En el auto con mi héroe

21.2K 230 11
                                    

Estaba aburrida, demasiado. La música me hacía sumbar los oídos, la vibraciones me daban dolor de cabeza, tenía calor, y me irritaba tener que lidiar con un montón de chicos que trataban de ligar conmigo, parecían buitres acechando a una presa. Me artaban.

—Ellie, ¿qué haces? —me pregunto la rubia que estaba con Liam cuando me vio levantarme de mi asiento tomando mi bolso.

—Me voy —le dije acomodando la falda de mi vestido

—Pero... —intento decir algo pero la ignore alejandome de la mesa.

Intente pasar por la multitud de gente que se encontraba bailando, la pista del baile era amplia, pero habían demasiadas personas dentro del club, no se como pero llegué hasta la barra, y me sentía aún más acalorada. Llame al chico que servia las bebidas y le pedí una cerveza, la cual me trajo de inmediato. Tome uno de los taburetes y me senté para terminar mi cerveza, vi que mi celular vibraba en mi bolso, lo tomé viendo un mensaje de mi mejor amiga, la cual me avisaba que se había ido con un chico.

—Genial —murmure dándole un último trago a mi cerveza.

Estaba aburrida, hastiada y acalorada. Volví a intentar salir de este lugar, y como milagro divino llegue hasta la salida. El cambio de temperatura cuando salí del club me hizo tambalear un poco, eso y el hecho de que me había tomado más de ocho cervezas y mi sistema no estaba acostumbrado a ingerir alcohol. Maldije mentalmente el haber salido de mi cómoda habitación por insistencia de mis amigos, vi las calles desoladas y no me quedo más alternativa que caminar.

El hombre que cuidaba la entrada del club me miró un momento, pero después simplemente me ignoro.

¿A dónde tan caballeroso?

Ugh, odio a los hombres

Camine un par de calles, mirando para ver si venía un taxi, pero nada. Revise la hora en mi celular, pasaban de la una de la mañana.

Genial, mamá me matará

Segui caminando con la manos en los bolsillos de mi chaqueta, agradecí internamente el haberme puesto un par de bailarinas en lugar de usar tacones. Escuche pasos, y acelere al notar que alguien venía detrás de mi.

—¿A donde tan solita, preciosa? —una voz masculina habló a mis espaldas

Lo ignore caminando más rápido, estaba preparada para defenderme de ser necesario, tenía práctica en artes marciales  bueno solo fui a una clase, pero de algo podia servirme. El hombre detrás de mi seguía hablando y diciendo obscenidades sobre mi ropa, cruce en un callejón para poder evitarlo y perderlo pero tomo mi brazo dando un jalón que me dejó contra una pared.

—¿Pero que...? —trate de empujarlo para defenderme.

Saco una navaja que me dejó más pegada de lo que ya estaba a la pared.

—Quieta —pidió hablando muy cerca de mi cara.

Trague saliva cuando paso el fijo de la navaja contra mi garganta, el nerviosismo entro a mi sistema, mis manos temblaban y estaba preparada para lo peor. Ya me encontraba sollozando cuando sentí sus asquerosos labios contra mi mejilla, no se que me paso, pero estaba tan asustada de mi cuerpo solo reacciono cuando alguien sujeto al hombre por el cuello de su camisa y lo alejo de mi.

Era un chico

El chico comenzó a golpear al hombre, pero este no se la dejaba tan fácil, mire perpleja la escena donde ambos forcejearon. Al final el hombre terminó tan golpeado que salió huyendo escupiendo sangre. Quede en shock, aun estaba junto a la pared, temblando, mirando como mi atacante desaparecía entre la oscuridad. Cuando apenas pude reaccionar, vi que el chico me miraba fijamente y le devolví la mirada.

Historias eróticas +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora