ateez reactions ♡ | esp ot8

hongjoong ♤ fuego 彡

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La mala cara de tu jefe te advertía que debías hacer un buen trabajo esta noche, sino, estarías en problemas, y es que ser mesera a tiempo completo en aquel bar que luce horrible por fuera pero lujoso y conocido por dentro era un trabajo muy complicado cuando muchos hombres transcurrían a una noche divertida.

El atuendo nuevo se amoldaba a tu cuerpo a la perfección, resaltaba tus pechos y glúteos notoriamente que esta vez no dudabas en que muchos hombres te toquen de más y una gran cantidad de dinero te llevarías a casa si no te quejabas. Ya maquillada y perfumada saliste de la pequeña habitación donde los empleados dejaban sus cosas. Acomodaste tu cabello y estabas lista para trabajar.

Al principio comenzaste normal, incluso muy lento porque no había mucha gente, pero al pasar las horas, comenzabas a trabajar más rápido, tragos por aquí y por allá, debías desprender un aura sensual y misteriosa, por lo cual muchos hombres te pedían tu número para poder tener otros encuentros más agradables, a lo cual dictabas uno falso para ahorrarte cien llamadas perdidas al día. Ya estabas cansada, pues ya había pasado tu horario completo de trabajo y debías ir a casa.

— Hermosa, un tequila y tus pechos y te llevas un buen fajo de billetes a casa — aquel individuo sonrió ladino mientras terminaba de consumir su cigarrillo, ese comentario te sacó de tus casillas que lo quisiste golpear pero te trataste de tranquilizar —

— Yo no soy una cualquiera, y por más que este muriendo por falta de dinero, no haré eso — bufaste sarcástica y dejaste a un lado la bandeja para encarar al hombre —

— Si te dejas tocar por todos los hombres, si eres una cualquiera — el hombre te tomó bruscamente por la cintura, atrayendote hacia él y tu soltaste una cachetada — Pero que..

— Suéltame maldito infeliz — te quejaste, pero el hombre se aferró más a tí, así que no dudaste en soltar un golpe en su otra mejilla, aturdiéndolo y separándose de tí — Tienes prohibido el ingreso a partir de hoy día aquí, ni se te ocurra acercar tus narices por aquí que yo mismo te destruyo imbécil, seguridad — llamaste a los de seguridad y escoltaron bruscamente al hombre hacia la salida, suspiraste y te dirigiste a la habitación de empleados, te quitaste la ropa y sacaste los billetes para guardarlos en tu bolso, te colocaste tu ropa y saliste de ahí —

Te dirigiste al callejón oscuro que estaba a un metro del lugar, sonreíste y presionaste un botón escondido entre la pared, muy bien camuflado, abriendo un pequeño tunel que dirigía al estacionamiento abandonado de la ciudad, pero te sorprendiste al ver a Hongjoong esperándote a la mitad del camino, llevaba su peculiar sonrisa ladina, su cabello castaño peinado dejando su frente descubierta, su camisa negra con unos botones desabrochados y sus pantalones de vestir, estaba precioso ante tus ojos.

— Finalmente llegas — comentó Hongjoong mientras se acercaba a tí y tomaba tus mejillas para besarte desesperadamente a lo cual correspondiste con una sonrisa —

— Tuve que lidiar con un imbécil la noche de hoy — caminaste tomada de la mano de Hongjoong hasta el estacionamiento —

— Preciosa, con ese tipo ya son 53 en menos de una semana, harás un nuevo récord este mes — soltó divertido, a lo que solo atinaste a reír — Se que te defiendes de los imbéciles en aquel bar y eso me volvió loco, recuerdo cuando te conocí en el bar y cuando pedí tu número me diste uno falso — sonreíste divertida — desde ahí, siempre iba a verte con la excusa que tenía que esperar a unos inversionistas — llegaron al estacionamiento y Hongjoong abrió la maletera con sus llaves presionando solo un botón —

— Lo recuerdo perfectamente, y no me arrepiento de haberlo hecho — tiraste tu bolso lleno de dinero y cerraste la maletera, ingresando al auto — A veces pienso que si nunca te hubieras acercado a mí de esa manera, estuviera con otro en estos momentos —

— Oh no linda, eso jamás iba y no va a suceder — Hongjoong te sentó en su regazo, poniendo tus piernas a ambos lados de su cadera— mataría a los que sean necesarios para tenerte — Hongjoong se acercó ferozmente hacia tus labios, besándote desesperadamente mientras le correspondías, bajó con sus manos la blusa de tirantes que llevabas puesto mientras sus besos bajaban a tu cuello —

— Precisamente por eso te amo, forzaste al destino a tenerme y eso me encanta — susurraste sumergida en la calentura que estaba aumentando entre ustedes —

— Y espero sigas siendo así después de nuestra boda, te amo — finalizó Hongjoong para terminar sumergiéndose en la calentura contigo —

Esa noche, las lunas del auto quedaron empañadas y con tus manos impregnadas en él, tus piernas hechas gelatina, tus pechos y tu cuello con moretones y con un bonito anillo de compromiso en tu dedo anular que brillaba más que la luna llena.

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Primera vez que escribo un capítulo así lol, pero debo admitir que no estuvo nada mal, anyways, mejoraré en el proceso.

Hoy, ATEEZ en Chile AAAAAAAHH, hermanas de Chile, pasenla muy bonito por las que no pudimos llegar a comprar los boletos ㅠㅠ

Cuídense mucho y no se enfermen, su salud es de vital importancia ^^