Capítulo 22

14 5 0
                                    


Se habían alojado en un hotel de la ciudad, ante el reproche de Alessandro e Evangeline, pero Emma e había negado a quedarse en la mansión, aun le parecía extraña la actitud de Emma, pero decidió que era mejor dejarla en un ambiente donde se sintiera tranquila, los D'angelo habían enviado el auto para recogerlo y estaban de camino a la gran mansión, veía como Emma restregaba sus manos unas con otras y entrelazo sus manos, lo miró y Jasón pudo ver en su rostro el miedo.

— Todo estará bien, preciosa, y en últimas si algo sale mal, nos vamos a América, tenemos una casa que buscar y que amueblar, eso sí decides vivir en América, de lo contrario viviremos donde a ti te parezca mejor.

— Gracias por estar aquí conmigo J, viviré donde sea siempre que sea contigo — su respuesta hizo que a atrajera hacia él y le besara en la cabeza.

Era la segunda vez para Jasón que llegaba a la casa de sus amigos, pero era la primera vez para Emma. La ayudó a bajarse del auto, vio a Alessandro y a Evangeline acercarse para saludarlos, ambos con una sonrisa en su rostro hacia su hija. Se preguntó si ya sabrían la verdad, solo esperaba que fueran prudentes con ella. Brock tenía razón, Emma tenía un espíritu libre, por lo que si sentía abrumada o acosada huiría de ellos y nada ni nadie la haría cambiar de parecer. Junto con los esposos venía Samantha, que al ver a su amiga se lanzó a sus brazos, era increíble el lazo de amistad que se había formado en torno a ellas dos.

Intentó soltarse del agarre de Emma, pero esta le sostenía la mano con fuerza, tenía miedo y la entendía, pero le parecía ridículo permanecer al lado de las dos mujeres con la mano sostenida de su mujer. Se separó, de las dos mujeres y se puso a un costado, el saber que no era bienvenido a esa reunión le dolía, y solo había asistido porque Emma así lo había exigido, de otra manera nada ni nadie lo había movido de su país.

— Jasón cariño que hace ahí de pie, entra eres como de la familia, aun no entiendo cómo es que se negaron a hospedarse con nosotros, me parece una descortesía de parte de USTEDES — guardó silencio.

Que podía decirles, tu hijo no me considera buen partido para su hermana, o no era bienvenido. Miró de reojo a Alex que solo le sostuvo la mirada sin decirle nada. Se preguntó, cómo es que siendo Emma la hija de un gitano podía casarse con él, pero ahora que era hija de los D'angelo, él era inapropiado.

El riesgo era el mismo, lo único que cambiaba era su apellido. Entró a la enorme mansión y se puso con la espalda apoyada a un ventanal enorme, viendo a Emma saludar a todos, la veía tensa, así que se dedicó a hacer las veces de guardaespaldas. La Vigilaría a pocos pasos, lo hicieron pasar donde estaban 10 mesas decoradas, pudo ver que en los arreglos florales se encontraban las flores preferidas de Pierre, imaginó era un detalle para Samantha.

Alessandro padre se acercó a él y le tendió un vaso de whisky.

— He visto el ambiente tenso entre mi hijo y tu ¿Hay algún problema? — Aun no sabía que responder, no sabía que tanto le había contado Alex a su padre así que decidió ser prudente, estaba por hablar cuando la voz de Emma le hizo callar.

— Parece que a su hijo no le gusta mi compromiso con Jasón, es más, él no fue invitado. A última hora retiró su invitación y si está aquí, es porque me negué a llegar sola — presionó la sien con fuerza, Emma acabaría con sus nervios de seguir así.

— ¿Es eso cierto? ¿Pero qué locura es esa? eres como un hijo para nosotros.

— Tiene sus razones señor, que ella sea mi prometida tienes sus riesgos. A pesar de que mi padre se ha preocupado por su seguridad personalmente, pero como usted sabrá aún pesa sobre ella cierto peligro

CicatricesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora