Wake up [Edmund Pevensie]

•Extra 2•

________ Parkinson pov's.

Han pasado algunos años desde aquel acontecimiento, me complace decir que al fin estoy libre de aquella melancolía en la que me encontraba.
Resumiré las cosas que han pasado.
Skandar y yo entablamos una relación ya hace tiempo, estoy de lo más feliz con él, lo digo enserio. Él sabe lo que pasó y me apoyo en todo, amo que haya sido así.
Sigo trabajando en la cafetería de mis padres, me encanta tener un trabajo con el cual apoyarme y no depender de mis papás.
Sigo siendo amiga de Mateo y Bridgette, amo la compañía de ambos y agradezco que hayan estado conmigo en los peores momentos de este largo viaje.
Ahora mismo voy hacia un restaurante de la cuidad, Skandar me invitó a una cita y me dijo que tenía algo importante que decirme.

Entré al restaurante con emoción, amo cada detalle y sorpresa que él me da. A lo lejos lo vi sentado en una mesa, fruncía el ceño y era divertido verlo así.

Me acerque con cautela y me detuve enfrente.

—Disculpe, bello caballero, ¿podría sentarme junto a usted?

Él alzo su vista, haciendo que me mirará a los ojos y sonrieramos.

—Oh, lo siento demasiado, señorita. Estoy esperando a mi hermosa novia y sería un gran escándalo si se sienta en aquel lugar —me siguió el juego.

Rodé los ojos divertida. Skandar se levantó de su lugar y me abrazo por la cintura.

—Hola, linda.

Me reí por su intento de español.

—Hola cariño, ¿cómo estás?

Ambos nos sentamos y ordenamos.

—Muy bien ahora que te veo —sonrió.

Reí levemente y lo bese.

Ambos comíamos tranquilamente hasta que llegó el postre. Éste estaba servido en una copa, era helado de chocolate con algunas fresas y uvas verdes, en la cima tenía algo brilloso.

Skandar se levantó y tomo mis manos.

—_____, desde esa vez que te encontré en la cafetería no he dejado de pensarte, me traes como un tonto detrás de ti, y no sabes cuánto iba a dar por que me miraras con esos ojos tan lindos que tienes, simplemente los amo, a ti te amo.

Sonreí viéndolo.

—Y ésta noche, con este anillo, te pido que seas mi esposa, te ayudaré con tus sueños, tus anhelos, y lo más importante, con tus problemas. Quiero que seas la madre de mis futuros hijos, quiero pasar el resto de mis días a tu lado, no sabes cuánto lo anhelo. Si me dices que sí, seré el hombre más feliz del mundo, pero si me dices que no, te entenderé y esperaré, esperaré a que estés lista para contraer matrimonio con este hombre lleno de amor por ti.

Las palabras no salían de mi boca.

—Skandar, yo... —lo ví a los ojos y asentí.—sí, quiero ser tu esposa.

Ambos sonreímos y me levanto abrazándome, cuando me dejó en el suelo me besó.

—Te amo, te amo demasiado.

—Yo también te amo —sonreí y lo volví a besar.

Y así, Skandar me pidió ser su esposa, ser suya, ser la persona que lo vería el resto de su vida.

Amaba el hecho de estar con él, y no cambiaría nada de lo que estoy viviendo ahora.

Aquí acaba mi historia, con un final feliz como en los cuentos que en algún momento nuestros padres nos dijeron.

Estaba viviendo mi cuento de hadas, mi felices por siempre, y me encantaba.

The end.

¡Se acabóooo!
No saben lo feliz y triste que me siento al terminar este gran proyecto que hice desde inicios de año o desde hace uno, la verdad he perdido la cuenta.

Agradezco tanto su paciencia y apoyo, los amo demasiado <3.

Nos vemos en otras historias, ¡cuídense!

–Ari <3.