Su Kidilante (Corrigiendo)

Capítulo 21 : El mejor mocoso - Interludio III

En el segundo día de las prácticas de la clase, Aizawa tiene que dejar Izuku al final de la tarde para asistir a una conferencia de padres y maestros. Todos los años, él y el resto del personal del Departamento Heroicos tenían que sentarse en las mesas y decirles a los padres lo bueno y lo malo de sus hijos. Y solo espero que no les muerdan la cabeza.

Así que aquí está, envuelto en un jodido traje, con un arma de captura envuelta de mala gana alrededor de su pecho, debajo de su camisa, un poco demasiado apretado pero bueno, al menos lo tiene con él. Puso a su hijo a dormir la siesta en casa, como si el mocoso realmente lo hiciera, pero meh podía esperar, y luego analizó algunas imágenes de entrenamiento de los actuales de tercer año. Debería mantenerlo fuera de problemas al menos. Aunque si recibiera un mensaje de texto de Tsukauchi, Aizawa no se sorprendería. De hecho, las posibilidades de que su hijo no recurriera a molestar al hombre eran muy bajas, maldita sea, probablemente debería haberle advertido que Izuku se quedaría desatendido durante varias horas. Sin duda, estaría molestando al detective en el momento en que terminara sus análisis.

"¡Shou!" Sus pensamientos fueron interrumpidos por la repentina presencia de Hizashi, entrando ruidosamente al salón. Suspirando pesadamente, Aizawa se desplomó aún más. ¿Y qué si la silla de plástico estaba lejos de ser cómoda y su espalda le gritaba? Él no quería estar aquí.

"Entonces, ¿esperas esto? ¿Estás listo? Esta será la conferencia más grande del primer año, bueno, 1-A, ¡como nunca! Es extraño tenernos a todos aquí".

"Kami, Hizashi, cállense". Aizawa no se molestó en mirar hacia arriba para ver el exagerado puchero del rubio, ni reaccionó cuando el hombre más alto se inclinó dramáticamente para dejarse caer contra él, pesando mucho más de lo que tenía derecho. Afortunadamente, antes de que el rubio pudiera comenzar a despotricar, la voz de Nedzu resonó,

"¡Bien, bien, todos están aquí! Según las imágenes de la cámara, Ectoplasm ya se está reuniendo con todos los padres en las puertas. ¿Estamos todos listos?" Hay un coro de respuestas, que varían enormemente en entusiasmo y volumen. Nedzu les sonrió a todos desde su mesa en la parte trasera de la habitación, mirando hacia su gran círculo de muebles, las mesas intercaladas con sillas colocadas tácticamente. Honestamente, esto fue más o menos un evento social. Había grupos de asientos para que los padres hablaran entre sí, luego tres sillas en cada una de las seis mesas de maestros, incluida la de Nedzu. Esperaban a unos treinta padres de toda la clase. Demasiados, si le preguntas a Aizawa.

Al principio, todo va bien. Durante cuarenta minutos, Aizawa está bien, solo habla con uno o dos padres a la vez, principalmente capaz de decir que los niños tienen potencial, pueden ser pequeños terrores, pero todos están claramente dedicados al heroísmo, incluso si muchos están luchando con los argumentos desarrollados en Hero Ethics and Laws. Sí, Ururaka-san, tu hija está comiendo lo suficiente, sus amigos y Recovery Girl lo han estado asegurando. No, Sero-san, no necesitará tutores. Sí, nos pondremos en contacto con usted si se convierte en una preocupación. No, sí, tu hijo ha hecho amigos, no, sí, sí, la mejor materia de tu hija es Literatura, sí, no...

Todo está bien. Va bien, incluso. Luego es, por supuesto, Bakugou Mitsuki quien lo inicia , desde la mesa de Ectoplasm:

"¡Bueno, por supuesto! ¡Mi mocoso de mierda es el mejor, después de todo!" Instantáneamente, la docena o más de padres en el rango de audición giran inmediatamente para enfrentar la amenaza percibida.

"Sobre eso...", comienza Jirou Kyotaku,
"Mi Kyoka es la mejor hija que un hombre podría desear, y-"

"Ahora mira, Kouji puede estar callado pero será el mejor héroe-" Los ojos de Aizawa tiemblan.

"Hitoshi ha enfrentado cosas que ninguno de tus-"

"Shouto es el mejor-"

"Tenya es la más dedicada-" Todos los padres se están uniendo ahora y el héroe clandestino sería estúpido si no se diera cuenta de cómo Hizashi lo mira con lascivia por su mandíbula apretada y su creciente mirada. Están todos equivocados...