Mixtape [One shot - Spruan]

Capítulo Único

- Esto es SOLO CUBITOS, nada que ver con los streamer.

- Como pone en el resumen, es +18. Si no les gusta este tipo de contenido, absténganse. 

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Juan no está interesado en ir a TortillaLand, nombre extraño para un antro si se lo preguntan, o alguna discoteca en general. Incluso si se ha coronado como uno de los más populares en los últimos años. En primer lugar porque realmente no tiene tiempo para eso y en segundo porque vive con Robleis al otro lado de la ciudad. Como si todo el recorrido no fuera suficiente.

Sin embargo, esta vez no tiene excusas. Mayichi le rogó que lo acompañara para tener el valor de invitar a la chica más hermosa que ha visto y que resulta ser una de las bartenders que trabaja ahí. Y bueno, Juan no puede negarse luego de deberle más de diez favores a su mejor amiga.

Planeaba ir con la ropa más casual que tuviera, ya que no tenía ningún interés salvo ser solo eso, el acompañante, pero Robleis y Mayichi tenían otras intenciones para él.

Mayichi, como la diosa que es, conoce casi por completo su guardarropa y tiene que hacer un esfuerzo en encontrar algo que diga "Disponible, pero no para ti esta noche" o parecido, si van a llevarlo a una disco. Al final opta por unos caquis ajustados junto con una camiseta de un tono más oscuro para que, según ella, pudiera resaltar más sus ojos. Con la aprobación de Robleis, se dirigen a TortillaLand, casi entrada las once de la noche.

No pasan ni cinco minutos cuando Juan se siente abrumado, la cantidad de personas es exorbitante para un viernes por la noche, pero no puede arrepentirse ahora que ha llegado. Además, su amiga podría matarlo por solo desaparecer.

Por otro lado, sus amigos parecen emocionados y puede apostar que no es solo por el lugar. Juan está seguro que la razón por la cual Robleis va muy seguido al bar tiene un nombre y seguro lo llevará a su departamento esa misma noche. Lo ha pillado un par de veces sonriendo cuando regresa en la madrugada, pero no ha indagado mucho para no incomodarlo en caso su ligue lo haya rechazado. Espera que esta vez tenga suerte.

Mientras tanto, Mayichi tiene su vista puesta en un lugar específico: en la barra frente a la pista de baile. Ella no parece querer acercarse y Juan levanta la mirada para encontrar la razón.

Es la única chica preparando las bebidas por lo que es obvio reconocerla.

– Oh dios mío, es ella. - Murmura Mayichi a su lado.

– ¿La de pelo semi rubio? – Pregunta de igual modo, tampoco quiere cometer un error.

– Sí. – Responde la más baja con un suspiro.

Robleis se acerca a ellos y también observa. – Es muy linda. – Está de acuerdo.

Mayichi asiente, aún sin saber cómo dar el siguiente paso. Robleis, siendo el alma bondadosa que es, ríe y los obliga a acercarse un poco. De cerca, la chica es definitivamente muy bonita. El pelo rubio, casi castaño, amarrado en un moño alto, la blusa sin mangas le da un toque elegante y, a pesar de la ligera oscuridad, Juan distingue el color rojo pintado en sus labios.

Entiende por qué Mayichi esté encantada con ella.

– Ni siquiera sé cómo hablarle, es preciosa y yo demasiado gay para funcionar. –

– 'yichi, por favor. – Robleis niega. – Solo ve, háblale, consigue su número y nuestras bebidas. –

Pero no parece ser suficiente para convencerla. – ¿Qué pasa si no le gustan las chicas? –