Entre historias y canciones (Markhyuck)

Lavander Haze

"Jeno estaba enojado, no le había gustado nada el término de su empresa, "abrirás la cede de la ciudad de Icheon", Jeno era un gran abogado, siempre espero que el bufette se lo reconociera, al fin lo hacían, pero no quería cambiarse de ciudad.

Bueno, sería al menos por un año y podría cuidar a su abuela.

Jeno bajó del taxi y llegó al edificio, subió las escaleras arrastrando sus dos pesadas maletas.

Su abuela Boa lo estaría esperando, la mujer mayoría vivía en un buen barrio, quedaba cerca del nuevo trabajo de Jeno, así que ambos hablaron y ella le dijo que podría quedarse con él para no gastar en renta, además necesitaba compañía ya que a veces por su edad era difícil hacer algunas cosas.

Buscó el papel donde había anotado la dirección, pero no lo encontró, recordaba que si abuela había dicho que era el número 23-A, así que Jeno se colocó frente a la puerta, tomó las flores que había comprado y sonrió tocando el timbre.

Pero se llevó una sorpresa cuando un joven aproximadamente de su edad abrió la puerta, estaba sin camisa y con unos pantalones flojos. Al verlo ese joven hizo una cara de asco y miró a Jeno.

—Lo que sea que hayas escuchado, no es así. —E intentó cerrarle la puerta en la cara.

Pero Jeno se sorprendió, colocó su pie en puerta e impidió que el joven la cerrara.

—¿Quién eres tú y por qué estás en esas condiciones? ¿Dónde está mi abuela? —Pareció molesto.

—¿Abuela? —El joven se enojó. —Por favor, busca una excusa creíble, vete a llamaré a la policía. —Empujó la puerta.

—Eso solo sería posible si invado propiedad privada, ésta es la casa de mi abuela. —Jeno volvió a decir.

—Aquí no hay ninguna abuela. —Jaemin gritó. —¡Ahora largo!

Jeno se enojó más y abrió la puerta del jovencito, observó la cocina era pequeña y había fruta, los sillones eran negros y muy minimalista. Luego miró al joven, era sexy, sus brazos, su torso y su cabello. Demasiado bonito... Y quizá también decía la verdad.

—Largo de aquí. —Jaemin le pegó tremenda patada a Jeno en la entrepierna. —Eres un enfermo, degenerado.

Jeno cayó al suelo tratando de que el dolor se fuerza, ¿Qué le pasaba a ese maldito loco?

—¿Jeno? —La voz de una mujer afuera de la puerta se escuchó.

—¿Abuela? —Cuestionó Jeno.

—Oh, mierda... ¿Usted lo conoce señora Boa? —El jovencito miró con angustia a su vecina.

—Es mi nieto. —Contestó. —Va a empezar a vivir en el edificio conmigo. —Ella pasó a la casa de su vecino. —Supongo que se equivocó de casa y te molestó, lo siento mucho, Nana.

—Lo siento, pensé que era uno de los acosadores que me han estado mandando. —Jaemin ayudó a Jeno a levantarse. —Lo siento, no sabía que era de su familia.

—No, lo siento....

Jeno se puso de pie y no dejó que su abuela hablara, miró al tal "Nana" y soltó un suspiro.

—Lo siento, no encontré la dirección de mi abuela y pensé que era el 23-A, pensé que eras un ladrón que se había metido a casa de una pobre anciana, por eso fue muy rudo contigo, debí escuchar primero. —Jeno soltó un suspiro. —Lo lamento, espero no tener problemas contigo en el futuro... Creo que seremos vecinos.