Aquel festival

5. Casualidades del destino

Estar en casa cuando no estaban mis padres no estaba tan mal, Luca miraba un programa de una caricatura en la televisión que era muy aburrido para mi gusto, pero al parecer, a él le entretenía lo suficiente.

Después de lo que paso hace cinco años era evidente que algo iba a cambiar en casa. Luca era el único que no parecía fingir su cariño por mí, aunque tenía once años sabia escuchar cuando quería contarle algo, también era muy curioso hacia preguntas de todo lo que se le cruzara por el frente. Le gustaba pintar y todo lo relacionado a eso, así que lo inscribí en una escuela de arte, pero para ser sincera, pensé que nuestros padres me iban a regañar por haberlo inscrito sin su autorización.

Para sorpresa mi sorpresa, por primera vez no cuestionaron el que haya gastado mi dinero en alguien que no soy yo.

—Sophie es bonita —escucho decir al pequeño.

—Si es boni... —¿Qué dijo? — ¿Sophie qué?

—Que Sophie es bonita.

Mire incrédula a mi hermano que parecía serio, ni siquiera parecía un niño de once años con esa expresión.

—Pero... su hermano es el anciano de la juguetería —ahora parecía pensativo y decepcionado a la vez — ¿Crees que me deje ser amigo de Sophie?

—¿Por qué no te dejaría ser su amigo?

—Porque le dije anciano. —hace una mueca  —Tal vez no va a dejar que Sophie siga siendo mi amiga.

—Ya ni se ha de acordar que le has dicho a así. Además, no le has vuelto a llamar anciano, ¿cierto? —Lo animo.

—Es verdad, aun tengo esperanzas.

Esbozo una sonrisa y volvió a concentrarse en la caricatura.

°°°°

Escuchar hablar a Alicia de cómo se enamoró de un chico y luego de otro y otro, por una semana era como una rutina.

Me estaba contando como, cuando fue a la plaza se enamoró del chico que la atendió en la heladería, o cuando fue a una tienda de ropa y el chico que trabajaba ahí también se le hizo guapo. Ella era así, siempre que salía terminaba ilusionada de cualquier chico guapo que se le cruzara por el frente, sin embargo, nunca tuvo una relación. Eso solo lo hacía por pasatiempo.

Es de las que creen en el amor y no le importa cuánto tarde en llegar lo esperara. Es una chica simple y muy extrovertida, aunque su personalidad cambió mientras íbamos creciendo, cuando era una niña era muy callada y yo era la extrovertida.

Al parecer ahora cambiamos de roles. Y me alegra que ella sea así, eso le ha facilitado hacer amigos, aunque siempre sea tímida al inicio, cuando tiene confianza es todo un loro.