Mi adorado guardaespaldas - γιzнαи

❤️Capítulo 14⚔️

- Señor. - se escuchó desde el otro lado del auricular.

- Qué novedades me tienes Bowen? -

- Wang Yibo acaba de renunciar. Recogió todas sus cosas y se fue con el señor Song.

- Interesante...- se rascó la barbilla - ¿Qué pasó?, necesito detalles, querido.

- Solo sé que lo llamaron al despacho y estuvo hablando buen rato con su hijo, nuera y el señor Song, demoró un par de horas y salió con los ojos rojos e hinchados.

- Entonces fue muy malo para que salga llorando ese gorila. Bueno, un problema menos. Pero... Igual encárguense de él. Mi nieto carga un bastardo. Y eso Wang me la va a pagar.

- Y ¿Con su nieto señor?

- Con mi nieto... Ya veremos qué hacemos para desahernos del escuincle que espera. Pon en marcha el plan para desaparecer a Wang Yibo de una vez.

- Sí señor. - Bowen cortó la llamada y suspiró. - ¿En dónde te metiste Wang?

Bowen salió del pequeño departamento de los custodios para llamar y ponerse de acuerdo con su gente. Mientras tanto un pelinegro salía de su cuarto.

- Así que tú eres el bocón. Con mi primo no te vas a meter Bowen.

HaoXuan estaba por salir de su cuarto ya que recibió una llamada de JiYang, cuando se acercó a la puerta escuchó que Bowen hablaba por teléfono mencionando el nombre de su primo. Decidió quedarse detrás de su puerta escuchando y cuando vio que Bowen salió del departamento, corrió hacia la mansión llegando al cuarto de Zhan. Tocó suavemente la puerta y al cabo de unos segundos JiYang salía de ella.

- ¿Por qué demoraste? - El rubio hablo bajito pero lo necesariamente serio.

- Escuché algo que sé que ayudaría. Tengo que hablar con mis jefes.

- Espera. ¡¿Qué?!

- Ya sé todo amor. Yibo me contó todo. No los voy a dejar solos.

- ¡Shhhh! Zhannie no sabe nada. Vamos a buscar a mis tíos. - Aprovecharon el momento ya que el pelinegro se encontraba durmiendo.

Al llegar al despacho fueron recibidos por un "pase" de parte del señor Xiao. Ambos entraron y HaoXuan comenzó con su relato.

- Maldito Bowen! - golpeó la mesa con su puño - Mi seguridad y la de mi esposa se lo confío a él. Se le ha tratado bien. ¿Qué necesidad de hacerlo?

- Tío tranquilo.

- Señor. Hablemos con mi primo. Hay que ponerlo en sobre aviso.

- Sí muchacho, ve y hazlo por favor. - HaoXuan asiente con la cabeza, hace una leve inclinación y sale rápido del despacho para llamar a Yibo.

- Mi propio padre haciéndonos daño. Hasta ahora no lo puedo creer. - Xiao Tian se dejó caer en su silla. Ya más decepcionado no podía estar. Se preguntaba en qué momento su padre había cambiado tanto. ¿Cambiado? No... Cuándo comenzó a fingir algo que no sentía.

- Tío. - el rubio lo sacó de sus pensamientos - Tenemos que estar bien. Recuerde que no queremos que Zhan se dé cuenta y siga sufriendo.

- Lo sé hijo, ve con él. Yo seguiré revisando todos los documentos, tengo que enviarle varios a tu padre.

El rubio se despidió salió del despacho para dirigirse a la cocina a preparar algo para su amigo. Al llegar se encontró con una desagradable imagen.

- ¡Que asco!

Una parejita se estaba besando, más bien se estaban comiendo la boca.

Hanna estaba acostada en la mesa, mientras JianCheng se frotaba encima de ella tratando de quitarse ambos las ropas. Al escuchar al rubio ambos se miraron asustados, acción que hizo de Hanna lo empujara y este cayera a los pies de JiYang.