El líquido rojo invadió tu boca apenas enterraste tus colmillos en aquel chico de tu escuela, Darrian Jiménez, uno de los más populares de tu escuela, se iba a armar un lío si sabían que él había muerto.
Tiraste el cuerpo al contenedor de basura y saliste del callejón sacándote la capucha, ahora faltaba su mejor amigo Dd, que seguramente estaba en el bloque hablando con su pandilla o drogandose por allí.
El sabor de la sangre seguía en tu boca mientras caminaba por las calles que solía transitar Dd, un sabor dulce con olor a rosas, delicioso ¿no?
Cuando menos lo esperaste Dd estaba frente a tu armándose un porro apoyado en una pared que tenía algunos grafitis viejos.
Era de noche, las 2 de la madrugada para ser exactos, nadie se iba a enterar si le hacías algo y nadie iba a sospechar de ti ya que nunca actuaste como si te interesaran ellos en lo absoluto.
Te abalanzaste sobre él haciendo que el porro cayera al piso al instante "te tengo bastardo", susurraste mientras lo agarrabas por el cuello.
"Yo te tengo a ti" él murmuro antes de que una navaja con un filó por grande atravesara tu cuello del lado derecho.
Diste una sonrisa burlona mientras caías al suelo, llevabas muerta desde 1819 así que una apuñalada solo te causaba un pequeño dolor.
Pero esta apuñalada era diferente, dolía como la mierda.
"Bastardo", reíste antes de levantarte del piso y irte corriendo hacia la parte del Bronx de Nueva York que no quedaba a muchas cuadras de donde estabas.
De regreso a su casa luego de ese encuentro, su piel estaba erizada mientras subía las escaleras de su casa, hoy estaba solo en casa ya que toda su familia había salido de vacaciones sin él ya que decidió quedarse en SugarHill para grabar otros proyectos de canciones que le quedaron pendientes.
Abrió la puerta de su habitación la cual estaba oscura con la ventana abierta de par en par "yo recordé dejarla cerrada" es suspiro de mala gana mientras iba a cerrarla sin antes prender la luz de su habitación.
Cuando la cerró se fue a sentar a su cama, sacó su poleron Amiri y lo dejó en el cesto de la ropa sucia.
Sacó su cadena de diamantes y la levantó en sus manos "si hay un vampiro aquí que agarre esta cadena", un silencio invadió la habitación, soltó una risa burlona y dejó la cadena en su mesita de noche.
"Lo sabía, seguramente estaba drogado y alucine... y quizás apuñale a alguien inocente..."
"Tienes demasiado ropa aquí" dijiste sorprendida mientras recorrías la habitación del chico, habías estado allí desde antes de que el hubiera llegado, los vampiros saben esconderse muy bien después de todo.
Mientras caminabas tocabas algunas cosas como, cinturones, cadenas, anillos, relojes, zapatos, etc.
"Ah!?" Él se levantó de la cama y camino hacia a ti "no toques mi mierda!" El grito mientras te seguía "esta bien, pero me quedare con esto" sonreíste mientras tomabas la cadena de la mesita de noche.
"No vas a tener nada" él dijo agarrando tu muñeca con fuerza.
"Auch?" Murmuraste mientras te soltabas del agarre "pensé que eras divertido, eres aburrido" te burlaste sacándole la lengua para luego soltar una risa por su cara de asco.
"Bueno... ya me voy y con mi cadena nuevo" comentaste mientras te acercabas a la ventana "... que eres?" Él pregunto "pues... un ser vivo... no! Un ser muerto" corregiste mientras abrías la ventana para salir.
"Un vampiro, si, si, eso soy, contento?" Preguntaste mientras te salís por la ventana "oye, si llego a venir otro día ¿pues darme otra de estas cosas?" Dijiste mientras mostrabas la cadena antes de caer por la ventana.
