Tras ser arrastrados por acciones cometidas en una vida anterior, siendo conducidos por la duda en un lamentable destino. La diferencia entre odiar y ser odiado, desaparecerá. Prisioneros, encerrados en ambos lados del espejo, habiendo atravesado el tiempo, viniendo más allá de la oscuridad, se vengarán por ti.
-¡Aquí!
Vengándote, has dado origen a nuevos rencores.
-¡No es mi culpa, sino la de ellos!
-No te permitiré ir al infierno. Te quedarás en el mundo actual, pensando en tus pecados. Y si te niegas a tu condena, las almas de tus seres queridos perecerán por toda la eternidad.
Entonces...
Debe ser horrible, ¿no, señorita Kamishiro?
-¿Sobre aquella chica?
-Me gustaría ayudarla, tanto como profesora, como superior...
-Si hay algo en lo que te pueda ayudar, sólo dímelo.
Habiendo entrado a esa página, todo cambió, realmente, mi vida ha...
-Nos vengaremos por ti, ¿no?-
Introduciendo el nombre de aquella persona...
-¿Me llamaste?
Con una reacción inesperada, me di vuelta y... ¡e-ella! ¡Era ella! ¡La chica del infierno!
-¿Jigoku... Shoujo?
-Hone-onna.(*)
-Sí, señorita. Dijo suavemente aquella joven mujer, que se convirtió rápidamente en un inquietante muñeco de paja negro.
-Aquí tienes. Si en verdad quieres deshacerte de tu enemigo, has de tirar de esa cuerda roja.
Habiendo tirado de esa cuerda, habrás firmado un contrato conmigo, y aquél ser con el que buscas venganza, será enviado inmediatamente al infierno.
-¿Al infierno?
-Pero, por vengarme por ti, harás de pagar un enorme precio; cuando se condena a una persona, dos tumbas son cavadas. Aceptando este contrato, tu alma simplemente caerá en un abismo infernal sin escape.
Mientras pensaba... ¡¿Yo también iría al infierno?! ¡¿Por qué?!
-Después de que mueras, claro está.
-¡No puede ser! ¿Por qué debería ir yo al infierno? ¡No soy yo quien merece ese castigo! ¡¿Por qué crees que acudí a ti por ayuda?!
¡Esto es feo, tan injusto!
-¿Lo dejarás? Entonces, devuélveme el muñeco.
-Lo siento. Me lo pensaré.
¡Dio media vuelta y desapareció! Ese rojizo fondo había desaparecido en muy instante.
Al día siguiente, en mi escuela, no pensé que haría algo como esto...
¡Ah!
-Esto es interesante, ¿pensaste en echarme una maldición con este muñequillo? Eres estúpida.
-Confié en ti, y esto...
-Sí. Por cierto, esas galletas que tiraste al suelo con susto, estaban riquísimas.
-¡¿...eh?! ¿Cómo sabe que fui yo quién lastiró? No puede...-
-Sería descortés no agradecerte como debiera, con algo de esto.
¡¿Eso es... ácido clorhídrico?!
Agarrándome del cabello, me tiró hacia el suelo y me lo echó en la espalda.
-Calladita.
-¿P-Por qué... me haces esto...? ¿Con qué fin...?
-No sé, lo mismo me pregunto yo. Fue un experimento muy bueno. Te lo agradezco.
-¡Detente!
-Si te callas no te haré nada. ¿Por qué no mejor hacer experimentos juntas? Si no quieres que abusen de ti, mejor abusa tú. ¡Es genial, de verdad!
-No puedo...
-Bueno, entonces mi próxima víctima... Aquella chiquilla honrada que te lo contó todo, Nakase. ¿Qué dices? ¡Sólo es un estorbo!
Qué cara tan bonita... ¿Y? ¿Me ayudarás o no?
¡Puta loca! Tenía una expresión psicópata mientras reía de manera cruda.
Yo, llorando, golpeé la botella de ácido que tenía en su mano y se derramó en el piso. ¡Ella cayó y se quemó con el ácido! ¡Mi oportunidad!
Sostuve el muñeco de paja que me había dado aquella chica, Jigoku Shoujo, y que portaba en ese momento...
-Estúpida... ¿Qué piensas hacer con esto? ¡¿A ver?!
-Hasta nunca, profesora...
(Se condece tu venganza).
Tiré de la cuerda de ese muñeco. Me duele bastante, pero, ¿era esa mi salvación?
Ahora, estoy condenada a estar en el infierno por toda la eternidad. Disfrutaré mi vida mientras pueda, que me espera en horror...
Dicen que sólo a medianoche puedes acceder al Correo del Infierno. Aquí sólo debes poner el nombre de aquella persona que odias, y la chica del infierno de asegurará de llevársela al infierno.
Es una leyenda urbana que se ha propagado entre los más jóvenes, pero, de hecho, es verdad...
Entra, si tienes el valor.
~http://jigoku.raptogame.com~
¿Hay algo que quieres proteger? ¿A una persona, un sueño, o tu destino? Esto sucede cuando un camino se separa en tres.
El caos y el desorden van convirtiéndose en forma de triángulo. Cuando ese momento llegué, la puerta de infierno se abrirá.
