que ganas tenía de morirse en ese momento.

Por hablar de más Tommy consiguió la increíble hazaña de que la unica chica de su edad en todo el continente lo odiara a muerte.

Un grande Tommy.