Capitulo 53

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Narra Altagracia

Nos levantamos temprano, he dado unos mil bostezos por mi minuto, para no exagerar y decir que son por segundo, aunque creo que asi a sido, no he pegado ojo en toda la noche, primero por estar con Jose Luis en nuestra bañera romantica y despues por estar conversando con el de nuestros respectivos divorcios, hemos postergado demasiado este asunto, aunque para mi es un tramite mas, ya que esta comprobado que no necesitamos de una firma en un papel para estar juntos, estar enamorados y para esperar agrandar nuestra familia, sin embargo es hora de separarnos legalmente de ese par de engendros. Me pongo a analizar parte de mi vida, y tal vez haya sido bueno tropezarme con esa piedra de Solcito, o mas bien roca, porque asi he sabido lo que es el verdadero amor, lo que es realmente la felicidad, es bueno poder mirar hacia atras y poder analizar que existe gente mala, porque considero al que es mi esposo un mal hombre, si bien no estaba enamorado, no fue justo que se comportara tan mal conmigo, hasta el punto de anularme, de hacerme sentir insegura, humillarme y llegar a los golpes, por otro lado me analizo yo misma, dentro de mi hubo o hay una parte rebelde, lo se porque me atrevi a tener un amante... y que amante!!

Tengo miedo por Lucho, no puedo sacarme de la cabeza esto del juicio, que los jueces le crean a Eleonora y ella se quede con mi niño. eso le destrozaria la vida por completo, y de paso a mi.

Mientras Jose Luis termina de darse un baño, yo voy a la habitacion de Lucho, se ve tan tierno dormido, su boquita esta levemente abierta, me acerco despacio y me siento suavemente en una orilla de la cama para no asustarlo, me inclino y le doy un beso en la frente, para despues susurrar en su oido que ya es hora de despertar,  sonrio al ver como aprieta los ojos, lleva sus manos a ellos y las pasa una y otra vez.

-Vamos cariño... ya es hora de levantarse- Lucho pega un gran bostezo y me mira...

- Aun tengo sueño mama...- me quedo sin respiracion al escucharlo decirme mama, tengo mis teorias, puedo morir si no respiro, por lo tanto lo hago con un gran suspiro, pero estoy paralizada, ¿me ha dicho mama? ¿se equivoco? ¿o yo estoy loca?

Opto por lo ultimo

-Pero es hora de levantarse, debes ir a clases- comienzo a hacerle cosquillas, el trata de defenderse pero las risas le ganan, es un chico realmente bello, y lo digo en todo sentido de la palabra.

-Si, si me levantare, lo juro!- dice entre risas

-Entonces las cosquillas se iran!

-¿Y si no me levanto de inmediato que pasara?

-Mis manos se vovleran locas, y comenzaran a hacerte cosquillas de nuevo... y mira que eso no es lo que quiero, ellas se mandan solas

-Entonces no me levantare aun!- lo miro divertida, a Lucho le gustan las cosquillas, empiezo a mover mis manos, y las acerco a su barriga sin tocarlo aun el empieza a reir, la sola sensacion de mi aproximacion le causa risas

-Mmm... al parecer te gustan las cosquillas eh!

-¿Y a ti mama te gustan las cosquillas?- ahi esta nuevamente mi imaginacion jugandome una broma... he escuchado la palabra mama dos veces y no se si preguntar si es real o no

Lucho se abalanza sobre mi, y comienza a hacerme cosquillas, sus manitas pequeñas me rozan, sin embargo igual me rio, el parece divertirse y eso me hace feliz

¿las cosquillas le haran daño al bebe? creo que no, solo nacera un niño risueño

-Hasta mi habitacion se escuchan sus risas- nos quedamos quietos con Lucho al escuchar a Jose Luis, nos levantamos de la cama y nos quedamos mirando, hasta que nos ponemos a reir nuevamente- Lucho al baño! y usted señorita a la ducha, que aun falta el desayuno, ya es muy tarde- Jose Luis le pone toda la seriedad al asunto, hacemos gestos con el rostro y Jose Luis sigue serio

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